Cuatro cargó a Zac y lo llevó a la enfermería para que lo vieran, así podría recuperarse de lo que fuera que le pasase.
-¿Que le sucede a mi amigo?-preguntó Cuatro
-No lo sabemos, todo parece estar bien-respondió la enfermera
-Uno no se desmaya si esta bien-dijo Cuatro
-Puede ser solo cansancio-añadió la enfermera
-Si pero algo me dice que no es así-expuso Cuatro
Al final se fue a la espera de que su amigo se despertase, Zac era una de las pocas personas en las que Cuatro confiaba.
Sin embargo debía continuar con el adiestramiento de los iniciados y en ausencia de Zac, Eric tomo su lugar para vigilar a Cuatro. A todos se les hizo raro no ver a Zac, sobre todo Ronin pero que podían hacer ellos al respecto.
Ya casi estaba por terminar la primera fase de la iniciación, hoy les tocaba maniobras, si las superaban pasarían el corte para continuar con la segunda fase y que era la más dura.
-Chicos no es fijasteis estos últimos días-dijo Tris
-Si lo dices por no ver a Zac si-dijo Christina
-Cierto y me preocupa-añadió Ronin
-No me digas que te gustar Zac-dijo Tris
-Bueno...-
-La verdad es que es guapo-
-Coincido contigo pero no es mi tipo-agregó Tris
-Ya dejen eso-protrestó Al
-Apoyo eso-añadió Will
-De acuerdo pero porque no vas a ver a Zac a su casa-dijo Tris
-No se donde vive-dijo Ronin
-Porque no le preguntas a Cuatro, los dos son amigos-dijo Christina
Ronin asintió y fue a buscar a su instructor, Christina tenía razón, Cuatro parecía llevarse bien con Zac. Él quizás sabría decirle lo que quería saber, se lo encontró saliendo de la tienda de tatuajes y se acercó.
-Cuatro-
-Si Ronin, ¿qué es lo que necesitas?-preguntó Cuatro
-Quería hablar con Zac, hace días que...-respondió Ronin
-Ven vamos-dijo Cuatro
Ronin siguió a Cuatro hasta la enfermería, le pareció raro pero cuando vio a Zac en la cama lo entendió.
-¿Que... que... le pasa?- preguntó Ronin
-No lo saben, se desmayó un día, así sin más, lo traje para que le vieran y desde entonces que esta así-Cuatro observó a Ronin-Te dejaré un rato a solas-
[ ]
Zac despertó en una camilla, imaginó estaría en la enfermería de Osadía pero se equivocaba, no estaba allí. En realidad estaba en una habitación poco iluminada, se fijó que tenía una vía que iba a su brazo, en cuanto la vista se le acostumbró pudo ver que al lado había otra camilla.
Había alguien tumbado en ella, se recostó y descubrió que la persona a su lado era Ronin, inmediatamente se arrancó la vía sin preocuparse del dolor.
Zac se acercó a ella, estaba inconsciente, tenía una vía a su brazo y conectada a un gotero, además había unas máquinas que vigilaban su ritmo cardíaco y sus constantes vitales.
¿Dónde estaban? ¿cómo habían llegado allí? ¿qué era lo que estaba pasando? ¿se debía a lo de ese extraño suero que Cuatro le había enseñado?
Todo eran preguntas sin respuesta, Zac creía que si era por lo que Cuatro le había enseñando y quizás estuviera en lo cierto pero eso ya lo averiguaría en otro momento. Ahora lo importante era Ronin, le acarició la mejilla y se dispuso a quitarle los cables que controlaban sus constantes vitales.
-¿Cómo te has despertado?-dijo una voz desde la puerta
Zac se giró y vio a un hombre alto con bata blanca, de pelo canoso y ojos marrones pero al mismo también azules, uno de cada color. Por lo que sabía eso era un caso raro conocido como heterocromía, en la que la persona tenía los ojos de distinto color. Su rostro era algo serio y sus facciones eran duras, además sus ojos no reflejaban emoción alguna.
