Con muchas cosas acumuladas desde ya hace mucho.
18-02-2017El tiempo de calma terminó, y quise hacerme la fuerte. La fria que no siente nada. La que puede mantener todo bajo control.
Una vil mentira hacia mi misma.
¿Recuerdas esa ira que estuve sintiendo?
No dejé que se fuera por completo, me guarde un poquito, para poder mantenerme firme y racional cuando fuera necesario.
Siempre me he considerado una persona que usa la cabeza y no el corazón para actuar, y eso me gusta. Sé que te he escrito cosas que no suenan muy racionales, pero era mi mente la que me estaba diciendo todo eso, así que le hacía caso, y ahora, es mi mente la que me habla nuevamente.
He hecho una limpieza total de mi vida. He sacado a todas esas personas que no necesito, todas esas personas que sólo me hablan cuando lo necesitan.
He tomado mi celular y he borrado a toda esa gente que no conozco en las redes sociales. A todas esas personas con las que jamás volví a hablar.
Borré de mis contactos de celular a una chica con la que soliamos ser amigas, pero por culpa de ella ya no lo somos. He borrado a muchas personas con las que jamás he vuelto a hablar. He borrado a contactos que no sabia quienes eran. Borré el número del chico con el que di mi primer beso.
Lo borré a él.
No era la primera vez que me había pedido perdón, y, aunque me gustó esa ultima disculpa, quedó en lo mismo.
Nada.
Todo volvió a lo de siempre. Se puso cortante, dejo de confiar en mi, él tenia problemas y los mios no importaban, dejamos de hablar.
Otra vez el circulo vicioso. Simplemente elimine su número. No le pensaba hablar yo primero de todos modos. No he perdido nada, y me he ganado mi propio respeto.
¿Sabes que más? Con la limpieza de gente, tambien he ido perdiendo el interés de conocerte. Ya no me llama la atención. Ya no me carcome la curiosodad. Sólo me gusta hablarte. Quizás no eres nadie. Quizás sólo eres la voz que siempre esta dando vueltas en mi cabeza.
Quizás solo eres un simple diario de vida.
Esmeralda
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Cartas De Esmeralda
Roman pour AdolescentsEsmeralda ya no sabe que hacer con tantos sentimientos en su cabeza. La única forma de mantenerlos bajo control es escribiendo cartas que jamás enviará. A alguien que quizás no se las merece. O a alguien que quizás no existe. Pero da igual, son sus...