Me desperté con los ojos irritados pero bueno, supongo que fue por causa de desvelarme llorando. Me levante de mi cama para observarme en el espejo, no pude creer que tan jodido estaba, ojos rojos, ojeras, me veía realmente mal pero bueno, fue culpa mía y de el. Mía por creer sus falsos "Te quiero", de el por mentirme.
Todo empezó un jueves, me levante para ir a la escuela, la misma rutina de siempre, me fui directo a bañar, mi mamá me había alistado mi uniforme para el colegio, me lave los dientes, arregle mi cabello y salí fuera de mi casa para dirigirme a la escuela junto con una compañera.
Llegue tarde a la escuela, algo muy común en mi, por lo cual me quedé fuera del colegio hasta que terminará la primera hora para entrar, si más no recuerdo era un jueves y a la primera hora no tenía porque preocuparme ya que no debía de entregar algo.