Capitulo 2: Allen Wisutaria avril

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El planeta azul:

Un príncipe azul estaba enamorado del color rojo.

Su pelo azul oscuro que le llega hasta su medio cuello suave y esponjoso. Detrás de su espalda amplia y bien formada que cualquiera princesa y príncipe se enamoraría de él, dormido por el césped verde con el viento suave fluyendo y haciendo un conjunto su pelo y la hierba verde que daba todo una sensación de querer acariciarlo.

Un grupo de tres chicas que con su uniforme y seriedad intimidaban, sobretodo la del medio que con su espada guardada en una tónica llena de joyas, siempre con su mano derecha contiene cogido el pomo de su espada tapando su cinturón ya que esa arma se situaba la parte contraria de su cinturón derecho. No tiene confianza ante nadie.

-Chicas, terreno numero 45678 y 45679 se situa un ser vivo sospechoso en el suelo sin armas- dijo una de ellas con todo esa información extraído de unas lentillas SGS.

De repente salio un chico con el mismo uniforme que ese grupo intimidante y se puso a reír:

-Chicas- dijo el caballero totalmente riéndose,- se que os lo tomáis muy enserio el trabajo pero siempre hay un limite, ¿porqué decis el numero del terreno si esta delante vuestro a parte de que sus identificaciones que le habéis puesto..- continuo riéndose

Ellas tres le ignoraron ya que seguramente sus vidas cotidianas siempre contienen esas criticas.

-Nunca me canso de veros haciendo eso, si me disculpáis mis damas me adelanto a ver a ese ser vivo sospechoso- dijo en tono burlador las palabras ultimas.

- Adolf Aoran Abel, tienes que estar siempre en aleta y tu debes de ser unos de los primeros en decir eso ya que estuviste en gran problemas por tu facilidad de creencia ante los demás-

-Sí, sí- dijo acercándose al sospechoso y continuo- Lucy ya te he dicho mil veces que no me hables de esta manera formal somos amigos de infancia.

Lucy quiso decir a Adolf que no le llamase por su nombre pero ya estaba demasiada cansada para continuar con las tonterías del chico.

En un momento las cinco personas que estaban en ese territorio desaparecieron los tres excepto Lucy y el sospechoso.

-Nunca me han gustado esas teletransportaciones que el gobierno hacen utilizar cuando nos necesitan, podrían avisarnos antes de que nos teletranporten.- dijo para mi misma suspirando.

Se acerco silenciosamente con solo el ruido de la natura, giro a ver la cara de el chico y sonrió, tenia toda una sensación de que el chico fuese todo un ángel pero la chica seguía cogiendo el plomo de su espada es un costumbre que nunca se le ira, es todo una cicatriz de su pasado.

Tubo la idea de despertarle pero él estaba tan a gusto que no pudo, así que se quedo vigilandole para que no le pasase nada.

El príncipe después de una larga siesta tubo la sensación de que alguien estaba con él, después de sus entrenamientos tecnológicos dio fruto, lo primero que hizo fue tranquilizarse entonces utilizo su ordenador tecnológico que tenia en su cerebro y conecto un rayo x y vio una chica con el uniforme de soldado, se tranquilizo se tapo los ojos y se levanto.

La chica todo el tiempo no paro de verle pero cuando se levanto hizo un salto por detrás y obtuvo 1 metro de distancio, todo un salto.

- ¿Wow que salto!- dijo el principe- Se nota porque tienes tres insignias en tu uniforme- sonrió.

-Como has podido verme si tienes los ojos tapados, identificase o tendrás consecuencias.

El príncipe sonrió otra vez o más bien dicho no paro de sonreír porqué fue la primera vez que le trataban así de mal y supuso que la caballera no sabia quien era en verdad. No tubo mas remedio que teletransportarse o sino enseñarle sus ojos que le identificaban como el principie demonio, pero no quiso dejar a la chica sin dormir la noche sin saber quien era, pues hubo una acción lenta entre ellos dos: El príncipe mientras se fue quitando su mano, la Lucy se fue quitando su espada escondida en la tela.

En ese mismo instante salio una explosión detrás de ellos dos, esas llamas elegantes y oportunas que mato millones de plantas con sus formas imperativas alcanzando el viento, que la Lucy su pelo negro bien recogido fue soltado, con sus manos llenas de acciones errores de su pasado tapo sus ojos por no haber ningún objeto en contacto. Quito su brazo y vio un paisaje que nunca podría haber visto nunca: El príncipe azul con su vestimento azul y pelo azul envuelto por detrás las llamas rojas contradictorias de su belleza que fueron como llamadas por sus ojos rojos majestuosos, oscuros, solos y sobretodo elegante y terroríficos, todo un demonio.

Con la continuación sonrisa del príncipe dijo, mientras de repente salia agua que se ajuntaba entre ellas y hacia la forma de una espada :

- Yo Allen Wisutaria avril, algún día esas llamas serán controladas por mi, preparense planeta rojo.

Lucy no supo su reacción se levanto, se olvido de todo y lo mas increíble fue que dejo su mano derecha suelta, su pelo largo negro no paraba de moverse detrás suyo y salieron unas lagrimas esas lagrimas que no llegaron a tocar las llamas, esas lagrimas que salieron pero nunca tuvieron la intención de apagar ese fuego.

Era precioso.





The Water and the FireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora