Fame. [Tom Holland]

VII.

Froto mis muñecas para impregnar un poco de perfume en ellas.

Reviso mi aspecto nuevamente en el espejo.

Vamos Amberly, no seas ridícula.

Es Tom, ¿que podría salir mal?.

De todos modos no es como si fuera una cita, ¿o si?.

Busco mi celular entre el desorden que he dejado en el tocador, reviso la hora en este y son las siete con tres minutos.

Es hora.

Reviso que todo este en orden una última vez y cierro la puerta de mi habitacion, ¿debería bajar a recepción y esperarlo?
Le aviso a Simon, mi mánager, que saldré para que no se preocupe, esta demasiado ocupado en su ordenador como para prestarme atención.

Entro en el elevador y me dirijo hacia la recepción.

Siento como mis manos están ligeramente sudadas, que horror.

Las puertas del elevador se abren y para el momento en que lo hacen me convierto en un manojo de nervios.

Pero entonces veo a Tom en la entrada del hotel y él sonrie nerviosamente, ahora me siento mejor.

"Hola guapa" Tom me saluda y yo no puedo evitar sonrojarme.

"Holland" que excelente saludo Amberly, por Dios.

"¿Lista?" me pregunta mientras salimos del hotel, el ambiente está un poco fresco.

"Preparada, más bien" contesto, Tom pide un taxi y nos subimos a este, hasta ahora me doy cuenta que no tengo idea de a donde nos dirigimos "¿a donde vamos?, ¿vas a secuestrarme?".

"No voy a secuestrarte a menos que tú quieras" me río, Tom llega a confundirme de cierta manera, puede soltar comentarios con toda la confianza del mundo y otras veces sólo parece un cachorrito perdido.

Pasamos veinte minutos metidos en el taxi, estamos en el centro de la ciudad por lo que el tráfico está algo cargado, mientras tanto Tom habla de lo emocionado y feliz que está acerca de ser el nuevo Spider-Man sus ojos brillan y su sonrisa es tan grande que llegan a marcarse unas pequeñas arruguitas en sus ojos, me gusta observarlo mientras habla.
También hablamos acerca del nuevo disco que estoy preparando.

"La verdad es que a veces puede ser un trabajo algo agotador, pero no lo cambiaría por nada del mundo" Tom me observa mientras hablo, intento mirarlo a los ojos mientras hablamos pero parece algo imposible.

"Mientras disfrutes lo que haces todo lo demás será mil veces más fácil" Tom me toma de la mano "Hemos llegado, vamos"

Bajamos del auto y llegamos a una especie de plaza justo en el centro de la ciudad, estoy tan perdida, nos hemos bajado justo en frente de una pizzería, justo ahora podría comerme una entera yo sola, muero de hambre.
Mientras yo observaba todo a mi al rededor, Tom le pagaba al taxista.

"Se que no es lo más elegante del mundo, pero la verdad es que no conozco muy bien la ciudad, podemos buscar algún otro lugar para cenar si quieres".

"Tom por favor, una rebanada de pizza nunca se niega" Él ríe por mi comentario y ahora parece más tranquilo.

Pedimos una pizza de pepperoni ya que es la única que me gusta en realidad, mientras comemos Tom me habla de su familia.

Ahora se que sus padres también aman el arte, su madre se dedica a la fotografía y su padre es un comediante y escritor, Tom es el hijo mayor de su familia, luego le siguen los gemelos Harry y Sam, por último el pequeño Paddy, no me quiero ni imaginar el desastre que harán los cuatro y a todo eso agrégale la presencia de Harrison.
También habla de Tessa, su mascota, su muy adorada mascota, me enseña un par de fotos y yo podría morir de lo adorable que es.