"Otro día más", eso dije al despertarme, los cristales de la ventana de mi habitación estaban llenos de cristalinas y diminutas gotas, parecía que iba a ser un día aterrador... Bueno, como siempre, tampoco no hay tanta diferencia de un día nublado a otro soleado, la "gran" rutina en clase no cambiaría , no quiero ser negativa, pero... Se me están acabando las esperanzas, realmente no sé si el problema esta en mí, o en la gente que me acompaña en el día a día, para mi el colegio era una tortura, con tan solo ver esa gran puerta verde oxidada me entraba pánico , uff a veces tengo la sensación de estar rodeada por monstruos despiadados y sin corazón, me pregunto como un ser tan simple como el humano puede llegar a hacer semejantes actos, como puede manipular el corazón de una persona sensible e indefensa, no lo sé, es un misterio por resolver.
Y es por eso, que nunca deseo ver el amanecer, la luz me molesta. Mucho. Prefiero la oscuridad de la silente noche, y el frío del viento acariciando mi nuca.En fin, no me queda otra que terminar ya este semestre e irme de aquí, lo mas pronto posible pero, a veces, me surgen dudas, dudas tales como: ¿y si la culpa realmente es mía por ser como soy?, ¿y si el problema esta en mí?, ¿y si al cambiar de instituto vuelvo a encontrarme con personas que realmente apestan?, bueno... El caso es terminar de alguna manera, ¿no?
Al reaccionar, rápidamente miré la hora de mi teléfono "08:30".
-Oh no, ¡Llego tarde! meh, en verdad me da igual...¡Qué demonios digo!, tengo que ir.
Después de un largo trayecto a pie, llegue a la prisión, una gran presión invadió mi interior, sentí como me ahogaba, no sé por qué digo esto, total, es muy "rutinario" para mí, pero aun asi cada dia el terror me hace u nudo más grande en el estomago.
Al entrar en mi aula, observé el entorno, sonrisas muy falsas se plasmaron en los rostros de mis "compañeros" de clase, mi instinto me decía que algo malo iba a suceder, y dentro de muy poco.
Caminé por el estrecho pasillo entre mesa y mesa hasta situarme en mi pupitre, última fila, a la izquierda,me gustaba mi sitio ya que tenia una columna para apoyar la cabeza entre clase y clase, me encontraba situada en ese sitio debido a mí "extraño" comportamiento, o al menos eso decían mis "adorables" compañeros de aula, sí, era una chica bastante silenciosa y misteriosa, me gustaba ser así, se rumorea por ahí que soy autista, lo cierto es que los profesores dicen que tengo una alta capacidad de conocimiento intelectual, pero, también dicen que debería relacionarme con mis compañeros, pero...siempre temí el rechazo de los demás, por eso nunca intenté acercarme a nadie, aun asi es mas que suficiente el ambiente para darse cuenta de que nadie quería juntarse conmigo.
Como iba diciendo, al retirar la silla de la mesa, observé mi pupitre, parecía tener escrito, en una letra ilegible algo. Observe más de cerca, efectivamente, "slut". Como lo supuse al entrar hace un rato en clase, "hoy sería un día muy, muy largo".
Me pregunto quién ha sido el "graciosillo" que ha hecho esto...se me quitan las ganas de todo.
Las risitas invadieron todo el aula, me cansé, ya no aguanté más, mi reacción fue gritar buscando una respuesta a todo eso.
-¡¿Quien ha sido el idiota que ha hecho esto?!-dije a pleno pulmón.
-Ah, ¿eso?, fuí yo-respondió Akane.
-Maldita...-Salté sobre ella agarrando su cabello rubio, tirando hacia arriba, provocando que inclinara su cabeza hacia atrás.Aprovechando dejé caer mi puño sobre su nariz con toda mi fuerza.
-Vaya la chica que parecía ser tímida al final ha acabado siendo agresiva,¿no es así Akane?-dije con una sonrisa maliciosa
Akane cayó rendida al suelo,su nariz sangraba, y su rostro lucia con lagrimas cayendo de unos airados ojos.
ESTÁS LEYENDO
Confusión.
Fiksi RemajaMisao, era una chica que padecía depresión, o al menos eso creía.Su padre descubrió las cosas que hacia en su habitación, parecía muy callada y triste siempre,y es por eso que se alojaba en la soledad de su cuarto, no salia de allí en todo el día, e...