4. EGOÍSTA

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KyungSoo depertó apoyado sobre el pecho duro de SeHun, mientras este lo rodeaba por la cintura, aún durmiendo. Elevó la mirada para mirarlo.

No entendía porque esa posición se le hacía tan malditamente cómoda, como si su lugar correcto siempre hubiera sido ese: entre los brazos de SeHun. Se sentía culpable por ello, porque tenía un novio que lo amaba y de seguro estaba preocupado por él en esos momentos, cuando en cambio él, estaba durmiendo en brazos de otro hombre y lo había besado, cuando él se había molestado con JongIn por tratarlo de infiel.

Tenía razón al fin y al cabo, pensó KyungSoo.

Pero no podía lograr sentirse lo suficientemente mal por eso, porque SeHun lo estaba haciendo sentir nuevamente joven, apreciado y libre. Aquello que siempre había soñado tener con JongIn lo estaba consiguiendo con un chico que había conocido hace un mes. ¿Pero quién podía culparlo? Las personas no eligen cómo y de quién se enamoran.

JongIn, ah, ese nombre cada vez que se le venía a la mente le provocaba una sensación de protección y un escalofrío por la columna. Ahora... Ahora solo sentía lejanía y culpa al pensar en la persona que realmente era su pareja.

No debería estar ahí, acostado junto a SeHun como si él fuera su novio. Aunque le gustaría que lo fuera, lo sabía, pero no podía permitírselo. Porque sería botar cinco años de relación a la basura por una persona nueva en su vida, que no conocía al fondo y con la que no tenía planes concretos en el futuro.

SeHun podía hacerlo sentir nuevamente como la persona más importante en el mundo. Pero JongIn lo había amado durante cinco largos años. A pesar de que no hubiera tenido la libertad que siempre quiso, JongIn siempre estuvo ahí para él. KyungSoo simplemente, ah, no podía deshacerse del moreno como si fuera una camiseta vieja que cambiaba por una nueva. Y quizás estaba tomando la decisión más incorrecta de toda su vida, porque él no podía negar que en el beso que se había dado con SeHun, había logrado saborear un sentimiento fuerte y olvidado, que aunque le doliera admitirlo ya no sentía con JongIn.

Sin embargo, su lugar no era con SeHun, no importaba que su corazón y su mente le dijeran a gritos coléricos que sí lo era. KyungSoo sabía o al menos quería creer que con JongIn las cosas se solucionarían, y esto que había pasado con SeHun, había sido nada más que un desliz por lo triste que estaba por la noche.

No se creía nada, en realidad. A esas alturas ya no sabía si seguía enamorado de JongIn, o su corazón se había permitido abrirle las puertas a alguien más.

Escuchó su celular en la mesita de noche. Tratando de no despertar a SeHun, lo tomó viendo las veinte llamadas perdidas de JongIn y los cuarenta y tres mensajes de este mismo. Suspiró y abrió el ultimo que había recibido.

Nuevo mensaje.

Nini 🐻💕: Soo, estoy preocupado. Por favor, responde esto si lo ves. Lo siento mucho ¿ok? Sabes que te amo y eso me hace actuar impulsivamente. Te extraño xo.

Recordó los tiempos cuando aquellos mensajes lo hacían sonreír como enamorado. Cuando los recibía a mitad de clase y se mensajeaban en secreto junto a miradas cómplices, intentando que el profesor no los pillara. Esos años ahora se veían tan lejanos... Como si hubieran sido nada más que sueños. No podía perder a la persona que lo había hecho sentir tan bien y con la que tenía historia de sobra. JongIn era el amor de su vida hace unos meses, no podía solamente dejarlo ir porque se sintiera mejor en brazos de otro hombre en ese minuto.

Tengo que hablar contigo. Nos vemos en el departamento a las cinco. Yo también te amo.

Aunque las últimas palabras del mensaje de texto no las sintiera tanto, tenía que intentar salvar la relación con JongIn, y por ello le contaría sobre el beso con SeHun. Sabía que nada bueno saldría si no hablaba con la verdad desde un inicio.

Egoísta; SeSooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora