Capítulo 8

14 2 0
                                    

Luego de que pasarán dos días en los cuáles pase con Santi haciendo nada, o bueno si hacíamos cosas pero nada fuera de lo normal, ir a la piscina, playa, bar y esas cosas, bueno, también la pase con mis papás, no me he olvidado de ellos, de hecho les conte lo que paso con el robo. Mi papá se puso histérico, quería ir a buscar a los ladrones pero de eso se encargo la policía, como iba diciendo pasaron dos días y o sea hoy, recibí una llamada de la estación de policías, donde me dijeron que debía pasar a recoger mis pertenencias que fueron robadas, así que me levanté muy temprano sin despertar a Santiago, me duche, arreglé y salí a buscar un taxi para ir a la estación de policías.

Debía ir rápido porqué hoy me iría hacía Estados Unidos, el vuelo sale a las dos de la tarde.

Cuando llegué, pague al taxista y entré a la estación.
Pregunte donde podía recoger mis cosas, me indicaron donde y fui al lugar, preguntaron algunos de mis datos personales por protocolo y me dieron mi bolso con mi celular. Iba caminando hacía la salida y escuché que alguien decía pss pss, volví a ver y era el chico que había curado mi ceja, el mismo que llenó de helado mi cara, cuando me intenté acercar para saber que quería, unos oficiales que estaban a la par de la celda me detuvieron.

–Suélteme– dije gritando con todas mis fuerzas

–Cálmese señorita, aquí no puede gritar ni mucho menos acercarse a los detenidos– dijo con voz autoritaria

–Ese chico de allí me esta llamando, lo conozco, técnicamente no lo conozco pero si se quién es, podría hablar con el? – pregunté con calma, las personas así me quitan mi poca paz

–No puedo dejarla acercarse a ninguno de los detenidos, son órdenes superiores.

–Ok, me voy– dije retomando el camino hacía la salida, aún pensado en porqué el chico guapo estaba ahí

Salí y choque con un corpulento cuerpo, obviamente de hombre, alce mi cabeza y vi a Wes, que rayos hacía aquí?

–Qué haces aquí?– dije confundida

–Hola, estoy bien, gracias por preguntar– dijo cruzando sus brazos y rodando los ojos – te olvidas que nos robaron una noche luego de una maravillosa fiesta?

–Cierto, que torpe soy, se me había olvidado, ya yo recogí mis pertenencias

–Mm, yo voy a ir por ellas, luego podemos ir a tomar un helado? Que te parece?

–Claro, te espero aquí– dije con una pequeña sonrisa

Wes fue por sus cosas y yo me senté en un banco que había cerca, esperé unos diez minutos y él salió, fuimos caminando hacía la heladería, pedimos nuestros helados y claro, el no me dejó pagar, caminamos hacía un pequeño parque.

–Wes, hoy me voy, regreso a Estados Unidos– dije haciendo una cara de desagrado por ver su reacción a lo que dije

–Años sin verte, te veo por segunda vez y ya te quieres ir? Es injusto– dijo haciendo un puchero como niño

–Lo siento, he estado aquí una semana y ya debo regresar, falta poco para que empiecen las clases

–Espero verte más, me puedes dar tu número, así nos mantendremos en contacto– dijo dándome su celular para poder poner mi número en el

Iba a entregarle el celular cuando siento su boca chocar con la mia, Dios, no me esperaba esto, es un beso un poco loco, desesperado, tantas ganas tenía éste chico de besarme? Me tomo desprevenida, al principio le seguí el beso, luego me di cuenta de lo que estaba haciendo y me aparte, lo mire incrédula.

–¿Porqué hiciste eso?– dije con un poco de enojo

–Yo yo lo siento, fue un impulso, perdóname– dijo balbuceando las palabras

–Esta bien, espero que no se repita, toma tu celular, adiós, nos hablamos– dije rápido y no espere respuesta de su parte

Busqué un taxi que me llevará al hotel. Una vez en la habitación, ordene mi ropa en la maleta, viendo que no se me olvidará nada, no quería dejar nada aquí, todo lo que traía es importante. Santi también hacía lo mismo, supongo mis papás igual.
La verdad es que extraño estar en casa,  necesito llegar ya a Estados Unidos.

–Santi quieres volver ya a tu casa? A mi me hace falta estar en la mía, la extraño, extraño el aroma a casa, el clima, todas las cosas que hacía, por dicha ya volvemos

–Sí, un poco, pero como dices ya en unas horas estaremos de vuelta

–Sabes que eres el mejor amigo de todos? Te quiero mucho mucho– dije dándole un abrazo de oso

–También eres la mejor amiga, enana, nunca olvides que también te quiero– dijo devolviéndome el abrazo

–Ay que lindos chicos, espero que su amistad duré muchos años más– dijo mi mamá entrado a la habitación y viéndonos con ternura

–Así va a ser mamá

–Bueno, venía a verificar que todo estubiera en orden, porqué ya debemos bajar e ir hacía el aeropuerto

–Claro señora, ya esta todo listo para bajar, solo ayudaré a Mikeyla a bajar sus maletas

–Me parece muy bien Santi, los espero en la recepción chicos, no tarden

Santi me ayudó con mis maletas y en menos de lo que canta un gallo llegamos a la recepción, esperamos el taxi que venía por nosotros y a los minutos llego, subimos todas las maletas y emprendimos el viaje hacía el aeropuerto. En el camino iba viendo lo hermoso que es Hawaii, estos días no lo había notado o no le puse mucha atención a mi alrededor pero sin duda Hawaii es hermoso, un lugar donde viví aventuras, amor, locura, y una borrachera, de la cual no recuerdo nada de lo que paso.

***

Las horas de viaje se resumieron en dormir por mi parte, Santi durmió una parte y la otra solo escucho música, mis padres, como siempre, venían hablando de negócios, de trabajo.

Llegamos por fin a Los Ángeles, hogar dulce hogar, una hora más y llegamos a nuestra casa, Santi se quedo su casa, pues venía cansado, lo entiendo, yo estoy igual, lo único que quiero es dormir, así que eso fue lo que hice.

PVO Marco.

La semana se paso muy rápido, no me di cuenta pero ya estaba tomando el vuelo hacía Orlando.

En él avión las miradas de las chicas no se iban, eso me cansa muchas veces, se que soy muy guapo pero las miradas de las chicas abruman. Suelen ser muy acosadoras.

Llegue a Orlando y recorde todas las cosas que pasaron en Hawaii, fue entretenido pasar parte de las vacaciones en Hawaii, además de que estaba con mi mamá, cosa que cuesta mucho que eso pase. Pasaron muchas cosas para ser solo una semana.

Me quité mi ropa para solo quedar en ropa interior, eso me acordo una noche que pase en Hawaii, fue muy rara, me parece que dormí con alguien esa noche porqué sentía que alguien me abrazaba, cuando desperté no había rastro de otra persona en la habitación, algún día recordaré que paso esa noche y con eso en mente me dormí.

Chicos perdón por la tardanza, si les gusta comenten y voten.
-Gemes💖

Wild HeartsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora