*What Is Love?*

Capítulo Tres

¿Qué clase de exnovio era? Uno que aún no superaba a quien fue su novia, ¿Entonces para qué rayos la había terminado? ¿Qué sentido tenía? Lo que tenía que lograr con todo esto era poder ser él mismo, recuperar la libertad que su relación le había quitado, seguir adelante. No quedarse a ver como ella rehacía su vida mientras él se quedaba mirando. Iba a superarla, ya no la necesitaba.

- Georg, amigo. ¿Tienes planes para esta noche? -preguntaba mientras del otro lado de la línea su mejor amigo se pensaba la respuesta- Perfecto. En el club de siempre, en una hora.

Saldrían a "pasar la noche" a su club favorito, el mejor de la ciudad.

Cuando llegaron el lugar estaba a reventar de personas, no tardaron mucho en pasar, conocían a los guardias, eran clientes frecuentes, al menos Georg lo era.

- Amigo, esta noche por lo menos nos vamos con una chica a la cama.

No le agradaba del todo la idea, pero no iba a pensar en ella; no había ido a eso.

A las cuatro de la madrugada ya estaban excesivamente borrachos, se habían pasado el tiempo bebiendo y bailando con un sin fin de chicas, nada fuera de lo normal.

- ¿Cómo que no-nos va-a a dar las lla-llaves? -le preguntaba Georg a uno de los guardias- Si es nu-nuestro auto.

- No podemos dejar que conduzcan en este estado, apestan a alcohol y apenas y pueden estar de pie, -dicho esto Tom cayó al suelo soltando una sonora carcajada seguida de la risa de su amigo- a eso me refería.

- Bueno, ¿conoce usted a Tom y a Georg? -el guardia le había quitado su celular a Tom y marcó el primer número que vio en sus contactos- Necesito que vengan por ellos.

El guardia le dio los datos del lugar y luego terminó la llamada. 

- Ahora solo nos queda esperar a que vengan por este par de borrachos.

Media hora después llegaron por ellos, se subieron a la camioneta y arrancaron rumbo a la casa de Tom.

- Estúpidos, yo ni siquiera tendría que estar aquí, sino en mi cama.

Al llegar a su destino aparcó la camioneta y se bajó de ella dejando a sus acompañantes adentro.

- Bill, ¿estás en tu casa?

- Si, ¿por qué marcas a esta hora?

- Sal y verás.

El pelinegro no tardó en estar afuera de su casa encontrándose con su hermano y Georg dentro de la camioneta del primero, y a lado su excuñada.

- ¿Qué mierda hicieron esta vez?

- No sé, pero es obvio que tienen alcohol en las venas y no sangre.

- ¿Estabas con ellos, Ely?

- ¡¡Ni loca!! Alguien me llamó y me dijo que tenía que ir por ellos, ya cumplí con traerlos, me voy.

- ¿Sola? No, no te voy a dejar.

- Tranquilo, luego de que te colgué llamé a un taxi, no debe tardar. Mejor mete a estos dos.

Bill se acercó a la camioneta y sacó a Georg, comenzó a caminar con el hacia dentro de la casa.

Ellen esperaba que llegara el taxi.

- Intento olvidarte pero sigues apareciendo, ¿que no comprendes que ya no te quiero? Ya no quiero verte, ¡vete! -comenzó a gritar Tom- ¡Lárgate! TE ODIO.

El taxi llegó y Ellen subió a este rápidamente.

Por la tarde a la hora de la comida Tom, Georg y Bill estaban en la sala prácticamente devorando la pizza que habían encargado.