AL MISMO TIEMPO !ME ENAMORE¡

CAPITULO VIII AL MISMO TIEMPO !ME ENAMORE¡

"ELLA"

En fin yo parecía culpar de todas mis desgracias al sujeto, que me toco de padre, sin darme cuenta que el único culpable de mis travesías era yo mismo, yo mismo me eche a morir sin causa, me encargue de lastimarme por años odiando y recordando ese hecho de mi vida, yo mismo me encargue de joderme, cuando ya comprendí esto, supe que podía ser mucho mejor de lo que él fue, literalmente porque él nunca fue nada al menos para mí. Los tiempos parecían empeorar y mejorar, eran una variable constante de altibajos; donde en las altas muchos disfrutaron conmigo, pero en las bajas muy pocos se quedaron y me dieron la mano, pero este escrito no es precisamente de mi vida, lamento haberme alejado del tema.

Como les decía han sido de muchas de las que me he enamorado recuerdo una vez, mientras estaba en la escuela, conocí a una linda chica, era la mejor amiga de una de mis compañeras una mona alta con el cabello castaño y ondulado, su mirada era cautivadora, me veía en sus ojos como cual mascota mira a su amo al llegar a casa, y lo digo porque no hay sensación una sensación más bella que esa de cuando llegas a casa y tu mascota se alza en tus brazos con esa mirada tan cursi y la vez tan.... No sé cómo explicarlo ¡en fin! Así me veía yo en sus ojos, aun sin conocerla, no sabía si acercarme y pedirle su teléfono o esperar a ver si me lo podía "levantar" por allí, los días pasaban y yo solo la observaba a lo lejos, muchas veces pasaba mi descanso solo viéndole que hacía, que comía, que le gustaba siempre he sido muy observador, a veces pienso que desde un principio debí estudiar psicología pero bueno, el hecho es que una tarde mientras llegaba a mi salón como habitualmente lo hacía. Ellas estaban allí mi amiga y ella, la chica que tanto había observado a lo lejos, a la que no me atrevía acercarme y pedirle un tonto número de teléfono estaba allí a escasos dos metros y lo peor era que yo sentía que estaban hablando de mí, saben no hay una sensación más vergonzosa e inquietante, que saber que alguien está hablando de ti, pero así era, yo me puse mis auriculares y escuchaba música, recuerdo muy bien que escuchaba la canción "el semáforo" un rap reflexivo de Alex Zurdo, tenía la mirada fija en mi teléfono cuando vi que alguien se me acerco ; ¡ no lo podía creer! Si era ella, tanto que había querido acercarme, hablarle, conocerla y ahora ella frente a mí, yo me saque los audífonos y escuche lo que me decía, su voz dulce sus ojos café claro, claros como el agua cristalina de una cascada en su cauce, pero del color del chocolate, me sentí nervioso, asustado, quede congelado mientras ella me pregunto ¿tú quieres mi numero? ¡Anótalo!, no sabía que hacer de verdad me quede petrificado señores no decía absolutamente nada, ¡qué pena! Ella

levemente tomo de mis manos el teléfono, su manos rozaron las mías tiernamente su piel blanca y suave me hacían imaginar la nieve, las nubes y la suavidad del algodón... guardo su número en mis contactos "Carmen" era su nombre, ese día no Salí del salón sentía miedo, pena y vergüenza toda junta, cuando llegue a casa me acosté y tome mi teléfono, busque su número con el fin de escribirle algo, observe ese nombre como una hora sin poder enviar nada, escribía "hola" , "hola como estas" y tenía que escribir "hola soy el tonto al que le tuviste que escribir tu número porque no supo qué hacer cuando estabas frente al él, el cobarde que espero que tu llegaras antes que ir a verte" al final solo se fue un "ola" mal escrito, la respuesta fue casi que instantánea, era como si ella al igual que yo estuviera esperando mi mensaje, como si del otro lado de la pantalla ella observara su buzón a la espera de ese texto, los días y meses pasaron y ella se convirtió poco a poco en mi mundo, en mi vida, en mis ojos, en mi piel en mi respiración, no voy a entrar en detalles pero quiero decirles que ella es una de las personas más bellas de las que me he enamorado.