Caminando Junto A Ti

Te deseo

Yo...-trate de analizar una respuesta pero no sabía que decir anta aquello

-a qué hora sales del trabajo –pregunto sin mas

- a las 7-dije mientras agachaba mi vista y seguía limpiando la mesa

-vengo por ti-no me dio tiempo a protestar cuando él se fue del establecimiento.

Después de las horas de trabajo en algunos tiempos libres me ponía a adelantarle a mi tarea para cuando llegara a mi casa no hacer tanta, en ningún momento me volví a topar con Adam y es lo bueno no quiero pasar otra vergüenza enfrente de, el.

A las 7 me despedí de Wendy y camine hacia la salida del establecimiento, el sol ya se está ocultando y el frió aparece, en estos momentos es cuando me arrepiento de no cargar doble sudadera.

Empecé a tomar camino hacia la parada de autobuses.

-a donde crees que vas-pregunto Henry, solo quería evitarme la larga charla de porque se lo oculte pero ya veo que será imposible.

-no solo que pensé que no vendrías, digo estabas ocupado con Vanessa no –parece que mi boca tiene algo que ver con mis estúpidos celos y no puedo evitarlo me duele verlo con otra pero si él es feliz yo igual.

-solo vamos a mi carro-dijo tomándome de mi brazo y arrastrándome hasta su auto.

Me abrió la puerta de su auto y me metí en el respire hondo.

-porque no le lo dijiste-pregunto ya un poco más tranquilo

-porque sabría que reaccionarias de esa manera-vi por la ventana no quería verlo a los ojos.

-acaso es posible que tus padres te dieran permiso de trabajar después de clases –pregunto voltee a verlo y vi como a poco sus sus cejas se juntaban y su frente se fruncía y aparecían aquellas arrugas. Se me hacía demasiado tierno cuando hacia eso.

-si-susurre mas para mí que para responderle no quería que preguntara porque permitían eso mis padres, sabía qué diría que quería darle lastima según el siempre decía eso y no lo aguantaría mas.

-está bien creo que exagere es hora de que vuelvas a casa-encendió el auto y tomo camino hasta mi casa después de unos 10 minutos llegamos a mi casa.

-quieres entrar-pregunte tenía mucho que no pasábamos tiempo juntos

-claro porque no me gustaría saludar a tu madre y ver como esta tu padre -aparco el auto y salimos.

Caminamos hacia la entrada y la puerta estaba cerrada, busque la llave en el masetero que se encontraba al lado de la entrada y entramos.

-mama, papa-grite mientas tomaba camino hacia la cocina, en el refrigerador había una nota de mi madre.

Hija saldremos a visitar a la tía Sandra regresamos más tarde hay comida en el microondas caliéntala y come.

Con cariño tu madre

Deje la nota en la mesa y tome camino hacia mi cuarto.

No vas a comer-pregunto Henry siguiendo los pasos hacia mi cuarto

-no tengo hambre –dije entrando a mi habitación, no era la primera vez que el estaba en mi habitación, mis padres le tenían demasiada confianza para dejarlo andar como si fuera su casa. Hubo un silencio incomodo entre los dos por unos segundo

-veo que pintaste tu cuarto-pregunto, mientras se tiraba en mi cama y tenía su vista explorando cada rincón de mi habitación

-digamos que el color que tenia era muy extravagante para mis gustos-conteste mientras sacaba mis apuntes y la tarea que me falta y acomodaba en mi escritorio para acabar con ella.

-que aburrida me invitas y no es por sexo-dijo Henry burlándose de mí.

Tome un mi cuaderno de apuntes y se lo avente, levanto su vista y sonrió, hay dios que hice Salí corriendo hasta el baño ya sentía la victoria en mi pero tropecé con un tenis tirado en el pasillo me alcanzo y me alzo hasta volver a mi cuarto y tirarme en mi cama y que él se acomodaba arriba de mi mientras me hacia cosquillas, me retorcía de la risa.

-para....por favor para-seguía con mi risa hasta más no poder mis mejillas ardían y mi estomago dolía

-di después de mi-dejo de hacerme cosquillas y me miro directamente-Henry te deseo-por una parte se me hizo estúpida lo que tenía que decir para que dejara de hacerme cosquillas, pero por otro lado si lo desea deseaba aquel niño que conocí en el jardín de niños que me defendió de aquellas personas.

-no-dije mirándolo seriamente no lo iba a admitir pero el no sabrá que es verdad.

Sigue con lo suyo mientras yo me rotorcia de la risa

-Henry te deseo-confesé

-que, que no te escuche-dijo mientras no paraba

-JODER QUE TE DESEO-dije mientras mis ojos dejaban correr las lagrimas por tanta risa no aguantaba más, Henry limpio esas lagrimas nuestras caras estaban demasiado juntas el miraba mis labios y luego me miraba a los ojos, en cerio deseaba esos labios, quería que eso pasara, poco a poco fuimos cortando la distancia.

No podía crear que después de tanto tiempo esperando este momento hoy sucediera.

-HIJA YA LLEGAMOS-grito mi padre desde la entrada, no podía creer que justo en este momento llegaran, Henry no se movió seguía hay viéndome queriendo decir algo pero no lo hacía.

Tocaron mi puerta y el se movió de encima de mí y fue a abrir.

-Henry que sorpresa verte aquí –dijo mi papa en mi puerta viendo a Henry

Los dos se estrecharon en un fuerte abrazo.

-bueno Henry fue un gusto espero que no desaparezcas otra vez los dejo-dijo mi padre dándose la vuelta y caminar por el pasillo escalera abajo.