THRONE - EXO OT12

LUZ: 5. Ajedrez

JONGDAE

A pesar de que sentía pena por Chanyeol, sabía que lo mejor era no intervenir.

Esas cosas solo se podían solucionar por uno mismo, lo entendía, por que él se sentía así.

Quizá era la misma razón por la que a pesar de que siempre le contaba todo a Baekhyun, no tenía el valor para hablarle de lo que pensaba de su poder... era la razón por la que  a pesar de ser un Ignitis siempre pensaba que era diferente.

Por eso no juzgó a Chanyeol al verlo enojado.

Era extraño el no verlo sonreír como siempre, pero se dio cuenta de que quizá ello era como debía ser.

Muchas veces deseó no tener aquel cosquilleo dentro de él amenazando de explotar; sin embargo, ahora que no lo tenía, se sorprendió de lo mucho que le hacía falta.

Se sentía vacío, ansioso, nervioso... sin embargo tenía mas autocontrol que el chico de fuego.

Baekhyun se había mantenido callado desde que Chanyeol se alejó. Después de que buscaron como alejarse del chico en llamas lo mas posible, se sentaron juntos, sin embargo los intentos de Jongdae por iniciar una conversación resultaban patéticos ante las cortas respuestas de Baekhyun, hasta que finalmente se dio por vencido y lo único que reinó fue el silencio.

De pronto, una puerta se abrió al fondo y ambos se pusieron de pie.
Al pasar junto a Chanyeol, se dieron cuenta de que el chico había caído rendido.
Baekhyun hizo un ademán de despertarlo, sin embargo Jongdae lo detuvo, lo justo era dejarlo descansar.

Detrás de aquella puerta, se encontraba un salón grande, casi tanto como el comedor de Ignis, sin embargo en las paredes habían otras 5 puertas.
Y de ellas, salieron los elegidos del resto de las casas.

Al principio fue algo extraño.
Realmente los jovenes no solían convivir con personas que no fueran de su misma casa, por lo que en un inicio cada grupo se mantuvo por separado.
El primero en romper el silencio e intentó entablar conversaciones con el resto, fue (como era de esperar) Baekhyun.
Era una de las cosas que le gustaba de Baekhyun, como podía ser tan sociable, tan relajado.
Como un buen Ignis, Jongdae lo siguió y realmente deseo que Chanyeol se recuperará pronto.
Su buen ánimo sería útil en este momento.
La forma de socializar de Jongdae no era tan fluida como la de su mejor amigo, pero con él a su lado el hablar se le hacía más fácil.

Ignis y Aqua siempre habían tenido buenas relaciones, y es que los bondadosos Aqua eran fáciles de llevar.
Se sorprendió también de que los Tractatio fueran tan amistosos (tenía una idea completamente diferente, viniendo de la casa de la inteligencia).
Los Salute le fue más difícil de leer, estaban ahí, escuchaban, sin embargo no participaban completamente de las conversaciones.
El chico de los ojos grandes, incluso se había ido, después de un rato de solo escuchar, como si todo aquello fuera una pérdida de tiempo.
Los Ventus, como era de esperar (al ser la casa con peores términos con Ignis) se mantuvieron aparte, solo hablando entre ellos.

Pero una vez que el hielo se rompió , Jongdae estaba aliviado... se sentía bien el conocer a más jóvenes que estaban pasando por lo mismo.
Finalmente, incluso Chanyeol se les unió, el alegre y sonriente Chanyeol al que estaba acostumbrado.
Y poco después, volvió el chico pequeño que había estado cuidando de su amigo, al que Chanyeol prácticamente forzaba a responder y hablar.

La velada se estaba comenzando a animar, cuando en medio del salón los 5 espíritus aparecieron.
Al verlos, Jongdae sintió un escalofrío en su espalda... no sentía que fuera una buena señal el que volvieran.
Mucho menos ahora, que todos estaban reunidos.

Quien tomó la palabra, fue el espíritu de Ventus, quien Jongdae descubrió se llamaba Aem: su cuerpo etéreo, casi tan irreal como el de Lumus, parecía estar formado por corrientes de aire.
-Finalmente, es hora de elegir un nuevo heredero al trono. El día de hoy, dejaron de ser simples jóvenes, para volverse algo mas grande. Después de hoy, no importa lo que pase, nada será igual.

Todos estaban quietos, oyendo al espíritu hablar, esperando que finalmente alguien les dijera de que se trataba todo aquello.

-Si están aquí, no es por que el destino así lo quizo o por que alguna profecía los marco-la sala se sumió en completo silencio, todos expectantes y algo asustados.

-No son elegidos por magia o por oráculos, sino por su poder.
Todos aquí, tienen un poder diferente, aún si algunos vienen de la misma casa... sin embargo ni siquiera esa es la razón por la que fueron elegidos.

Jongdae sentía su corazón acelerarse con cada palabra.

-Todos están aquí, por que a pesar de haber obtenido un poder gracias al árbol de la vida, su poder los está comiendo por dentro.
Ya sea codicia o rechazo, todos terminarán muertos si no aprenden a controlarlo, es por ello que para esta primera prueba, los hemos quitado.

Jongdae movió los ojos hacía Baekhyun... nunca se había detenido a pensar que pensaba el joven rubio de su propio poder? Acaso se sentía igual de destrozado que él o Chanyeol?
Lo peor, que clase de amigo era por no saberlo?
Sin pensarlo, y sin apartar la vista del frente, movió su mano para tomar la del chico a su lado.
Sin atreverse a verlo, noto de reojo como Baekhyun lo miraba sorprendido durante un fugaz segundo y soltaba una pequeña sonrisa antes de apretar más fuerte.

-Pero hay algo igual de importante que deben conocer... Como ya saben, solo hay un trono, y muchos de ustedes saben que ese asiento no es para ustedes.
Jongdae frunció el ceño, en su interior, por más que le llamaran elegido, supo desde un inicio que el trono no era para él.

-Todos han sido elegidos, es su turno de elegir.
Apostaran por ustedes mismos, o ayudaran a alguien más a llegar al trono?
Un rey, la mano derecha y la izquierda, un jefe de tropas, cuatro líderes de casa y cuatro personas que morirán si el rey coronado no les perdona la vida.
Esto es un tablero de ajedrez, y todos ustedes son las piezas, el juego comienza una vez que se den cuenta de que casillas les toca.
Una mala decisión, y están fuera.

Y con aquellas palabras, la mano entrelazada de los chicos se soltó.