NUNCA TE DEJARE IR.

CAPÍTULO 5

Alice

- Amor, ultimamente te he notado rara. ¿Te está pasando algo? -Me pregunto Jasper entrando a la habitación.

- ¿A quien? -me hice la confundida y el me miro- ¿A mí? -volví a preguntar.

- Y si Alice, somos solo dos en esta habitación -y se sento al lado mio en la cama mirando al frente.

- Pero puede a ver una tercera, ¿no amor? -el volteó a verme preocupado.

- ¿A que te refieres Alice? -preguntó algo alterado.

- A niños amor. ¿Por qué tan alterado? -y solté una risita- ¿Pasa algo? ¿me estas escondiendo algo, Jasper?-

- No amor, solo preguntaba -y soltó una risita mas falsa posible- Y nena, no te estoy escondiendo nada -besó mis labios, sus besos son como tocar el cielo.

-Amor, me voy al trabajo, cualquier cosa me llamas hermosa -me beso y se fue.

Jasper

Estaba yendo contento a mi oficina y encuentro a Savannah, esta niña no entendio que no quiero nada con ella. Mi mundo estaba bien sin ella, y de pronto aparece arruinandome todo el bendito día. Maldita prostituta.

- Dime Savannah, ¿que haces aquí? -pregunté algo alterado.

- ¿Que haces aquí? -dijo eso e hizo una sonrisa.

- Que graciosa, no estoy para jueguitos, así que por favor, ¿te puedes retirar? Gracias -y abrí la puerta para que se retire. Y se fue.

Para lo unico que sirve es para arruinarme todo.

Estaba haciendo unos trámites y entro mi secretaría Emma.

- Señor Jasper, su esposa esta aquí.

- Dile que pase, y Emma por favor. Dime solo Jasper, gracias.

- ¿Como cree señor? Yo no ouedo tutearlo a usted.

- Que nacía eres Emma. Bueno, dile a Alice que pase, puedes retirarte.

Y detrás de ella entro mi bella Alice, la mujer que ilumina mis días, la mujer que hace que mi vida sea mejor. Por ella es que sigo aquí, como amo a mi esposa. Que bien suena eso. Me encanta.

- Amor, estoy muy triste -e hizo una carita tan tierna-

- Oh mi reina, ¿que esta pasando?. No pongas esa carita por favor -quité unos mechones de su rostro.

- Es que me llego un mensaje de una persona que decía "Cuida a tu marido perra, porque cualquier mujer mucho mejor que tú puede enamorarlo y darle lo que tu no le das y lo que no tienes. Besos perrita" leí eso y vine rápido hasta aquí. No me gusto para nada leer eso -Y lágrimas calleron de sus ojos, como me duele verla así.

- ¿Pero quien fue capaz de mandarte tremenda grosería?. Amor mirame -la tome del mentón para que levantará su rostro- escuchame, yo a ti te amo, y nadie va a poder estar en tu lugar. ¿Entiendes? -y la bese tan apasionadamente- vamos a casa.

Bajamos por el ascensor y subimos a mi coche.
Seguro la que le mando ese mensaje a Alice fue la maldita de Savannah. Pero esto no va a quedarse así, si quiero sexo, esta bien, le contrataré a alguien, pero esto se acabo. Hasta aquí llegue, no voy a permitir que lastime a mi niña.

- Amor, ¿Que tanto piensas? -interrumpió mis pensamientos con su dulce voz.

- Oh nada amor, cosas les trabajo -e hice una sonrisa de lado.