Después de nosotros

3. Secretos

—¿Qué tal la visita? —Preguntó Thomas cuando coincidieron en el Matadero. Por suerte la chica sólo tenía que recoger las cubetas con sangre y no destazar animales.
—Bien, exepto por la parte en la que Alby se llevó a Newt. ¿Qué tal tú?
—Alby no quiso decírmelo todo, me dió algunas vueltas y dijo que no podía ir a la Finca por el momento —se quejó él.
—Me dijeron lo mismo, lo que resulta un tanto extraño porque anoche dormí ahí y nadie me lo reclamó.
—Yo dormí en el suelo —admitió Thomas. Enseguida su hermana se burló.
—¿En serio? —Le preguntó entre risas, lo bastante discretas para que el Encargado no la escuchara.
—Chuck me preparó un saco de dormir.
—Yo pasé por un tendedero de cuerpos metidos en sacos de dormir y no te ví. Además de que tomaste un rumbo distinto cuando nos separamos —dijo ella.
—Yo no dormí frente a la Finca, lo hice por las hamacas —explicó Thomas, ella asintió y volvieron a su trabajo, sin nada importante para contar.
—¡Hey, Novatos! —Llamó Winston, el Encargado. Ambos lo voltearon a ver, atendiendole —. El trabajo ha concluido, vayan a cenar que yo tengo cosas mejores que hacer, o quizá no tan mejores —dijo él.
—¿Qué harás? Nosotros podríamos ayudarte —ofreció ________.
—Gracias, chica, pero no son asuntos para Novatos. Vamos.

Winston los sacó del Matadero y los llevó hasta la Cocina, donde _______ ya había tenido su turno. Se despidió de ellos y se alejó a gran velocidad. Thomas y su hermana se sentaron en una mesa a esperar.

—¿Qué crees que hará? —Preguntó ella.
—No lo sé pero como dijo él, no es cosa de Novatos —se encogió de hombros.
—Sí, es cierto... ¿Qué has hecho hasta ahora? —Volvió a preguntar, esta vez refiriéndose a los trabajos con los Encargados.
Thomas extendió una mano y se puso a contar con los dedos —. Cocina y Matadero. En realidad me tardé un poco más aquí porque casi derrumbo el lugar.
Ella se sorprendió  —. Eres un desastre. Yo no lo hice tan mal, y de hecho hicimos lo mismo pero ¿por qué no nos encontramos aquí también?
—Ya te dije —se encogió de hombros —casi derrumbo el lugar y Sartén me echó en seguida, me envió con Winston a la primera oportunidad.
Ella rió —. A este paso nunca quedarás en nada.
—Sí, bueno, en realidad no me importaría no quedarme en alguno. Hay algo que quiero hacer como no tienes idea.
—¿Y qué es? —La curiosidad llenaba su voz, en cambio la de él se había vuelto un susurro.
—¿Prometes no contarle a nadie?
Ella rodó los ojos —. ¿A quién se lo contaría, Tommy?
—A... Tienes razón. Me gustaría entrar al Laberinto.
—¿¡Qué!? ¿A caso Alby no te advirtió nada? —Ella habló fuerte de nuevo, pero por suerte nadie de los que se hallaban en la cocina los escuchó.
—Si te refieres a los Penitentes, sí, lo hizo. Pero ¿sabes? Eso no me importa.
________ lo entendía, también sentía curiosidad por el Laberinto y no podía negar que también le gustaría entrar.
—Lo entiendo —dijo ella simplemente.
—¿No ibas a regañarme? Creí que pensarías que es una locura.
—Lo pienso, pero creo que las locuras me gustan.
—Eso quiere decir... —Comenzó Thomas, esperando a que ella completara.
—Eso quiere decir que nos veremos en el bosque al final de la cena —dijo ella, levantándose para ir por la comida de ambos. No vio a Sartén por ninguna parte.

Comieron en silencio mientras ________ esperaba ver a Newt entrando por la puerta, cosa que nunca ocurrió, y Thomas se moría de la curiosidad por saber que le diría su hermana. Aunque en el fondo él lo sabía.

El tiempo pasó lento y cuando la cena por fin dió fin fue ella la que salió primero por la puerta con dirección al pequeño bosque, Thomas la siguió díez minutos después.

—Creo que debemos hablar —dijo _______ en cuanto divisó a Thomas.
—El Laberinto —dijo de inmediato, sentándose junto a ella en el suelo terroso —es... Por alguna razón lo veo como algo magnífico, se que debería temer pero no es así.
Ella tomó su mano —. A mí tampoco me da miedo, más bien... Curiosidad —admitió, Thomas se sorprendió, no creyó que sintieran lo mismo.
—Entonces ¿estás de acuerdo en que yo entre?
—No, no entrarás ahí sin mí.
—Sería peligroso, recuerda que somos los Novatos. Y no te quiero arriesgar —apretó la mano de ella —y sería romper las reglas.
—Lo sé pero yo también quiero entrar, quiero saber qué hay afuera, quiero encontrar una salida —dijo desesperada, intentando convencerlo.
—Podríamos hacerlo, podríamos salir.
_______ sonrió —. Lo haremos Tommy, saldremos al Laberinto y quizá después vayamos más allá.