Te Amo... [Josh Dun] ~pausada~

Diez

Una vez que llegamos a casa le di dos cucharadas de jarabe a Jack y se fue a su habitación.

Entre a la habitación donde Josh estaba tocando la batería y le sonreí.

-No te oí llegar- me sonrio levantándose de su asiento.

-Ésta bien- me aserque a el y lo abracé por el torzo.

-¿Y Jackson?- pregunto pasando sus brazos por mi cuello.

-En su habitación, supongo que dormirá un rato-

-¿Entonces tenemos tiempo?- pregunto pícaro.

-¿Tiempo para que?- le contesté con una pregunta y le sonreí pícara.

-Para hacer cosas sucias- se acercó y me beso suabemente introduciendo su lengua en mi boca haciéndola chocar con la mía y haciendo que se pagarán  como si de un imán se tratase.

Se separó unos sentimetros de mi y me mordió el labio y lo estiró un poco, solté un lebe gemido.

-Tengo hambre- dijo separandoce completamente de mi.

-Lo suponía, casi me comes el labio- le dije burlona.

-Lo siento- se disculpó y depositó un beso en mis labios.

-Iré a preparar algo para que comas, ¿Esta bien?- lo abracé otra vez y le apreté una nalga.

-Me parece bien- me devolvió el apretón.

Sonreí y salí de la habitación en dirección a la cocina.

Abrí la heladera para ver que es lo que aría, no tenía muchas ganas de cocinar así que tomé unos burritos que estaban congelados y los puse en el microondas por unos diez minutos.

-¿Que harás?- pregunto Josh sentándose en la mesada.

-Burritos recalentados-

-Que delicioso- se burló- Quiero teñirme el cabello otra vez- soltó luego de unos segundos.

-No, no y no- me negué rotundamente.

-Oh vamos ¿Porque no?- preguntó levantando las cejas.

-¿Te quieres quedar calvo?- le pregunte un poco alterada.

-Sólo una vez más y luego de que se salga el color me dejo mi color natural- levantó los hombros.

-No, no te vas a teñir el cabello, vas a quedar como Michael-

-¿Cuál Michael?- fruncio el ceño.

-El chico de 5sos- dije dándome vuelta para agarrar un basó y servirme agua.

-No seas exagerada, además yo me pongo gorra y si algún día me llego a quedar calvo, que Dios no lo permita- dijo haciendo un paréntesis- nadie lo notará ya que mis maravillosas gorras tapan todo-

-No me interesa, ya dije que no te vas a teñir Josh- tomé un trago de agua.

-¿Quen se va a teñir?- preguntó Jack entrando a la cocina.

-Creí que dormías- dije mirandolo.

-Estaba jugando a la Play- sonrio achinando sus ojos -¿Y quien se va a teñir?-

-Yo, pero tú mamá no quiere- dijo Josh poniendo los ojos en blanco.

-¡Oye si, puedes pintartede amarillo y yo me puedo hacer blanco!- dijo emocionado.

-No, ninguno ese teñira- deje el basó en un costado haciendo bastante ruido.

-Ay mamá por favor- me rogó Jack con las manos como si estuviera rezando.

Estan locos si piensan que los voy a dejar teñirse el cabello, no quiero que Josh quede calvo y tampoco quiero que Jack comience a teñirse el cabello asta quedar calvo, no, no quiero.

-Ya dije que no- lo mire segura -Ven aquí que te voy a limpiar esa nariz- le estire los brazos para que caminara hacia mi.

-¿Que pasó con tu nariz?- le preguntó Josh con un lebe movimiento de cejas - déjame adivinar- puso una mano en su barbilla- Te diste a piñas con ese tal Thomas y te dio un buen piñón en la nariz-

-Cállate -fruncio el ceño Jack-Me caí del mástil y me rompí la cara-

-¿Seguro?- le preguntó burlón- No será que Thomas...-

-Thomas es un maldito maricon y no se a treveria a tocarme- dijo furioso Jack.

-Si tu lo dices- Josh levantó los brazos rendido.

-Bueno bueno- puse mala cara por lo que acababa de decir Jack.

Le quite el algodón cubierto de sangre que tenía en la nariz y lo tire a la basura.

-Ve a enjugarte con agua -le dije apuntando a el lava manos.

[...]

Los chicos estaban por ir a la casa de los padres de Josh.

Luego de que Jack se terminó de limpiar la nariz seguimos con la discusión de que ellos se querían teñir y yo no los dejaba.

Se hicieron los ofendidos y se fueron a comer los burritos al patio, luego de un rato regresaro y Josh me dijo que se irían un rato a lo de sus padres a lo que yo no me opuse.

NARRA JOSH

Jack y yo tuvimos la idea de ir a la casa de mis padres y decirle a mi madre que nos tiñese el cabello.

Le dije a Cata que  nos íbamos a lo que ella no se opuso para nada ya que no sospechaba nada.

Estaba conduciendo en dirección la casa de mis padres pero recordé que tenia que comprar la tintura para Jack y para mi.

Entre a una farmacia y pedí una tintura blanca y una amarilla.

Lo se, se que amarillo no es el mejor color para ponerme en el cabello pero a Jack le gustaba y yo sólo quería complacerlo.

La chica que me atendió me comunicó que no tenían tintura amarilla así que sólo compre la blanca para Jack. Cuando le dije que no había comprado el amarillo su cara se le transformó en decepción total.

-Tranquilo Jack, al menos tu te lo teñiras- le sonreí estacionado el auto serca de la casa de mis padres.

-Pero se suponía que esto lo haríamos los dos- fruncio levemnte- ahora mamá me matará- se bajo del auto una vez termine de estacionar.

Baje y me aserque a el.

-Ésta bien, si quieres no te pintes el cabello, es tu decisión- le dije relajado levantando los hombros.

-No, si quiero- respondió rápidamente y sonrio.

-Entonces no te quejes-

Tocamos la puerta y luego de unos segundos salió mi madre con una gran sonrisa en su rostro.

-¡Hijo!- dijo feliz tomado mis mejillas y besandolas.

-Hola mamá-

-¡Hola mi vida!, ¿Cómo estas?- le apretó los cachetes a Jack y luego le beso toda la cara.

-Esto bien, ¿y tu?- le respondió con dificultad.

-Feliz de tenerlos aquí- aplaudió con emoción -Estoy haciendo galletas pasen- dijo dejando que pasemos.

Jackson apenas entramos se fue a la cocina corriendo.

-¿Que los trae por aquí? ¿Y Catalina?- pregunto mi madre aún con esa sonrisa.

-Queríamos pedirte un favor y Cata esta en casa- dije apretandole el hombro con mi mano.

-Dime y te dire si puedo ayudarte-

-¿Le puedes teñir el cabello a Jack?-