Un Mundo Escondido Jamás Revelado [[PAUSADA]]

Parte 3

- ¡A que no sabes lo que te he comprado! Espero que te guste porque he estado hoooras eligiéndolo. – Dice Eros terminando la última cucharada de la tarta que habíamos comprado, al mismo tiempo deja la cuchara y coge su bandolera para darle el increíble regalo.

- Pues no... ¿Qué es? –Lo coge de encima de la mesa y con cara ilusionada lo mira detenidamente.

El regalo es una cajita pequeña, como la de un anillo, pero un poco más grandecita.

- Que bien está envuelto – Mientras lo abre está pensando ella que tiene que ser de una tienda porque parece muy perfecto. Sin poder aguantar más rompe como puede el regalito de su novio esperándose algo increíblemente atractivo a sus ojos.

La caja es pequeña, tiene un color oscuro y en la parte superior lleva un grabado de una de las dos únicas tiendas esotéricas de la ciudad. Nada más tocarla Iris le recorre una sensación de insatisfacción por el cuerpo, aun así, su ilusión sigue hacia delante y habré la caja...

- Qué bonito... la verdad... no me esperaba para nada esto. - Dice Iris cogiendo lo que parece ser un colgante de forma redonda con una especie de enredaderas dentro de ese círculo.

- Vaya hija... esperaba más ilusión cuando lo vieses... pero veo que no te ha gustado como el resto de regalos que te he dado tiempo atrás. - Dice Eros con cara de indignación por la NO sorpresa de su novia, después de todo lo que ha pasado para elegirle el regalo.

- Pe... pero... ¿no te gusta nada?

- Sinceramente... me esperaba algo más que un "árbol de la vida" en colgante viniendo de ti, pero bueno... veo que no siempre vas a acertar con lo que me gusta. – Coge el colgante... lo pone de pie dentro de su caja... lo separa un poco... pero de cara hacia ella para ver si viéndolo más tiempo le aprecia algo más fascinante, bonito, interesante... ¡o algo! aunque no cree que vaya a cambiar su pensamiento. Mira hacia su hermana que también tiene un regalo para ella. Aparte de que este es más grande, tiene bastante esperanza de que sea mejor.

- Toma... no sé si te va a gustar... pero... bueno, primero lo primero, esto es de parte de nosotros para alégrate el día. – Se va al cuarto a buscar una rosa muy bonita y bien decorada.

- Pero si no teníais que regalarme nada... no hay dinero como para desperdiciarlo. – Dice Iris, aunque le hace mucha ilusión abrir regalos el día de su cumpleaños y lleva esperando este último mes con impaciencia el que llegase este día.

- Esto es por haberte dejado sola en casa, un día como este que es nuestro cumple y deberíamos estar juntas. – Elia saca de detrás suya la rosa y se la da a Iris.

- ¡AH!¡No me lo puedo creer!¡Pero vosotros sois lo que no hay! No teníais porque haberme regalado la rosa como disculpa... si yo he estado súper tranquila... he estado fumando... recogí un poco la casa... y me ha dado tiempo de depilarme tranquilamente... - Ella lo estaba diciendo para que no se sintiesen tan mal, pero antes de que entrase Eros esa tarde por la puerta, Elia se estaba sintiendo muy sola y abandonada en esa casa grande.

- Y este es el regalo de cumpleaños que ha elegido Dante por haberte portado tan bien... jejeje. – Dice Elia mientras Dante saca el regalo de debajo de la mesa con cara de pillo y se lo da a Iris.

- ¡Pero otro más! Vaya tela con vosotros eh. – Esta vez dejándose llevar por la emoción del momento coge el regalo con ansia y le arranca la mitad del envoltorio, averiguando de este modo que eso tiene unas alas.

Sigue rompiendo el papel de regalo con cara de niña pequeña y eufórica hasta que le quita todo el envoltorio y se da cuenta que es un Hada. Algo que llevaba queriendo tener hace años porque la que tenía se le rompió.

- Vaya vaya... al final quien pensaba que me iva a sorprender, no lo ha hecho, y quien pensaba que no lo iva a hacer, me ha dado una sorpresa. – Dice con cierta entonación para que Eros se de cuenta de que se esperaba otra cosa que la hiciese vibrar de emoción.

Dado que ya se han acabado los regalos para Iris, ella y su novio van a por el regalo de Elia que estaba escondido para que no se esperase que le ivan a regalar algo, porque Elia tiene el mismo pensamiento que Iris (si no hay dinero suficiente, para que compras un regalo si hace falta el dinero para otra cosa). Le da el detalle su hermana y le dice que espera que sea algo que le guste ya que días atrás estuvo hablando de ello.

- ¡Venga ya!¡Pero que es eeesto! – Emocionada coge el regalo y lo abre. Rompe el papel sin mas dilación... ¡es otra caja igual a la de Iris!, con la diferencia de que cuando lo abre...

- Es... es... ¡Ostia! ¡Es un péndulo! No me digas... sois la leche... no me lo esperaba para nada... ¡muchas gracias! – Coge el péndulo toda nerviosa y con el móvil en la mano se pone a averiguar todo lo que se puede hacer con él. No para de mirarlo y remirarlo, para terminar de creerse que algo que hacia mucho tiempo que lo quería... ahora lo tiene. Después de reaccionar se levanta y le da dos besos a Iris y Eros, agradeciendo el regalo.

Entre todo este revuelo de emoción, sorpresa e insatisfacción... Dante se ha levantado con la intención de coger un regalo que Elia no sabe que estaba oculto en la habitación. Una vez de vuelta en el salón, se acerca por detrás de su novia, lo alza por encima de su cabeza para después bajarlo delante de las narices de ella.

- ¡Y esto que es! Pero sino... sino te ha dado tiempo a comprar ni cogerme nada. – Lo coge y con cara sorprendida mira a su novio como si de un extraño se tratase.

- Lo compre en un momento que me quede solo y lo metí en el coche, sin que te dieses cuenta... luego aquí en casa fui a tirar la basura y cuando subí... me lo traje conmigo. – Con una sonrisa de... "no me has pillado" se le queda mirando a Elia.

- ¡Es un libro!¡Y el que yo quería!

- ¿Cómo se titula? – Pregunta Iris con curiosidad e interés.

- Se titula "Un mundo desconocido... hasta ahora"