°The Brothers Jeon°

F

- Niños, mañana será su último día juntos, Jungkook debe volver a su casa.

- Lo se papá.

- Vayan a dormir ya, buenas noches.

Dijo Jou llendo a su habitación.

- Buenas noches.

Dijeron los menores cerrando la puerta de la habitación que compartían.

- Vamos a dormir Jungkook.

Taehyung al voltear, fue su sorpresa que sus labios eran apretados por los de Jungkook.

- No quiero irme Tae...

Lo abrazó y apretó.

- Vamos kookie, nos seguiremos viendo.

- De todas formas, no quiero irme.

- No dejaré que te vallas.

Lo abrazó de nuevo y besó en la frente, de la mano se acostaron y durmieron abrazados.

- Buenos días niños, ya despierten, Jungkook tu madre vino a verte.

- No quiero.

Dijo medio dormido y se enganchó del dorso del mayor.

- Jungkook, mi amor, ya llegamos.

- Mami.

Jungkook se levantó dejando al mayor aplastado y medio despierto.

- Mi vida, vamos a casa.

- Pero... Yo quiero estar con Tae.

- Ya estuviste con el dos meses mi amor.

Su madre tomaba la mano del menor y éste la miraba con súplica.

- Está bien kookie, nos veremos más tarde.

Taehyung abrazó al menor sobando su espalda.

- Son tiernos ambos, se han vuelto muy buenos amigos.

Jou hablo dirigiéndose a Hirima, desde el marco de la puerta.

- Lo siento por ellos.

Susurró alzando la mirada un poco afligida.

- ¿Que quieres decir?

Jou no comprendía por que decía esas cosas.

- Te espero abajo cariño.

Besó su mejilla y salió de la habitación con Jou siguiéndola.

- ¿Y bien?

Estaban en la sala.

- Nos mudaremos.

- Bueno, solo tienes que darme tu nueva dirección e iremos a visitarlos.

- Nos iremos del país Jou.

Hiroki estaba en casa acomodando todo, no quería despedirse de nadie y mucho menos ver a Jungkook feliz con su mejor amigo.

A él no le gusta ser sentimental.

- ¿Del país? Pero... No puedes, se acaban de conocer, han pasado excelentes días juntos, se quieren como hermanos, oye... ¿Por que?

Jou estaba un poco triste y molesto por la noticia.

- No fue mi elección, debe pasar y listo.

- Taehyung... Nunca ha tenido un amigo, no como Jungkook, él lo ha cambiado para bien y estoy agradecido, es más amigable, se comunica más, es más... Feliz, Taehyung no podrá con su partida y menos tan de repente.

- Lo siento.

Mientras tanto Jungkook y Taehyung se abrazaban como si no hubiese un mañana, a pesar de que, según ellos, se seguirían viendo.

- Siento que algo malo va a pasar, no quiero.

- Kookie, siempre estaré aquí, pase lo que pase, siempre estaré esperándote.

- ¿Lo prometes?

- Lo prometo.

Sus manos fueron a sus caderas y las del menor al cuello de éste.

- Somos almas gemelas ¿Cierto?

- Más que eso.

Le depositó un tierno beso en sus labios, un beso que prometía muchas cosas, a pesar de que Jungkook estaba llorando, sonreía en medio de ese apretón de labios.

- Jungkook ya nos vamos.

Escuchó desde la planta baja, los pasos iban subiendo mas y mas y Taehyung no se despegaba de él.

- Ta- Mi... Mi mamá.

- Shhh.

Lo besaba con tanta necesidad que Jungkook no sabía seguir el ritmo.

Al escuchar la puerta abrirse Taehyung se despegó de él y lo abrazó fuertemente.

- Cuídate Jungkook.

- Te quiero Taehyung.

Dejaron de abrazarse y Hirima tomó de la mano a Jungkook, llevándolo así a su casa.
••••••
- ¿Que?

- Shh no grites Jungkook.

- Yo me quedo, no me voy a ir... ¡No quiero!

Hiroki le aventó un cojín y después tapó su boca.

- ¿No entiendes? Mamá ya no puede estar en esta casa, Jess nos dará una nueva, ¿Por que eres tan pesimista?

- No quiero irme...

- Es por el vecino ¿Cierto? Es por ese niño tonto que tanto quieres ¿No? ¿Por que no le dices que sea él tu hermano?

- No seas tonto, tu eres mi hermano y te quiero más a ti.

- Entonces ven con nosotros y olvida a ese niño, no lo necesitarás, el tendrá nuevos amigos igual que tu, deja de ser un bebé.

- Tu eres el bebé...

No sabía que las responder por que Hiroki jamás le había hablado así, tan duramente, a pesar de ser el menor, tiene un carácter muy fuerte.

- Mamá está enferma, tenemos que irnos por eso.

- ¿Mamá?

Se sorprendió y Hiroki tomó su manos para después, cerrar la puerta de la habitación y sentarse en la cama.

- Me di cuenta en el viaje, no es la misma de siempre, quería dormir todo el día y lloraba en las noches, ha estado tomando pastillas, no se para que sean, pero ya no quiero ver así a mamá, no más.

- Nos iremos entonces.

Jungkook abrazó a su hermano y con todo el dolor en el alma, empacó sus cosas y ayudó a su madre a empacar lo demás.

- Mañana no irán a la escuela, ya que el vuelo es en la tarde, necesito que sigan guardando sus cosas. Ya vendí unas y otras las regalé, escojan bien lo que vayan a llevar.

- Si mamá.

Jungkook cerraba su última caja para después abrazar a su madre y darle un vaso de agua, fueron a dormir todos juntos en una cama, Jungkook pensó hacerle caso a Hiroki y olvidar a Taehyung, seguro que encontraría a alguien mejor para ser su amigo y él también encontraría a alguien.

Aunque si solos sinceros, no le agradó la idea de imaginar a Taehyung besando otros labios.

Frunció el ceño y se levantó por un vaso de agua.

- Hola.

Quería gritar, pero no podía... Sus labios eran sellados por otros, suaves, con sabor a chocolate dulce y sobre todo cálidos.