-No deberías estar despierto-dijo el hombre
-¿Quien es usted?-preguntó Zac
Tenía miedo, él no era de los que se asustaban con facilidad pero ese hombre lo aterraba y no sabía bien porque.
-Eso no es relevante, ahora alejate de ella-dijo el hombre
-No le haga daño-suplicó Zac
-Interesante pero no, la necesitamos viva-dijo el hombre
Zac observaba a ese hombre intentando descifrar lo que pretendía hacer pero nada revelaba sus intenciones y su instinto no dejaba de advertirle que debía huir, que corriera. Sin embargo no podía, no dejaría a Ronin con ese sujeto, además tampoco era un cobarde, si tenía que luchar lo haría y más si era para proteger a la chica que le gustaba.
-¿Donde estamos? ¿que quiere?-preguntó Zac
-Eres curioso y osado. Sin duda divergente. Ya veo porque estas despierto, aunque eso me dice que eres más fuerte que ella-respondió el hombre
-¿Divergente? De eso va todo, nos habéis metido en un mundo ficticio-
-Inteligente también pero te faltan muchas piezas-
-No se lo que sea que quieran pero no dejaré que...-Zac se puso en posición de defensa-Antes tendrás que acabar conmigo-
-También te necesitamos vivo aún al menos-aclaro el hombre
Entonces entró un segundo hombre, este era más fuerte, también llevaba bata blanca y por su apariencia parecía ser ruso.
-Así que despierto-dijo el hombre que acaba de entrar, si su acento lo delataba, era ruso
-Si y es divergente-le anunció el otro hombre
-Metamosle de nuevo-dijo el ruso
Los dos hombres se acercaron a Zac, el ruso lo tumbó en la camilla mientras el otro lo preparaba todo, después a pesar de los intentos por soltarse le colocaron la vía de nuevo en el brazo. Su intención era que cayese en un estado de inconsciencia para meterlo de nuevo en el mundo de Divergente pero Zac seguía estando despierto observando a eses dos hombres.
-Sube la dosis-dijo el ruso
-Enseguida-obedeció el otro hombre
-Lo hiciste ya-preguntó el ruso
Zac todavía estaba consciente tratando de forcejear para soltarse del agarre del ruso pero era mucho más fuerte que él.
-Si, le he puse más del doble pero no parece funcionar-respondió el otro hombre
-Vaya, esto es interesante-El ruso analizaba la situación-Debería estar inconsciente con la dosis tan elevaba. Habrá que dormirle-
-Soltadme-pidió Zac
Todo fue en vano porque eses hombres no estaban dispuestos a soltarlo, ni a dejarlo ir, por lo menos no después de haberles visto la cara.
-Cállate niñato-escupió el ruso
-¿Qué hacemos?-dijo el otro hombre
-Llevarlo al sótano y encadenarlo mientras no descubrimos que es lo que ha pasado-zanjó el ruso
-Pero entonces que pasa con su...-
-Nada, esto forma parte del experimento-
El otro hombre agarró con rabia a Zac mientras que él ruso tocaba el gotero de Ronin y una de las máquinas empezó a pitar.
-Dejarla, no le hagáis nada-Zac grito mientras luchaba por soltarse-Por favor, no...-
Zac fue arrastrado por el suelo hasta una de las celdas que había en un sótano, lo empujaron dentro, lo encadenaron a la pared y lo dejaron solo. Era una fría, oscura y pequeña celda en la que no había ni siquiera iluminación.
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Dentro de Divergente® (Zac Efron y Nina Dobrev)
FanfictionPortada hecha por @karlaLightwood ¿Qué pasaría si un día te despertases y todo fuera diferente? ¿Y si estuvieras en un mundo ficticio? ¿Qué sucedería entonces? Un extraño e inexplicable suceso lo cambia todo, pérdida en un mundo que no existe, al me...