Capítulo 5

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Harry se rascó la nuca y contestó:

-¿Cómo?

La “sala suicida” envió un link de un juego de rol.

El rizado, algo dudoso, hizo click en el botón “Únete a nosotros”. Eso sonaba algo macabro.

Comenzó a elegir la vestimenta de su avatar; zapatillas, jeans, camiseta, y cabello rizado.

En el juego:

Entró en una discoteca.

-¿Dónde estás?

-Cabello castaño, fleco de costado.

Corrió y se sentó en la barra, buscando a esa persona.

Estaba del otro lado de la barra, tomando unos tragos.

-¡HEY! ¿Eres tú? … ¿Hola?

El chico comenzaba a alejarse cada vez más.

-Creí que hablaríamos… en lugar de bailar en un juego. -Escribió Harry.

Encendió la webcam, esperando ver a la persona que se encontraba detrás de esa “sala suicida”.

-¿Hola?

Se veía algo oscuro, no parecía una persona, pero si lo era.

-¿Hola? ¿Estás ahí?

Silencio.

-Te escucho respirar. –Continuó Harry, esperando que respondiera algo. Estoy mostrando mi rostro. Muéstrame el tuyo. Sala suicida…

Y se acercó a la cámara de golpe.

-¿Usas una máscara…?

Negó con la cabeza.

-¿Estás enfermo o algo?

Negó nuevamente, y giró un poco la cabeza.

-¿Por qué la máscara?

-Me protege.

Al fin contestó.

-De gente dañina y las sustancias.

-¿Necesitas ayuda? ¿Quieres que llame a alguien? ¿Alguien que te vea? –Contestó Harry preocupado.

-¡Observa! ¡Observa muy bien! –Levantó el tono de voz y subió un brazo para mostrarle al rizado sus heridas.

Harry se echó para atrás cuando vio sus profundas heridas.

-¿Lo ves? ¡Trata de llamar a alguien! ¡Me voy a matar, lo haré! Las navajas son mis amigas. Tienen lenguas afiladas. ¿Eso es lo que quieres? –Dicho eso, lamió la sangre de su brazo.

-C-cálmate. –Respondió abrumado. ¿Para qué quieres suicidarte?

Pensó unos segundos.

-Y tú, ¿por qué no quieres?

-Para vivir.

-Y yo quiero suicidarme para morir. Tengo que armarme de valor y lo haré.

-¿Cómo te llamas?

-Louis. Ah… Louis.

-Louis.

-Hola Harry.

-Hola Louis.

Se quedaron unos minutos en silencio, y luego Louis habló:

-Sabes…Esta es mi habitación, ¿te gusta?

Harry asintió.

-Me gusta.

Louis lo miró atentamente y se mordió el labio.

-Y esta es mi habitación. ¿Te gusta? –Preguntó rápidamente.

El castaño rió.

-OK, ¿Qué le pasó a tu ojo?

-Tuve un accidente… por mi propia estupidez.

-Bueno, bueno.

-Un accidente por mi estupidez, a mí también me pasó. –Volvió a mirar su brazo. ¿Tienes pañuelos?

-Tengo un equipo de corredores.

-¿Dónde?

El rizado se puso de pie y le mostró su camiseta que tenía un equipo de corredores. Se movía de arriba abajo:

-¿Los ves correr?

Louis volvió a reír, contagiándole la risa a Harry, pero luego bajo la cabeza y su expresión se tornó seria.

-Ibas bien, hasta ahora… ¿Conoces los componentes del aire que respiras? Este aire te está matando, lo puedo ver. No me engañas. Te estás engañando solo. ¿Por qué lo haces?

-¿Qué quieres decir con “engañar”? No estoy tratando de…

Louis se desconectó.

-¿Hola?

Suicide Room [Larry Stylinson] CANCELADA TEMPORALMENTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora