KIZNAIVER FANFIC - EL DÍA QUE LA CONOCÍ

¡¿Eh...?! ¿Sex-Sexo?

Tras unos meses, concluimos la misión. La ultima Kiznaiver había sido difícil de encontrar.

Su nombre era Maki Honoka, y estaba en la misma clase, junto con Chidori, Nico, Sonozaki y yo. No solíamos hablar, normalmente solo preguntaban sobre, quien había causado el dolor. Así que no eramos exactamente compañeros, solo estábamos ligados por las marcas de Kiznaiver.

Después de clases, me reuní con Chidori, para hacer las tareas. Luego de terminar, nos dirigimos a casa, al llegar a casa. Me lance a la cama, y no pensé en nada más, me levante y tome un vaso de agua. Entre al baño, para tomar una ducha, ya que hacia mucho calor.

Mientras me bañaba, la marca se ilumino. Mire para ver de que se trataba y decía: "Nueva Misión: Dos Kiznaivers tendrán que intimar" Era más que obvio a lo que se refería con eso, pero llego un nuevo mensaje, el cual se separaba en dos puntos y decía: "Sera entre una chica y Katsuhira Agata. -De no cumplir la misión en menos de 24 horas, todos los Kiznaivers morirán." 

Salí del baño, secando mi pelo. Mire el celular y estaba repleto de mensajes.

-No debí haberles dado mi correo. -dije.

Tener sexo o morir, no eran dos buenas opciones, a decir verdad. Pero, ¿nos podiamos negar? El segundo mensaje decía explicitamente, todos morirán, de no cumplir la misión en menos de 24 horas. Como sea, no me importaba hacerlo, después de todo nunca he sentido ni una pizca de amor, ni por mis padre y era obvio que no sentía nada por ellas. Tocaron la puerta y abrí, todas las otras Kiznaiver entraron en mi casa y empezaron a discutir.

-¿Eh...? Nadie me dijo que nos reuniríamos en mi casa.

-A quien le importa. -dijo Maki.

-A mi, es mi casa después de todo.

-Tenemos que resolver esta situación. -dijo Sonoaki.

-Y... ¿Que proponen que hagamos? -pregunto Niiyama.

-Una de nostras se tiene que acostar con Agata. No hay de otra, a menos que quieran morir. -dijo Maki.

-No me interesa. -respondí-. No me acostare con nadie. Si quieren matarme que lo hagan.

-¡Que demonios dices! ¡Nos mataran a todos! ¡Que egoísta! -grito Maki.

-Tranquilízate Maki-san. -dijo Sonozaki.

Tras unas horas se marcharon, y quede dormido. Durante mi sueño, vi extraños sucesos, pero no le tome mayor importancia. Al despertar, faltaban 11 horas hasta que terminara el tiempo limite, eran alrededor de las 6:00 a.m., intente levantarme para alistarme. Sin embargo, sentí un peso en mi abdomen y quite la sabana, y allí estaba Chidori, acostada sobre mí.

-Oye... ¡Chidori! ¡Me escuchas!

-Si.

-Levántate entonces, tengo que ir a clases.

-¡No! -grito.

-¿No?

-No te dejare ir a ningún lado. -dijo-. No me interesa tener que perder mi virginidad, si es para salvarlos a todos.

-No lo haré. Ya lo había...

Chidori no me permitió terminar de hablar y me beso, sentí como su lengua entraba delicadamente en mi boca. Me deje llevar y tomé su trasero con su mano, para que se separara de mí, ya que no la forzaría. Sin embargo, no hizo nada, siguió moviendo su lengua dentro de mi boca, acariciando mi lengua.

Subí mis manos hasta su espalda y la aferre a mi cuerpo, en un impulso, la tumbe y me coloque sobre ella, la bese una vez más, me encantaban su cabello, sus labios, sus ojos, todo. Le quite la camisa y subí su sostén, chupe sus pezones, su sudor era dulce, me encantaba. ¡Me volvía loco! 

Pasee mi lengua por su abdomen y baje hasta su entre pierna, al intentar retirar sus bragas, ella me detuvo.

-Es solo... que no me siento preparada.

-Entonces iré más de espacio.

Sonrió, me acerque y le di un beso. Metí mi mano en sus bragas y acaricie su clítoris , mientras la besaba, ella gimió y nos separamos. Toque más a fondo y metí uno de mis dedos en su vagina, ella no aguanto más, y se vino.

Me senté en la cama, no podía creer lo que estábamos haciendo. Pero ella bajo de la cama y se sentó en suelo, frente mí. Desabrocho mi pantalón y bajo mi cremallera, sacó mi pene y le lo lamió, desde la base a la punto, le dio un beso y lo metió en su boca, sentí como todo mi cuerpo se electrizaba. 

Rodeo mi pene con sus senos y con ellos frotaba mi pene, subiendo y bajando, mientras enterraba mi pene en su garganta. No aguantaba más y tome su cabeza, estaba a punto de venirme, subí mi cintura y tire de su cabeza. Trago todo mi semen, sin que una sola gota se le escapara. Subió a la cama y la bese una vez más, me quite la pijama y la ayude a quitarse su falda.

Se acostó boca arriba frente a mí, puse mis manos a cada lado. 

-¿Estas segura de esto? No sé, debe haber alguien que te gusta, ¿por qué deberías hacer esto con...?

Puso su mano en mi boca, evitando que terminara de hablar.

-Estoy segura, porque tu eres esa persona.

Mi dio un beso rápido y se separo de mí. Separe sus piernas, y ella se sonrojo.

-No mires. Es vergonzoso.

-Tranquila. También es mi primera vez.

Tire de ella hacia mí, tome mi pene y lo introduje en su conducto vaginal, gimió. Sentí una barrera, que no me dejaba continuar y aplique un poco más de fuerza. Chidori chillo y note que unas pocas gotas de sangre salía de su vagina. 

-Esta bien, si quieres lo dejamos aquí.

-¡No! Sigue.

Empece a moverme y ella hacia su mayor esfuerzo por no llorar. Seguí y comencé a moverme más rápido, se sentí cálido y húmedo en su interior, mi pene se regocijaba dentro de ella y el cuerpo de Chidori se estremecía. Continué y cada vez, se sentí mejor, Chidori enterró sus uñas en mi espalda, pero no sentí dolor alguno, pero me estremecí completamente. Estaba por llegar al clímax y ella me empujo y se puso sobre mí, empezó a moverse bruscamente. ¡Me encantaba! Le seguí el ritmo.

-¡Chidori! ¡Estoy por acabar!

-¡Hazlo dentro! ¡Yo también estoy por terminar, hagamoslo juntos!

Me vine junto a ella. ¡Se sintió genial! Nuestras muñecas se iluminaron y ponía: "Misión Completa" ¡¿Acaso nos espían?! ¡Malditos cerdos!