Reconciliacion, parte 3 (percabeth)

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Annabeth estaba, como los demás, sentada en su cama leyendo un libro de arquitectura para despejar su mente del tonto de Percy. Ella no sabia por que pero sentía la necesidad de ir al establo donde hace algún tiempo paso un lindo rato con Percy. Camino con la vista puesta en el libro y cuando ya estaba abajo choco con alguien cayendo encima de él.

-Ah, eres tu.

-A mi también me agrada ver te Annabeth.

-¿Que haces aquí sesos de alga?-dijo cerrando su libro pero seguía en el suelo.

-¿Como que quiero? ¿que quieres tu, por que viniste hasta aquí?

-Eso Perseo, no te incumbe.

-Uff, la listilla sigue furiosa.

-Ya cállate.

Los dos se quedaron allí sentados uno al lado del otro en silencio.

-¿Quien fue tu primer beso?-quiso saber Percy.

-Te lo diré si u me cuentas el tuyo.

-Trato- se dieron la mano y Annabeth conto su historia

                                                                         ...

Annabeth apenas tenia 7 años de edad y se había escapado de casa y hace no mas de unos días se había encontrado con dos chicos que sufría el constante ataques de los monstruos y también se habían escapado por la falta de preocupación de sus padres, la chica con el estilo punk se llamaba Thalia Grace y el chico rubio se llamaba Luke Castella. Los tres vagaban por las calles de San francisco. Ellos hicieron una parada en una pastelería de allí.

-Yo me quedo aquí-habiso Annabeth.

-Pero Annabeth, puede ser peligroso por los monstruos-trato de convencerla Thalia.

-Tranquila, Thalia. Annabeth sabe cuidarse sola-apoyo Luke a Annabeth quien antes de entrar a la pastelería con su amiga le guiño un ojo.

Annabeth quedo boba con la variedad de pasteles que había en la vitrina. No podía creer como alguien podía crear pasteles tan bonitos. De lo absorta que estaba ella no se percato que un niño de su misma edad también los miraba. El chico al ver que Annabeth lo miraba, sonrió.

-Hola-le saludo el chico dándole una sonrisa, le faltaban algunos dientes. Su cabello era negro y largo, pero no pudo adivinar su color de ojos por que no se veían bien debajo de ese cabello. Bueno, anabeth no se quejaba, ella también tenia un flequillo que tapaba gran partes de sus ojos

Annabeth no respondió y se volvió a girar a hacia los pasteles.

-Me gustan los pasteles-intento hablar el niño de nuevo-¿y a ti?

Ella  se limito a asentir.

-No hablas muchos, yo hablo mucho por que soy hiperactivo, mi mami me lo conto.

Volvió a fijar su vista en el chico y se dio cuenta que estaba pegado en el vidrio con la boca abierta y haciendo ruido. Ella no puedo evitar reírse de él.

-Soy Pe...-no pudo completar su nombre por que su madre a lo lejos lo llamo.

-Yo soy Anna...-Tampoco pudo completar su nombre por que un temblor en el suelo hizo que perdiera la concentración.

-Ya me voy, me gusto conocerte Anna.

- A mi igual Pe.

El chico se rio a todo pulmón.

-No eres muy lista. Ya me tengo que ir, adiós- el niño salió corriendo mientras se despedía con la mano a lo lejos.

-Adiós-grito ella para que la escuchara, no sabia por que sus amigos demoraban tanto.

No se percato que el niño había vuelto, su intención era besarla en la mejilla pero ella sin querer se dio vuelta y se dieron un beso. El chico cambio de color a un rojo intenso y salió corriendo sin mirar hacia atrás. Annabeth se quedo parada allí como el chico a quien le había dado su primer beso apurada a su madre para que desaparecieran.

-Annabeth, no vamos-Thalia le tomo la mano y tironeaba de ella pero no se movía había quedado tan sorprendida que no se había dado cuenta del monstruo que los iba a alcanzar.

-Tenemos que irnos ya-Luke la tomo en brazos y salieron corriendo.

                         ...

-Estas de broma cierto- le dijo Percy.

-Claro que no, tonto-Annabeth le golpeo el hombro.

-Annabeth, podras ser hija de Atenea pero habeces no eres muy lista.

-Dioses del olimpo no me digas....

Percy carraspeo.

-¿Te gustan los pasteles?-dijo con voz de niño pequeño-y hablo mucho, soy hipercativo, mi mami me lo dijo.

-Tu eres Pe.

-Y tu Anna, nunca olvide ese dia, si te hubiera visto los ojos te habría recordado.

-Yo tampoco te vi los ojos, sesos de alga.

-Entonces...mi primer beso fue...

-conmigo y el mío contigo.

Se acercaron mas el uno de otro, el paso su brazo por los hombros de Annabeth y ella se acomodo en su pecho.

-Fue uno de los mejores besos de mi vida.

Annabeth rio y lo beso.

-¿Y este no lo es?

-Va por ahí- Percy se abrazo mas a ella y los dos se quedaron disfrutando el momento.

Conociendo mejor el uno del otro gracias al juego del miedo. Finalizada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora