Exponiendo A Camren

Capítulo 28

Lauren POV

En la van podía sentir sus miradas que eran una mezcla de tristeza y ¿decepción? no lo sé, pero preferí ignorarlas concentrándome en la música que salía de mis audífonos y mirar por la ventana. Por momentos en que no había sonido entre el término de una canción y el comienzo de otra podía escuchar el susurro de mis amigas, no era claro pero era obvio que comentaban la situación con la morena, sus miradas se posaron en mi durante casi todo el camino pero las ignoré, era mejor así porque estaba molesta y no quería descargar mi ira con ellas, al fin y al cabo estaban en todo su derecho de acercarse a Camila, perdonarse y blablabla, mi conflicto no tenía nada que ver con el grupo y todas lo sabíamos. 

Una vez que llegamos a nuestro apartamento y apenas puse un pie en el lugar fui directo a mi pieza, no quería ver a nadie y menos a las chicas, en el auto respetaron mi silencio y aislamiento, pero ahora había pasado tiempo y por lo que las conozco sé que quieren saber qué me ocurre y por qué es que nuevamente terminé discutiendo con la menor. 

Puse seguro a la puerta y me eché en la cama, repasé los últimos eventos y me parecía irreal, después de meses manteniendo una lejanía con Camila, peleándome por ella, pasando noches de insomnio deseando tenerla frente a mi y cuando llega el momento ¿qué pasa? discutimos. Las imágenes del encuentro ya me eran borrosas porque todo pasó demasiado rápido, cuando se acercó a mí la rabia me había nublado el pensamiento y ya no recordaba por qué estábamos discutiendo, solo tenía presente cómo todo mi enojo se había acumulado en la boca de mi estómago para comenzar a deslizarse por mi garganta, subiendo a mi boca hasta transformarse en palabras con las que ataqué a Camila.

Necesitaba pensar y hacer memoria, me quedé encerrada en mi cuarto hasta el día siguiente pensando en el encuentro, llegando a fragmentos e imágenes que duraban milisegundos  y me esforzaba por retener. Camila yendo hacia nosotras, Camila disculpándose, Camila siendo perdonada por las chicas, Camila hablando conmigo clavándome sus ojos color chocolate: con expresiones tímidas, avergonzada pero cambiando a una mirada esperanzadora. 

No podía recordar palabras, pero si todos los cambios por las que pasó su rostro y sus ojos, esos malditos ojos que me siguen atrapando. Camila mirándome con dolor, atacándome con sus ojos inyectados en rabia. Camila mirándome con frustración y sufrimiento. Camila dándome una última mirada de... resignación. 

Dormí solo un par de horas, las emociones de lo sucedido me dejaron con insomnio ¿y qué era lo que sentía? al principio tenía miedo de descubrirlo pero ya no podía seguir evitando mis propias emociones. Camila sacudía mi mundo y me dejaba con réplicas sentimentales que me tomaba tiempo superar. ¿La extrañaba? demonios, si, demasiado como para asumirlo por mi propio bien, pero no estaba lista para tenerla de nuevo en mi vida por más que quisiera. ¿por qué? porque por dentro me burbujeaba el rencor y no estaba dispuesta a volver desquitarme con ella. 

Ella se había ido de mi lado, me ignoró, pero también me di cuenta que soy gran responsable del sufrimiento que pasó los últimos meses, me equivoqué tantas veces y eso que me esmeré en amarla. No supe amarla, ninguna supo cómo cuidar a la otra y ahora estábamos pagando por ello.

¿Desde cuando mis buenas intenciones, las ganas de cuidarla y hacerla feliz se convirtieron en este manojo de resentimiento? Ya no importaba la respuesta, tenía que dejar ir todo esto que me está carcomiendo por dentro, por mi bien. Lamentablemente eso no podría hacerlo cerca de ella y eso no puede saberlo la morena, conociéndola y con lo testaruda que es volvería a buscarme, a intentarlo y yo no necesitaba eso, no es que la haya dejado de amar y no quisiera volver a estar junto a ella, Camila es la única persona que me ha despertado en todos los sentidos, me hace sentir viva y cada fibra de mi ser, de mi cuerpo la quiere, la necesita, pero estoy tan intoxicada con mis propios sentimientos que con ella cerca no puedo superarlo.