Sentimientos Prohibidos [|TERMINADA|]

Capítulo cinco: "Solus y Megatron"

—Entonces, lo haremos a tu manera- Le respondió a Solus con una macabra sonrisa- Soundwave…- Hablo por el intercomunicador.

Un portal terrestre se abrió, de él cruzaron varios Decepticons. Megatron sabía que no podría traer a los inútiles Vehicons, se trataba de dos Primes, así que se aseguró de que su ejército, fuera el más fuerte, como si de cartas se tratara.

Del portal salió Soundwave, Starscream, KnockOut y como no, Breakdown. Solus rápidamente los escaneo a todos de pies a cabeza, no parecían debiluchos, bueno, a excepción de Starscream que observaba a Solus con miedo. Se reincorporo, parándose derecha, observándolos a todos con una expresión fría y calculadora en su rostro.

—No lo volveré a repetir, Megatron. Mi arma, ahora- Camino lentamente hacia él, sin quitarle la mirada. El lord se quedó rígido en su lugar, observando como Solus caminaba hacia el lentamente contoneando sus caderas.

—Si la quieres, quítala de mis manos- Le respondió cuando ya estuvieron cara a cara.

Solus al estar tan cerca de Megatron, observo detenidamente su rostro. El mal lo ha cambiado muchísimo, aún recuerda cuando solía ser Megatronus, con sus bellos ópticos de un color azul zafiro. La sed de poder corrompe, y Megatronus no fue la excepción.

Solus sonrió al recordar los dorados tiempos de cybertron, Megatron no pudo evitar quedarse embobado. Si antes le parecía hermosa, ahora, no encontraba palabra para describirla.

—Megatronus…- Susurro Solus, observándolo, inspeccionando su rostro.

Megatron sintió como una fuerte descarga subía y bajaba por todo su cuerpo al escuchar su antiguo nombre salir nuevamente de los labios de aquella hermosa femme. Siempre le ha atraído Solus, siempre la ha amado, a tal punto de sentirse enfermo por amar a alguien, por amar a alguien de esa manera.

—Mi nombre es Megatron- Le respondió de la misma manera, en un susurro casi inaudible pero debido a su cercanía, podía escucharlo perfectamente.

—Ambos sabemos, que la spark de Megatronus aún no se extingue del todo. ¿Dónde quedo aquel mech de incomparable valentía? Aquel mech del que me enamore perdidamente-

—Ese mech se perdió en la guerra, ese mech se quedó en cybertron-

Susurraban, pero no por temor de que algunos de los bots que se encontraban con ellos, pudiera oírlos. Susurros, tan suaves, palabras que el viento se las llevaba.

—Devuélveme mi arma y acabamos con esto de una vez- Cansada ya, lo tomo del cuello, levantándolo en el aire.

A pesar de que Solus fuera de una estatura más baja, algo así como de la altura de KnockOut, su fuerza era incluso mayor que la de todos los bots presentes, incluyendo a Optimus.

Este sentía un extraño dolor en su pecho, se sentía desilusionado. ¿Acaso Solus estaba enamorada de Megatron? ¿Acaso él no podría si quiera intentar algo con ella? Se siente débil, sus piernas le tiemblan, se siente enfermo, se siente traicionado. En su mente, dice que es ridículo sentirse así por una femme que acaba de conocer, ni hace una semana. Pero es que Solus… Ella tiene algo diferente, ella es diferente. Diferente a Arcee, a Elita, a todas las femmes bellas que él ha visto. ¿Qué tiene esa femme que hace que sienta su spark brillar cuando está cerca suyo? No es el único con ese pensamiento.

En la base autobot, Ratchet se sentía preocupado, se estaban demorando mucho. ¿Qué tanto hacen? ¿Acaso están tomando el té con Megatron en la némesis? Fuera lo que fuera, se sentía preocupado por ambos, pero más por Solus...