Hoy estabamos en clase de natación. No te metiste al agua. Ni si quiera te quitaste por un segundo la toalla.
Jessica Parker se pasó la hora haciendo bromas de mal gusto (con intención de que escucháras) de qué pasaría si te metes a la piscina.
Al terminar la hora de natación, tu ropa no estaba en tu mochila. Pediste por favor que te la devolvieran. Nadie se retractó de la ''broma''.
La profesora no dejó que nadie se fuera hasta encontrar tus pertenencias.
Al final, una de las perras falderas de Jessica Parker, encontró tu ropa en el cesto de basura.
Es más que obvio que Jessica Parker fue la cabecilla de aquella vil broma. Y te prometo que no saldrá ''ilesa'' de esto.
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Miel & Juliet.
Short StoryPensé que el tiempo lo diría todo. Que el destino se encargaría de decir todo lo que nunca te dije. Pensé mal.