Un día en Cambridge.

Capítulo 6. La otra cara de la moneda.

Hoy es miércoles, día de mi clase favorita, con el profesor Hiddleston. El profesor Hiddleston me hace levantarme de ánimo, al pensar que siempre me recibe con una calurosa sonrisa que me hace sentir mariposas en el estomago. Tomo mi mochila, mis libros y parto rápidamente hacia la universidad.
Cuando llego al salón me encuentro con algunos compañeros y con Eddie, que al parecer está de mal humor y prefiero no molestarlo. Él me mira con disgusto y lo ignoro, no quiero tener problemas con nadie. En eso llega Tom pero me sorprendo de verlo con otra cara, y el lugar se torna diferente.
Hiddleston. Buen día a todos. Hoy nos concretaremos en ejercicios básicos de griego antiguo y no me importa si no saben, al estar en esta clase deben saber un 50% por lo menos. Eddie, puedes leer el párrafo 250 del texto de Jenofonte.
Eddie. No creo que sea necesario leerlo...

Todos voltean asombrados que haya contestado tan tajantemente.

Anna.- Cielos...

Tom.- ¿Qué acabas de decir?

Eddie.- Considero que no es necesario leerlo, cuando podemos traducirlo de inmediato, no es necesario repasarlo.

Anna. -(Pensando) Eh? Pero si es uno de los textos más difíciles de traducir.

Tom.- ¿Señor Reymaine acaso sabe cual es su lugar?

Eddie.- Eh?..

Tom.- Su lugar es de un alumno, un alumno que debe ser respetuoso ante sus superiores y humilde ante sus compañeros, no importa si es un alumno avanzado y condecorado, creo que aun le falta más educación.

Nadie podía creerlo el amable Doctor Tom Hiddleston cambió su semblanza dulce a una dura y cruel. Anna estaba pasmada.

Anna.- A esto se refería el Doctor Benedict, su otra personalidad.

Eddie no podía decir ninguna palabra ante tal contestación del Doctor Hiddleston.

Tom.- Alguna otra opinión pueden decirla ahora. Mirando hacia toda la clase.

Alumnos.- No, no ninguna profesor.

Tom. Continuemos.

Anna.- Aunque no se dirigió contra mí, sentí su dureza en el aire, me siento triste. Como una persona puede cambiar tan fácilmente.

Durante toda la clase se sintió una tensión por parte de todos los alumnos y nadie dijo una palabra, solo en las participaciones que pedía Hiddleston. Anna ya no podía mirarlo se sentía un poco desilusionada . Anna no se dio cuenta que Tom la miraba y que también el se sentía triste porque en toda la clase no volteo a mirarlo.