Hamilton

22. Laurens Interlude

 Aquí esta el Interludio de Laurens, donde Hamilton recibe las noticias sobre la muerte de su querido amigo.
Es bastante triste...

Recuerden que Laurens no era solo un amigo, era su amante desde la guerra, se escribían cartas de amor, aunque la mayoría fueron quemadas por el hijo de Hamilton.

Las cartas extraídas aquí comienzan en 1779 cuando Hamilton tenía veintidós años y Laurens tenía veinticinco años. Ambos jóvenes revolucionarios eran parte de ese círculo masculino cercano que rodeaba al General Washington - su "familia", como el general los llamaba.

La Revolución Americana estaba en progreso; John Laurens había dejado el campamento para Carolina del Sur, esperando ser autorizado por la asamblea de la colonia para organizar batallones de esclavos negros para luchar contra los británicos.

En abril de 1779, Hamilton le escribe:

Frío en mis profesiones, cálido en mis amistades, deseo, querido Laurens, que esté en mi poder, por acción más que por palabras, para convencerte de que te amo. Sólo te diré que hasta que nos dijeras Adiós, apenas sabía el valor que habías enseñado a mi corazón a poner sobre ti. De hecho, mi amigo, no estaba bien hecho. Tú conoces la opinión que tengo de la humanidad, y cuánto es mi deseo de mantenerme libre de apegos particulares, y de mantener mi felicidad independiente del capricho de los demás. No deberías haber aprovechado mi sensibilidad para entrar en mis afectos sin mi consentimiento. Pero como lo habéis hecho y como generalmente somos indulgentes con los que amamos, no tendré escrúpulo de perdonar el fraude que habéis cometido, a condición de que por mi bien, si no por vuestro, siempre seguiréis mericiendo la parcialidad , Que tan ingeniosamente has inculcado en [mí]. 

Trasladando varias cartas que habían llegado de la esposa de Laurens, Hamilton continúa:

Y ahora, querida, como estamos en lo que se refiere a la esposa, yo te autorizo ​​y te ordeno que me traigas uno en Carolina. Tal esposa, como yo quiero, será difícil de encontrar, pero si tienes éxito, será la prueba más fuerte de tu celo y destreza. Tome su descripción - Ella debe ser joven, guapo (yo pongo el estrés sobre una buena forma) sensato (un poco de aprendizaje va a hacer), bien criado, casto y tierno (soy un entusiasta en mis nociones de fidelidad y cariño). Pero en cuanto a la fortuna, el mayor stock de que el mejor ... Aunque no corro ningún riesgo de ir al Purgatorio por mi avaricia, pero como el dinero es un ingrediente esencial para la felicidad en este mundo - como no tengo mucho de mi Y como estoy muy poco calculado para conseguir más por mi dirección o industria; Debe ser, que mi esposa, si consigo uno, trae por lo menos una suficiencia para administrar sus propias extravagancias. N [ota] B [ene] [Nota Bueno] Usted estará encantado de recordar en sus negociaciones que no tengo ninguna antipatía invencible a las bellezas de soltera y que estoy dispuesto a tomar la molestia de ellos sobre mí mismo.

Si no te encuentras con una dama que crees que responde a mi descripción, solo puedes anunciarte en los periódicos públicos y dudas [menos] escucharás a muchos ... que estarán encantados de ser candidatos para un premio como yo a.m. Para excitar su emulación, será necesario que usted dé cuenta del amante - su tamaño, marca, calidad de mente y cuerpo, logros, expectativas, fortuna, etc. Al dibujar mi cuadro, sin duda será civil a su amigo; Pensad que hacéis justicia a lo largo de mi nariz y no olvidéis que yo [- - - - - -].

Aquí aproximadamente cinco palabras son ilegibles debido a la mutilación del manuscrito original (las palabras han sido cortadas). Las palabras suprimidas eran ciertamente sexuales explícitamente, pues la referencia de Hamilton a "la longitud de mi nariz" era claramente una alusión de broma a la longitud de su pene. Una larga historia (juego de palabras) vincula el tamaño de la nariz y el tamaño del pene, y el tamaño del pene con asociaciones de virilidad y fertilidad.