Capitulo IX: Debut.

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La gotera llegaba hasta la sala más baja del sótano, donde se encontraban nuestros vencidos jóvenes, ya con las ideas gastadas, parecían haberse rendido ante el sonido irritante de la gotera, la sonrisa fúnebre del asesino de gabardina roja y el intenso olor a sangre que inundaba el nauseabundo lugar.

– ¿cuantas de azúcar, cariño? –preguntaba el asesino de gabardina roja, tratando de batir el té de su tasa con una pequeña cuchara, disfruto de un sorbo sentado de piernas cruzadas en el mueble frente a Janna, teniendo una pequeña mesa de por medio. Janna le contesto con una mirada de furia, teniendo su tasa aun en la mesa frente a ella, no podía soportar el hecho de que Jake estuviera sometido en el suelo por Cheshire aun, junto a ella.

– ¿de dónde sacaste esa gabardina roja? –le pregunto ella, cambiando su expresión, a una hipócrita alegría, apretando los puños para controlar la impotencia.

–la hice yo mismo, era mi bata cuando era doctor... yo mismo la teñí... antes de sobrescribirte parcialmente la memoria me encargue de regalarte esta para que combinará con la mía cuando lográramos abrir las puertas. Cheshire suelta a Jake, Janna suspiro detenidamente, pero luego se sorprendió de golpe, al ver las esposas que le puso a Jake en ambas manos, que se las sostenían tras la espalda, Janna volvió a decepcionarse.

Cheshire fue tras el suéter que le había arrancado con anterioridad, entregándoselo al Dr. Erased en las manos, Jake reaccionó rápidamente, sin importarle nada más en particular que Janna, se asomó tras ella y la jalo por el cuerpo hacia atrás, dejando caer el sillón donde estaba sentada; para bloquear los disparos predecibles de Cheshire, luego un titilar rojo sacudió las esposas con un vibrar, deteniendo a Jake por la sorpresa.

–tu juego acaba de comenzar, pensé que tardarías menos, tienes tres minutos para estar a más de cuatro kilómetros de Janna, mientras más cerca estés de ella... tu tiempo correrá más rápido y un letal veneno entrara en tu sistema por las esposas, suerte –explico el asesino de la gabardina roja con una sonrisa, esperando las reacciones de sus víctimas paralizadas.

Jake miro a su alrededor, notando que la habitación solo tenía cuatro paredes y cuatro puertas totalmente iguales, beso rápidamente a Janna en los labios sin que esta pudiera escaparle y le susurro algo al oído para luego huir por la puerta tras ellos, la única abierta aparentemente. El Dr. Erased se llenó de ira repentinamente y obligo a Cheshire a ir tras el con señas claves que solo ambos entienden.

– ¿cómo te atreves a rendirle tributos a otro hombre que no sea tu creador? ¡Zorra! –exclamaba el Dr. Erased con enojo por celos, desenfundando su estoque desde el fondo de su gabardina. Pero la puerta de la izquierda se abrió de golpe, se trataba de Nur, caminando con ayuda del ensangrentado sable de William, tenía ambos pies torcidos y con su otra mano sostenía su aun sangrante abdomen; Janna se llenó de asco y sorpresa, mientras el asesino de la gabardina roja solo sonreía.

– Lo que fuera por los amigos –dijo Nur luego de escupir sangre, arrojándole a Janna su estoque e inmediatamente cayendo en el piso por sus daños– ¡corre!

Janna tomo con fuerza el estoque de su amiga, y corrió hacia una puerta nueva, con lágrimas de impotencia en sus ojos. El Dr. Erased intento seguirla, pero Nur en el suelo lo tomo por el pie, el asesino sonrió nuevamente y le contesto clavándole su sable en la espalda, atravesando su corazón, aun así Nur no dejo de sujetarlo con fuerza, el Dr. Erased carcajeo y procedió a clavarle su estoque una y otra vez hasta que perdiera las fuerzas, luego de que la vida de Nur llegara al escalón final, el Dr. Erased la tomo de la pierna y llevo al incinerador.

–Encargarse de que no vuelvas a resucitar será menos complicado cuando te meta en el incinerador, con los cadáveres de tus otros amigos –menciono el asesino, llevándose a Nur a cuestas.

Sombras Modernas #PGP2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora