Capítulo 38

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Narra Kimberly

Los días pasan rápidos, cada vez estoy más cerca de tener a mis hijos en brazos, pese a que estoy cansada y me encuentro con Ramiro al lado dormido, decidí hacerlo.

***

Desperté porque siento algo humedo en la cama, miro mis piernas y veo que soy yo que voto el liquido,he rompido fuente, estoy asustada.

-Ramiro-Grite asustandolo.

-¿Qué pasa amor? La cama está humeda ¿todo está bien-preguntó nervioso.

-Se me rompió la fuente-Agrege al fin.

-Intenta cambiarte, yo haré lo mismo y le dire a Rosalía que prepare dos bultos con las ropas de los bebés-Asentí.

Me puse un vestido como pude y Ramiro me ayudo a montar en el auto, Rosalía se monto en el asiento trasero del auto y Ramiro arranco bien rápido.

Después que llegamos,me entrarón a el quirófano y me pusieron algo y no recuerdo nada, porque todo se puso negro.

Narra Ramiro.

Estoy tan feliz de que al fin el momento esperado llegó, tendré a mis dos pequeños en brazos, me siento completo ya.

Los doctores no dicen nada más que todo está en orden que me espere, yo no quise entrar pues me da miedo. Entró Rosalía y yo estoy sentado en la sala de espera.

-Ya puedes pasar, es la habitación 312 -Dijo una nefermera, estatura mediana, ojos verdes y cabello rubio.

-Okey gracias señorita-agradecí

-No hay de que señor-Aclaro.

Camine hasta la habitación, abri la puerta y allí la observe, acostada con una sonrisa en los labios, como que ya su mundo está complero igual que el mio. Me observo un buen rato.

-Al fin ya nacierón los pequeños, Adrisse y Aiden, son tan hermosos amor, salierón a ti,que envidia me da, mis dos pequeños no tienen nada de mi-Agrego emocionada.

-Estoy tan orgulloso de ti amor, quiero verlo ¿Cuándo lo van a traer?-Pregunté.

-Aqui están-Dijo la enfermera que me mandó hasta está habitación.

-Gracias señorita-Agradecí nuevamente.

-No hay de que y no me digas señorita me llamo frieda, un placer a ambos-Agregó emocionada, creo que le he caido bien.

-El placer es mio, me llamo Ramiro, Frieda ¿A quien se parecen estos dos pequeños? ¿Verdad que es a ella?-Pregunté.

-Bueno Ramiro, esos dos pequeños con idéntico a usted-Aclaro Frieda.

-Eso le dije yo y no me quiere creer-Agregó mi novia.

Fiedra le dio al pequeño Aiden a los brazos de Kimberly y la ayudo a amamantarlo y hizo lo mismo con Adrisse y nos dejo un rato con ellos y luego se lo llevo.

-El placer es todo mio, idiota-Dijo celosa.

-Amor solo tengo ojos para ti-Aclare.

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