capitulo 28

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Habian de todos tamaños, clase, color y grosor. Un mundo por descubrir.  Alexander posó una de sus manos en mi espalda, empujándome para que entrara dentro de la habitación.

Había unas largas escaleras para alcanzar los libros de los estantes más altos,  sillones y mesas y lámparas en dos esquinas. Una alfombra realmente bonita estaba en el suelo, con diseños florales rojos y verdes oscuros. Sentí una mirada de él sobre mi rostro, expectante.

-¿Te gusta leer?

-Por mi leería todo él día.....- Murmuré, sin mirarlo.

-Ve y revisa lo que quieras. Debo hacer unas cosas- sonrió antes de alejarse de la biblioteca, dejándome sola.

Caminé hacia una mesa, donde habían varios libros. Me hinque frente a ellos y comencé a ver sus títulos, hasta que vi uno; Romeo y Julieta.

Mi libro..... En mi casa ... Junto con los otros de mi madre. ¿Cómo los pude haber olvidado allí? Debía tenerlos. Ahora. Ya

Me levanté, decidida a ir hasta allí para buscar mis libros. Sabia ya por la hora que mi padre no estaría en casa, así que tenia como dos o tres horas como mínimo para ir y volver.

Nadie debía verme si quería ir rápido, así que bajé las escaleras lo más despacio posible. Por mi peso y estatura, mis pasos eran ligeros y no resonaban por él suelo, pero aun así tuve cuidado.

Llegue a la sala, dónde estaba al fondo de la puerta que daba al exterior. No había nadie, excepto Sr. Tuko, quien estaba sobre él sofá, mirando mi llegada expectante. Abrí la puerta, escuchando y chirrido de parte de ella. La abrí lo necesario como para poder salir

Corrí por las rocas y tierras y pedazos de césped ágilmente. No quería demorarme mucho. Alexander podría ir a buscarme y no encontrarme donde me había dejado, o también Socia, o Maria, o Carlos.

(......)

El olor dentro era insoportable. Platos y vasos amontonados en él lavaplatos, sucios, de hace semanas. El suelo lleno de migajas, húmedo, con hongos. Todo estaba deteriorado.

Papá no había echo nada mientras yo no estaba. Me sentí mal por él momento, pero luego me arrepentí. Fui a mi habitación, que se encontraba tal cual como la había dejado. Me agache para ver debajo de la cama y vi los libros. Todos.

Sonreí y los cogí entre mis manos, sintiendo el conocido tacto sobre mis dedos. Revisé los títulos una ves más y comencé a ojearlos.

Lo que me llamo la atención, fue una hojas en medio de un sobre; arrugados y sucios, todos juntos. Tome él mas grande que se encontraba doblado por la mitad.

Cuando lo empecé a leer, él mundo cayó sobre mis pies.

-adopción.....

Susurré, bajo mis propias lágrimas.

-Padres biológicos: Patrick Wells y Christina Wells. Padres adoptivo: Seth Deveraux y Amanda Deveraux..... No....

Me rompí en ese momento.

La presión era demasiada. Nesecitaba procesar aquella información con tranquilidad. Volví a dejar todo en él libro y lo cargue todos firmemente contra mi pecho para poder irme de aquella casa que jamas fue mía.

Mi..... Padre, no había tenido ningún derecho sobre mi, como para golpearme todos los estos años. ¿Y mi "madre"? Lloriquiee todo él camino hasta llegar a la casa de Alexander.

Entre por la puerta de atrás, por la Codina. No había nadie. Subí lo mas rápido que pude las escaleras para ir directamente a la biblioteca. Me fui a un rincón, acuclillandome en una esquina y dejando todos los libros frente a mi. Volví a sacar aquellos papeles y continúe......

-nota autora-

holas de nuevo, perdón por él tiempazo en él que no actualice, ahora nos ponemos la pilas 😘

Help me please!! (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora