La última carta a mi novia

01. Funeral

Estoy nervioso y ni siquiera sé por qué. Es como si nunca hubiera tenido la oportunidad de hablar con otras personas, pero la vida no es así, al menos no para mí, porque siempre gocé de estar rodeado de amigos y de mis compañeros de Lacrosse. Además de eso podía darme el lujo de salir con mi familia y pasar una tarde completa con ellos si querían.

Así es cómo era yo, como se supone que debo ser yo.

Ella pidió que se le despidiera de una manera única, así que decidieron traer su féretro a la Universidad, no porque ella deseara morir aquí, sino porque las personas más especiales las conoció en este campus. Probablemente, ni siquiera puedan imaginarse eso, pero antes de morir, sus palabras fueron esas, las que sentencian como una persona desea pasar su vida.

De pronto sé que es hora de salir, pues mi nombre es llamado al micrófono, pero me siento temblar como un niño al que llaman a la dirección por haber cometido una travesura o mejor aún, me siento como nuestra tercera cita donde por fin conocería a sus padres y tenías que enfrentarte al duro mirar de tu suegro que parecía el peor de los asesinos en serie.

Mis pies comienzan a andar. Llevo puesto un saco azul, era nuestro color favorito, un pantalón negro y los zapatos que usamos en la graduación de la preparatoria, pues digamos que ahí la conocí porque fui coronado como rey del baile, pero comencé a salir con ella hasta que entramos a la universidad puesto que yo los veranos solía irme a visitar familiares a Canadá.

Cuando me pongo expuesto al exterior, puedo ver el rostro de la madre de Eloisse con una sonrisa ante mí mientras lágrimas corren por sus mejillas, a la par que su esposo le abraza para consolar lo que está pasando. Entonces reproduzco la canción que ella quería hacer sonar en el momento que yo hablara, pues digamos que ella era así, totalmente honesta y jamás va a olvidar esa película llamada "Me Before You", pues recuerdo como lloro con el final, tanto que tuve que abrazarla fuertemente para que sintiera que eso no nos pasaría a nosotros.

Aunque quizá me había equivocado.

— Buen día a todos... — Menciono mientras "Photograph" suena en el fondo, quizá es una melodía cliché, pero fue gracias a esa película que tuvimos nuestra primera cita, esa que dicen que nunca se te olvida, así que he de decir que es especial. — Probablemente esperarían que viniera con un discurso planeado, porque como el representante del equipo de deportes, estudiante de buen promedio y novio perfecto... — Bromeo mientras dejo salir una risa, pero eso me habían dicho los padres, que no era un patán como la antigua pareja que había tenido la joven antes.

— Aun recuerdo ese día que conocí a Eloisse, yo era el rey de la graduación y ella estaba ahí de pie observándome. Quizá se pregunten cómo ha sido posible que me diera cuenta de eso, pero ella había sido candidata a reina, aunque no ganó y parecía triste, así que decidí regalarle mi corona, que aunque era masculina, seguro le quedaría bien — Aun en mi mente dibujaba ese momento, observando su sonrisa, quizá eso me enamoró, pero no lo había aprovechado lo suficiente en ese instante. — Entonces de alguna manera nos pasamos teléfonos y así pasamos el mejor de los veranos, hablando por distancia e inclusive hubo una vez en la que le llamé y ella estaba tan asustada que creyó que le diría que dejara de molestarme, pero eso me enamoraba de ella, su facilidad para mostrarse fría ante mis situaciones, pero siempre lograba sacarle la verdad acerca de las opiniones de mis amigas o de algunas de mis fotos — Solté una risa puesto que aun tenía el recuerdo de cuando una vez se le escapó un "Me gusta" en una de mis fotos con una compañera. Fue tanto el horror que sintió que me mandó una nota de voz diciéndome que lamentaba el hecho.

— Pero entonces regresé de mi viaje, dispuesto a entrar a la Universidad, sitio al que ambos asistiríamos y eso me causó que la quisiera invitar a salir, puesto que nunca me he sentido uno de esos chicos que le gusta rodearse de mujeres, prefiero rodearme de una sola y que todos envidien nuestra relación — Mojé mis labios un poco mientras alguna canción de piano se ponía después de la reproducida anteriormente. Honestamente las odiaba. — Nuestra primera cita fue ir al cine, vimos el estreno de "Me Before You", fue tan feliz pero triste a la vez porque imaginó que a ella le pasara lo mismo y simplemente no podía imaginarse el después, pero he de admitir que yo tampoco me esperaba aquello — Tampoco quería pronunciar demasiado puesto que no quería soltar algún tipo de spoiler.

— Luego tuvimos una segunda cita inesperada, puesto que yo salía temprano y el maestro de su última clase faltó, así que la invité al parque de diversiones, con el pendiente de sus padres, que me han de perdonar... — Señalé a ellos con una sonrisa, pues su madre le mandaba mensajes a cada instante para saber como se encontraba, pero jamás le diré la vez que vomitó después de subirse a la montaña rusa — Aunque fue grandioso, pues iban amigos de ella y míos, así que era una tarde de diversión con personas cercanas, por lo que eso nos hacía demasiado felices — Pronuncié mientras observaba a aquél féretro, esperando que si había una vida después de ésta, fuera posible que me escuchara. — En esa cita nos dimos nuestro primer beso, un beso arriba de la rueda fortuna porque me había dicho que ese era su sueño y sí, cómo dicen por ahí, cuando menos lo esperas es cuando los sueños suceden — Sonreí, aunque mi voz era ahora un poco tambaleante, casi al borde de poder quebrarme, pero quería aguantar un poco más.

— Nuestra tercera cita fue aun mejor — Ese fue el instante que conocí a su familia, me hicieron sentir como un nuevo miembro de la familia y eso me hacía sentir maravillosamente bien, porque sabía que no quedaría escaso de amor — Fui a cenar a su casa, dispuesto a lanzarme al matadero — Así lo llamaba yo porque seguro me expondría a muchas preguntas — Inclusive llevé mi carta de ser un ciudadano sano para que sus padres me aceptaran porque su princesa estaba siendo enamorada por un hombre que podría robarla de su torre en cualquier instante — Entonces decidí entrar al telón rápidamente, de donde tomé una bolsa con un par de objetos que había guardado de recuerdo.

Tomé la corona.

— Así que quiero poner esto sobre su caja porque ella para mí siempre será la princesa o más bien el dragón, porque siempre me protegió de todo mal — Aunque los roles deberían ser al revés, pero ella era así, aguerrida y dispuesta a luchar por lo que quería — Y se preguntarán que por qué hablo solo de las cosas buenas, pero he de decir que las cosas malas las reservé para el final, porque esas palabras finales fueron las últimas que le dije y por las que hoy estoy aquí, dedicándole esta última carta a mi novia — Suspiré mientras miré al vacío, porque lo que estaba a punto de decir seguro que sus padres ni siquiera lo esperaban.