Un Mundo Escondido Jamás Revelado [[PAUSADA]]

Parte 2

Se pasa dos horas mirando, hablando, decidiendo... pero algo le dice que tiene que pasar la mano por los objetos para a ver si siente algo. Le pide a la dependienta que ponga todos los objetos que le han llamado la atención encima del mostrador (que la dependienta no lo entiende), una vez que él tiene todos encima del cristal del mostrador, abre su mano izquierda mientras se concentra en que quiere sentir algo diferente con el objeto que sea para Iris. Cuando ya ha llegado mas o menos a la mitad de los objetos, parece que percibe algo anormal con uno en especial... es el árbol de la vida... que para él no significa nada, pero sabe que cuando ha sentido algo parecido y lo ha cogido... le ha gustado sin dudar a su novia.

Está decidido, se lleva ese. Aunque ahora queda el de su cuñada, pero sabe cuál es desde que ha entrado por la misma puerta de la tienda... es un colgante de chacras que se puede utilizar como péndulo.

Cuando se dispone a salir de la tienda, entran por la puerta su cuñado y su cuñada con la intención de cogerle ellos también algo porque han estado hablando con Iris y ya saben lo que quiere o le gustaría de regalo. Aunque no saben que Eros se les ha adelantado, se ponen a rebuscar toda la tienda como si fuesen unos inspectores de hacienda o algo por el estilo. Después de tirarse un rato en la tienda... cuando la dependienta ya tendría que estar cerrando... Eros le dice a Elia que pueden pagar a medias el colgante comprado por él a su novia y así es de los tres (aparte él no tendría que pagar tanto), pero Dante ha visto desde que ha entrado por la tienda el regalo que le van a hacer por parte de ellos... es una ninfa... que simboliza la protección del sitio donde se coloca, aunque él no sabe para qué sirve, solo ha tenido un presentimiento y está seguro de que le gustará. Mientras... Elia sin darse cuenta es convencida por la dependienta de que le tiene que comprar un colgante a su hermana, aún sabiendo que Eros ya se lo ha comprado hace un rato. Dante se da cuenta... se pone nervioso... no sabe si decírselo o no... se acerca a ella en un abrir y cerrar de ojos e interrumpe a la dependienta, cortando todo trance inducido por ella para que Elia reaccione. Le ha salido bien, se ha dado cuenta a tiempo... ella corta a la señora de la tienda diciéndole que el novio de su hermana ya tiene ese mismo detalle y que claro está no va a gastar dinero en lo mismo.

La dependienta nerviosa por dentro pero tranquila por fuera... le cobra a Dante y Elia el regalo que ha escogido él en un principio nada más entrar por la tienda. En ese transcurso de tiempo Eros sale por la puerta de la tienda despidiéndose de la señora todo eufórico por darle el regalo a su pareja, que lleva toda la tarde eligiendo entre cientos de objetos, libros y demás instrumentos esotéricos.

Espera a la salida fumando un pitillo de lo nervioso que está. Quiere hablar con su cuñada... explicarle lo que ha pasado estando allí dentro... pero ellos salen con mucha prisa porque se van a cogerle una rosa para Elia que tiempo atrás había dicho que al no haber dinero el regalo que le apetecía era esa flor y el sin más dilación, no les interrumpe dejándolos ir a la floristería.

Se queda con ganas de expresar lo que ha sentido, como ha llegado a elegir ese detalle, que ha pasado con la dependienta, etc. Como sabe que no es el momento, les ha dejado ir, quedándose reprimido pero por otra parte relajado por lo que ha transcurrido en todo el día y que al final ha conseguido su objetivo. Se va hacia su coche andando muy lentamente, no sabe el porqué ni el cómo ha llegado a quedarse tan relajado e incluso cansado, como si se sintiese en una nube después de haber pasado la tormenta. Llega al coche... respira muy hondo quedándose súper satisfecho con lo que ha hecho durante el día.

Antes de entrar por las puertas de casa se asegura de guardar bien los detalles para las gemelas porque sabe que su novia Iris le gusta buscar su regalo como motivación para la sorpresa que le espera. Entra pensando que con todo el tiempo que ha tardado en llegar a casa dado que ha ido lo más lento posible sin saber porqué, para contemplar el paisaje que iba transcurriendo a lo largo del viaje a casa y sintiendo la vida del resto de gente que veía por la calle (porque haciendo eso sabía la vida de las personas). Ellos ya tendrían que haber llegado, pero no es así. Busca por toda la casa a ver si hay alguien para ver qué es lo que se va a preparar o hacer. Lo que encuentra es a su novia en el aseo dándose un baño relajante... ya que no había nadie en casa ha aprovechado el momento. Él entra, se sienta en la tapa del váter diciéndole a Iris que cree que sin dudarlo ha elegido el regalo perfecto para su 26 cumpleaños.

Entre una cosa y otra le pide a Eros que se bañe con ella... no duda ni un momento en contestarle que sí, que no hay ningún problema (siempre es muy servicial), así recuerdan viejos tiempos cuando no había tanta falta económica... quebraderos de cabeza... y tenían más tiempo para ellos dos. Se sumergen en un sueño de recuerdos... momentos bonitos... situaciones apasionadas... noches románticas... cuando Elia da golpes en la puerta diciendo que ya está preparado el picoteo antes de la cena, lo que hace desconectar de esos momentos y volver a la realidad... es el cumpleaños de las gemelas. Eros e Iris terminan de bañarse con una sonrisa en la boca de cada uno, están los dos contentos por tener ese momento, en un día tan especial.

Se han arreglado lo más rápido posible y ya está todo preparado en la mesa del salón.