Dos semanas más tarde.
______ se sentó sobre el pene de su marido, hundiéndose en el con un suave empujón. Suspiró, gozando al sentir cómo su virilidad la llenaba por completo.
" _____," dijo Harry atontado por el sueño. Era medianoche. Y la primera vez que tomaba la iniciativa en el sexo. "¿Que estás haciendo? Oh, cariño, si, me encanta."
Ella sonrió con dulzura mientras montaba suavemente su miembro rígido. Bajó las manos para acariciarle el pecho, y sus dedos se deslizaron sobre sus pezones mientras le hacía el amor.
Harry respiró agitadamente y apretó los dientes con fuerza. "Oh nena-joder, adoro tu vagina."
Y ella adoraba su pene-y también a él.
Esta revelación la había despertado en medio de un sueño apacible. Lo amaba. Siempre lo había amado. No importaba lo que hubiese sucedido en el pasado. Ya encontraría alguna manera de que las cosas saliesen bien
Durante las dos últimas semanas, Harry había llegado a importarle más de lo que nunca se habría imaginado. Y si no se equivocaba en sus conjeturas, estaba casi segura de que ella también era una figura importante en su vida.
En claro contraste con los primeros días de su vida de casados, las dos últimas semanas habían sido maravillosas. Su marido le había revelado su lado apacible y amable, una faceta de sí mismo que al parecer sólo reservaba para ella.
______ se fijó en cómo se relacionaba con los demás. Era autocrático, dominante, reticente al compromiso-pero, por alguna razón, con ella era diferente. Durante las últimas dos semanas no podría recordar una sola decisión personal que hubiese tomado sin consultarla primero. Desde lo que tomarían para desayunar, hasta en qué acciones pensaba ella que debía invertir su dinero. Valoraba su opinión.
Con otros sería gritón y un poco brusco, pero en todo lo que se refería a ella era apacible y le hablaba con delicadeza. No parecían interesarle los sentimientos de mucha gente, pero en cambio, los de ______ parecían importarle más que los propios.
A ella esto le encantaba-incluso lo necesitaba. La hacía sentirse especial. Deseada.
La hacía sentirse amada.
"Te he echado de menos," susurró, lanzando sobre su hombro un tirabuzón de sus cabellos cafes . Ella le sonrió mirando hacia abajo mientras continuaba cabalgando suavemente sobre su pene. "No quería esperar hasta mañana."
La mirada de Harry se cruzó con la suya. No sonrió, pero ella notó como sus ojos se suavizaban. "Nunca te disculpes," murmuró, y sus manos alcanzaron sus caderas. "Yo también te he echado de menos, cariño."
Sus miradas continuaron entrelazadas mientras hacían el amor. Él casi parecía vulnerable a ella, si algo así era posible en alguien como Harry Styles. Quizás estaba siendo demasiado romántica, quizás lo que veía en esos turbios ojos marrones no era otra cosa que fatiga y excitación, pero le gustaba pensar que había algo más.
"Bésame," susurró ella. "Necesito estar más cerca de ti."
Una vez más percibió la ternura en sus ojos. "Ven aquí," murmuró él, y con una mano fuerte le inclinó la cabeza para alcanzar su boca. Sus lenguas se entrelazaron.
Se besaron durante mucho tiempo, sin prisas, y también así hicieron el amor. Se demoraron explorando sus cuerpos, y a ninguno de los dos les pareció necesario detenerse para dormir.
_______ levantó la cabeza, sonrió y luego deslizó los dedos entre su pelo oscuro. Continuó montándolo lentamente, y su sexo recorrió su pene, arriba y abajo, una y otra vez.
Así es cómo debería de ser, pensó. Así es cómo quería que fuese. No se había sentido tan cerca de otro ser humano en toda su vida.
_______ suspiró con satisfacción mientras hacían el amor, deseando que esta noche no terminase nunca.