Aún faltaba aproximadamente unos 20 minutos para que el timbre del colegio sonara y pasemos a la siguiente clase.
Al estar junto a mi compañera nos percatamos de una brisa fresca y fría, algo raro ya que era época de calor, el cielo se estaba poniendo gris, esas nubes solo significaban el que había probabilidad de una tormenta, tocaron el timbre así que pasamos a la clase.
Para mi punto de vista la clase estaba muy aburrida debido a que tocaba química y peor aún porque el maestro explicaba muy lento lo que hacía que me aburriera al punto en que me quedara dormido y peor aún la cereza sobre el pastel es que le caía mal al profesor por lo que este se me quedaba viendo de una manera en la que me decía te odio, pero no le di importancia y fingía prestarle atención a su clase.