Me encotraba caminando por los pasillos junto a mi hermano, era el día siguiente luego de aquel "incidente".
—Ye te he dicho que estoy bien —Me comentó mi hermano menor, pero yo hice oídos sordos y no le hice caso—. Natalie... —Él tomó de mi brazo izquierdo y paramos en medio del todo el pasillo
—Ya entendí... —Me acerque a mi casillero y puse la contraseña de esta—, Marcos, sólo trata de no caer en sus...—Cuando abrí el maldito casillero; una bomba de harina me atacó todo el rostro
Las risas no se tardaron mucho, en especial aquella risa horrenda que tanto odio.
«Agh, Nathan...»
—Creo que eres tú la que tiene que tener cuidado... —Me respondió mi estúpido y pequeño hermano
Lo observé y sonreí.
—¿Tú crees? —Dije en un tono sarcástico y con una mirada de mal gusto
—Si —Respondió divertido
Marcos me lanzó un pañuelo y yo con gusto lo tome para limpiarme.
—Oye presi —Dijo por fin aquel patán—, El blanco le queda muy bien —Dijo guiñándome un ojo
—Cuando el director se entere... —Le dije
—Disculpa, pero si yo caigo tú igual —Dijo mientras se acercaba más a mí—. ¿Olvidaste lo qué el director dijo?
«Maldita sea, es cierto...» Pensé mientras tocia y soltaba polvo blanco de mi boca.
—Vaya, si que le das a la droga—Comentó burlón mientras hacía una pose pensativa
«Lo odio»
Sonreí con cierta malicia y tomé el cuello de su chaqueta.
—Ten cuidado de ahora en adelante Hernández, porque te irá muy mal —Lo empuje fuerte y lo observé con mala cara—. Yo que tú; no pego un ojo en toda la noche...
Mi hermano suspiró y negó con su cabeza.
—Como sea, matense entre ustedes —Habló él mientras se alejaba de nosotros
Nathan observó a mi hermano y lo tome de su brazo izquierdo.
—Es mí pelea y la tuya, ni se te ocurra meterte con él.
—¿O qué? —Preguntó divertido
—Lo volví a empujar—, Dormirás con los peces —Dije en un tono serio y mirada severa
Al decir eso tome mis cosas y me dirigí al baño a lavarme el cabello. El timbre empezó a sonar, así que corrí lo más rápido que pude a mi clase.
—Matemáticas...perfecto... —Murmure. Llegué y me senté atrás de todo, al poco tiempo apareció mi mejor amiga con su típica sonrisa ladina
—Ayer la señorita me dejo sola todo el día —Comentó ella mientras jugaba con su cabello color carmín
—Lo siento Nicole —Le dije apenada
—Tontita sólo bromeo —Comentó entre risas. Se sentó a mi lado y se dispuso a observarme, lo cuál me incomoda esa actitud suya. Siempre lo hace cuando quiere saber algo y por lo general le funciona muy bien
—Ayer me peleé con Nathan Hernández —Comenté luego de un rato
—¡¿Qué?! —Gritó llamando la atención de todos—. Lo siento —Se disculpó con una sonrisa divertida, se acercó más a mí y me susurró en mi oído—. ¿Cómo es qué te peleaste con él? —Preguntó. Tocó mi cabello y me observó preocupada—, ¿Y qué le pasó a tu cabello? ¡Esta mojado!
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Fuck You!
Roman pour Adolescents❝Escorias como tú no deben de existir❞ Esos pensamientos invadían la perturbadora y vengativa cabeza de Natalie; cuando escuchó hablar a Nathan, un homofóbico que se ha metido con su hermano por ser de una preferencia sexual distinta a la suya. ...