The Dark Knight (a forbidden love story #0.5)

Before falling

Sonreí con amargura y tristeza -espero que sea cierto- 

Joscelyn tomo mi rostro entre sus manos -estoy lista para escucharlo y para quedarme después de hacerlo. Aunque no puedo prometer que quizá no me...- Joscelyn busco la palabra mas... adecuada, supuse, para expresarse -impresione lo que has hecho- 

-buena elección de palabra- comente, casi con sarcasmo 

Ella hizo una mueca -no se como me voy a sentir respecto a lo que digas pero quiero que lo digas sin temor a perderme. Creo que lo único que haría que me fuera sin si quiera mirar a tras es que me estas engañando o que mataste a alguien...- 

-La idea del asesinato nunca me llamo la atención. Demasiado sucio- comente, tratando de traer un poco de humor entre nosotros -ademas, te imaginas mis trajes manchados de sangre? no lo creo!- 

Joscelyn sonrió, a penas. Estaba, obviamente, nerviosa. Pero no sabia discernir si era por mi o por ella. O ambos. 

-Mejor empieza ya con la historia- 

Tome su mano, la izquierda, y la bese justo sobre el anillo y luego me acerque a su garganta, donde la delicada cinta de seda daba dos vueltas alrededor de su cuello y el dije de lapislázuli, descansaba justo en el hueco de su cuello. 

Los había conseguido ambos al mismo tiempo y nunca hubiera imaginado que ahora la misma mujer los usaría. en realidad, nunca pensé dárselos a nadie. 

-Carly había muerto hacia poco mas de un año y me encerré en mi mismo. nada de mujeres o fiesta o alcohol- sacudí la cabeza -yo solo me torturaba a mi mismo en la soledad de nuestro apartamento, mirando nuestra habitación, a la que no pude volver a entrar- se sentía como toda una vida atrás -Carly fue mi primer amor, no me había enamorado antes de ella y perderla de la forma en que lo hice... con la culpa quitándome el sueño, el apetito y eventualmente... mi humanidad- Sonaba un poco dramático pero en aquel entonces así se había sentido, siempre había tenido una personalidad reservada y quizá, hasta un poco taciturna, pero con las personas en quien confiaba también tenia muchos momentos de simplemente bromear y juguetear... todo eso se había ido con ella

-Jonathan y James constantemente me arrastraban fuera del apartamento, las primeras semanas me quede en casa de Jonathan- sentí mi garganta empezar a arder mientras recordaba, vagamente, aquellas semanas donde no había sentido mas que un dolor profundo y desgarrador en mi pecho, como un atizador que se clavaba, poco a poco, en mi carne, justo en el centro de mi pecho -no podía siquiera a travesar la puerta principal- 

Joscelyn trataba de mantener la compostura respirando pausada y controladamente pero sus ojos, aquellos bonitos ojos no podían ocultar sus emociones y el enorme dolor que le causaban mis palabras. 

Mi dulce chica tenia una fuerte debilidad por mi. 

-Me tomo cerca de un mes y medio ser capaz de entrar- suspire -y luego, después de todo ese suplicio para siquiera pasar de la puerta, una vez me vi rodeado de nuestras cosas, de las de ella... ya no quería salir. Se sentía como que era lo único que tenia de ella a lo cual podía aferrarme- 

Joscelyn, en un gesto inconsciente, se llevo la mano al pecho y masajeo justo sobre su corazón, como si le doliera. 

Dios, verla sufrir por mi, me dio fuerza. no estaba solo, no iba a volver a la oscuridad de la que difícilmente había salido solo por recordar. Aunque por años había parecido así, era la primera vez que me permitía recordar todo esto. 

Y Dios! dolía como la mierda. 

Pero tenia a mi mujer donde la necesitaba, brindándome calor y apoyo de la única forma en que podía, solo estando aquí, solo mirándome con esos ojos tan llenos de amor. Manteniendo me anclado al presente lleno de esperanza que había logrado mantener.