Se acomodó en su asiento y asintió. En mi pecho albergó un poco de alivio y tranquilidad, esa que necesitaba con urgencia desde aquél momento en el que toda esta zozobra dio comienzo para mí.
Suspiré profundo antes de relatar aquella historia que aclararía de una vez por todas todo este embrollo.
-Todo empezó cuando la partyfan ya iba llegando a su fin. Georg y yo nos fuimos a la barra para beber unos tragos y compartir un rato más para luego poder irnos... -comencé a narrarle con lujo de detalles lo que en verdad había ocurrido, sin saltarme nada. Incluso me fui dando a la idea del por qué mi ex mejor amigo me había hecho lo que me hizo, cosa que hasta día de hoy, seguía sin poder creérmelo-. Entonces la invité a tomar un jugo, pero ella se negó y nos quedamos charlando durante un buen rato sobre la gira y cosas sin mayor importancia, hasta que cada uno luego siguió por su camino, y eso fue todo. Tú ya sabes como son los medios, inventan cualquier cosa para armar un escándalo ni el verraco -sonreí de lado, al ver que con el último término que había pronunciado, logré sacarle una diminuta sonrisa-. ¿Ahora sí me crees a mí? -su mirada descendió a sus manos, con las cuales jugaba, viéndose notoriamente nervioso. Me levanté, yendo a sentarme al lado suyo. Agarré su mentón y busqué sus ojos para conectarlos con los míos. Sus pupilas brillaron y sus pómulos se tornaron rosados-. Yo a tí te amo Bill, más que a nadie en el mundo, y por eso jamás te mentiría.
-Tom, yo... -sus palabras salían como un suspiro que el viento se llevaba. Tan mansas, tan agudas pero agradables al oído. Exhalé profundamente, al declinar la vista hacia sus pomposos y sonrosados labios. Se me hacía agua la boca por volver a probarlos.
-No sabes cuanto me estoy aguantando las ganas de robarte un beso en este preciso instante -su labio inferior tembló ligeramente, y la pequeña nuez en su garganta, se movió cuando tragó saliva.
-N-No es que no te crea, lo que pasa es que me dolió mucho aquella noticia -se liberó de mi agarré, girando el rostro en otra dirección.
-Pero ahora sabes la verdad -entrelacé nuestras manos, y deposité una tierna caricia en su mejilla-. ¿Vas a dejar que todo lo que hemos vivido durante estos meses se vaya a la basura por chismes de la farándula? Pensé que ya eras consciente de que cosas como estas iban a pasar, amor.
-Y lo estaba, pero... -enmudeció.
-¿Pero? -su falta de argumento me hizo dar cuenta de algo, Bill quería que las cosas se resolvieran, sí, pero por otra parte quería seguir discutiendo, ¿para qué? ni yo mismo lo sabía. Pero yo no iba a permitir eso, claro que no, las cosas debían resolverse ya-. Bill no busques pretextos, entiendo que te cueste perdonarme por algo así, y que aunque yo no haya incurrido lo que se supone que cometí, siento que es mi deber pedirte disculpas.
-No es necesario que lo hagas... El que debe pedirlas soy yo. Fui un completo imbécil por haber siquiera dudado de tí -sus ojos se cristalizaron, amenazando con derramar lágrimas. Mi corazón se encogió. Me dolía mucho que mi dulce niño llorara.
-No Bill, eso no es verdad. Escucha, mírame -volteó a verme, dejando percibir, el camino que una gota había dejado al resbalar por su mejilla. Pasé mi pulgar por la casi inexistente humedad que había quedado-. No llores precioso, ¿sí? No es tu culpa, comprendo que te hayas puesto a la defensiva...
-No Tom -interrumpió-, no estaba a la defensiva, estaba atacándote, echándote en cara que todo lo que había en esa maldita revista era cierto, cuando ni me detuve a pensar en oír tu versión del asunto.

ESTÁS LEYENDO
El Chisme [1tp]
FanfictionUna ruptura inminente termina con una maravillosa relación, sostenida desde hace 8 meses. ¿La razón? Chismes de la farándula. ¿Será más fuerte el orgullo antes que su propio amor? ¿Podrá separarlos la desconfianza? ~*~ Todos los créditos de la incre...