Querido Gerard :
Ya pasaron tres días y todavía no obtengo una respuesta. ¿Por qué no quieres hablarme? Sigo dudando de si te llegaron mis otras dos cartas, por favor dime si te llegaron.
¡Ah si!.. me despidieron, ya que mi jefe nos sito a todos a las seis de la mañana, diciendo que habían entrado a robar y que justo mostraban en la cinta que yo tome, Ja ja, después de algunos minutos, finalmente cedí. Le conté todo, cómo me sentía sobre que vos y yo tuviésemos una conexión. Luego de contar mi historia, todos en la sala me veían asombrados. Esperé. De pronto, mi jefe rompió la tensión «Iero, estas despedido. Vete y no vuelvas jamás» dijo.
Ese maldito idiota, siempre me trato como mierda. Ha estado sobre mis talones desde el día que me dieron el trabajo, juro que estaba esperando que cometiese algún descuido para poder justificar despedirme. Y a la vez que tengo un desliz de entera. ¿Por qué no me comprende? ¿Acaso no entiende que estamos hechos el uno para el otro? Cualquier hombre hubiese entendido, cualquiera en mi puesto hubiese hecho lo mismo, ¿Verdad?.
Te he estado buscando mucho últimamente, sin trabajo tengo todo el tiempo del mundo para aprender cosas sobre ti. Hoy conduci hacía tu departamento, se ve muy bien, mejor que el mío. ¿Sabías que vives a sólo kilometro y medio de mi edificio?. Pregunté para verte muchas veces, pero me dijeron que no pasabas ahí todo el tiempo. Me sentía más desanimado, pero estaba decidido a verte de nuevo.
Después de unas horas de preguntar, opté por quedarme en el estacionamiento esperando a que vinieses, y después de varias horas esperando lo hiciste. Era tarde por la noche, creo que al rededor de las nueve. Te vi parquear tu coche y salir. Sentí una oleada de calor al ver tu cara de nuevo, sé que tengo la cinta para verte pero no sé compara con verte en vida real.
Me aseguré de grabarlo todo para más tarde cuando esté en mi casa, esta vez con una cámara de muy buena calidad. Quería capturar tantos detalles como fuesen posibles, no tenía idea de cúando sería la proxima vez en que te vería y la cinta ya no era suficiente para mi.No puedo sacarte de mi cabeza núnca más, núnca. Todo lo que hago es ver ese video que grabé para ti una y otra vez, Gerard, quiero que estés conmigo para siempre. Quiero despertarme en las mañanas y tenerte a mi lado.
No puedo esperar a verte de nuevo.
Con amor, Frank.