Cap. 4 Pesadilla

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Llegamos a la cabaña de mi tío pero al parecer las luces estaban apagadas y eso me hizo entra un poco en desesperación. Absolutamente todo estaba muy obscuro y no se alcanzaba a ver nada más que siluetas horrorosas.
Miré el piso y observé un tiradero de comida, un olor a oxidado penetró mi nariz cuando me acercaba más..... observé que había un poco de sangre entre las hojas del pasto.... no se cómo pude distinguirla.
Mis ojos se abrieron como platos y comencé a sentir como mi corazón latía mas con fuerza, mis manos comenzaron a sudar al igual que mi frente... miré a Gin y el tenía un semblante bastante serio, él me tomó de una muñeca y comenzamos a caminar al rededor de la cabaña buscando mas pistas....

Con sigilo tratábamos de que nuestros pasos solo rozaran el pasto húmedo y frió, la obscuridad de la noche nos acompañaba y eso hacía que comenzara a ponerme más nerviosa. Gin se detuvo en seco soltando mi muñeca, esto me sorprendió. Miré a mi alrededor, pero la obscuridad no me dejaba ver  nada más que las siluetas de los árboles, el viento trajo consigo un olor a oxidado, o mejor dicho.. un olor a sangre fresca.

Gin comenzó a adentrarse en la obscuridad del bosque y no me quedó opción que seguirle...

Sin ninguna luz que pudiera penetrar el bosque nos adentramos más y más, la luz de la luna no podía penetrar aquel espeso bosque, escuchaba cómo crujían las ramas bajos mis zapatos, al igual que las hojas secas.
El sonido que emitian los búhos me erizaban la piel con facilidad.
Los pasos de Gin se aceleraron más y yo, con las fuerzas que tenía, comencé a seguirle más rápido hasta que los dos corrimos. Sentía como las ramas podían jalar y desgarrar mi ropa, mi cuerpo era arañado por las ramas filosas de los árboles y lo único que podía hacer era tapar mi rostro con mis manos, el crujir de las hojas me ponia más tensa y me hacía correr más rápido. A lo lejos podía ver una pequeña luz blanca que se asomaba entre unas ramas....
Gin comenzó a seguir aquella luz pero antes de hacerlo me tomó de una muñeca y me jaló con fuerza para correr a su ritmo, sentía que en algún momento me iba caer porque no sentía que mis pies tocaran el piso con firmeza. La luz blanca cada vez se hacía más grande y mis pupilas podían presenciarla mejor, Gin se paró en seco al llegar a ésta haciéndome chocar en su espalda de una forma no muy brusca.

Aquella luz blanca era un destello de la luna que dejaba ver un frondoso árbol con hojas muy verdes y un troco muy grueso... aquel rayo de luz era el único que entraba en aquel bosque.

Al observar a mi alrededor comencé a presenciar que frente de nosotros había una silueta humana que yacía tirada debajo de aquél árbol frondoso, no se podía ver con claridad de que se trataba pero con eso bastó para que yo pudiera entrar más en pánico.

Comencé a acercarme lentamente cuidando que mis pies no hicieran mucho ruido al contacto con las hojas secas. Mientras más cerca me sentía de aquella silueta, mis pasos se hacían más pequeños... Comencé a ponerme bastante nerviosa y sentía mi sudor recorrer mi frente y mejillas, mis manos se entumecían y se me hacía mas difícil tragar saliva... poco a poco pude estar a 5 centimetros parada frente a aquella silueta. Me incliné tratando de observar más de cerca, mis dedos traviesos comenzaron a acercarse a aquella silueta que parecía un hombre inconsciente.

Poco a poco pude deducir que si se trataba de un hombre, lo poco que mis pupilas lograban ver me hacía entrar mas en pánico, su semblante parecía de un hombre mayor.

Gin se acercó a mi y me ayudó a tomar el cuerpo y llevarlo hacia la luz. Con los ojos cerrados jalé de la ropa del hombre hasta cuando sentí que Gin se había detenido a dejar el cuerpo. Poco a poco comencé a abrir mis ojos, mi vista se hizo un poco borrosa y rápidamente me tallé los ojos con mis manos. Bajé mis manos y cuidadosamente comencé a bajar mi vista hasta donde se encontraba el cuerpo. Mis ojos se abrieron como platos y mi corazon empezó a latir con fuerza al observar la identidad de aquel hombre.... Comencé a marearme un poco y a sentir mi garganta más seca de lo nomal, sentía que mi cabeza iba a explotar en ese instante. Gin me tomó de los hombros brindandome un poco de seguridad.... aquel cuerpo que yacía en el pasto era mi tío... parte de su ropa estaba cubierta de manchas color carmesí, su rostro estaba bañado en sangre por varios rasguños que tenía en su frente, su cuerpo se veía algo deforme gracias a varios huesos rotos, todo su cuerpo tenia varios ematomas.

Millones de dudas recorrieron mi cabeza y no podía pensar más que en el rostro de mi tío que yacía bajo mis pies, quería llorar pero mis lágrimas no salían, quería gritar pero no podía hacerlo, Gin me jaló hacía él y me abrazo muy fuerte, sus cálidos brazos me hicieron tranquilizarme y olvidarme de lo que mis ojos habían presenciado. Comencé a abrazar a Gin con más fuerza y a apretar la ropa con mis puños ... 

Después de varios segundos, él me soltó y se acercó con mucho cuidado al cuerpo de mi tío, se inclinó y observó con delicadeza el cuerpo. Delicadamente con su mano toco el pecho de mi tío.... como fuegos artificiales millones de pequeñas luces salieron del cuerpo de mi tío... poco a poco este comenzó a hacerse invisible y se desbarataba en pequeños destellos de luz.....

Eso me hizo recordar aquella noche en la que no volví a ver a Gin.... Eso hizo que mis sentimientos se revolvieran y mis lágrimas comenzaran a rodar por mis mejillas. Cuando Gin terminó me miró y sonrió... 

- Vamos Hotaru, pronto volverás a ver a tu tío, te lo prometo.- Me dijo Gin acariciando mi cabeza.

- No es eso... esto me hizo recordar cuando tú... tú... desapareciste.... Espera.... ¿A qué te refieres con qué lo volveré a ver? ¡Él está muerto!- Le dijé un poco exaltada.

- Tú sólo confía en mí, pero, por ahora estarás conmigo.- Me dijo mirándome fijamente a los ojos. Cuando Gin dijo eso sentí como mis sentimientos cambiaron de golpe. Esto me asombró demasiado.... ya que no sentía más dolor..

- ........- Me puse colorada de golpe. A pesar de lo que había presenciado, sentía un alivio por dentro y más con las palabras de Gin.

- Hotaru, no quiero volver a dejarte sola, eres todo lo que tengo y en este mundo me importa.- Me dijo acercándose poco a poco a mi rostro.

Gin acarició mi cabeza una vez más y depositó un beso muy tierno en una de mis mejillas. Mi semblante asustado cambió de pronto a uno sonrojado. Por alguna extraña razón el estar con Gin me hacía sentir la persona más especial del mundo, me sentía llena de seguridad. Estaba realmente feliz de poder volver a verle.



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Gracias por leer. ^^

Hotarubi no mori e (Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora