Una noche tranquila, Jade, estaba acostada en su cama, viendo las estrellas , no podía dormir.....Ella vivía en un mundo de fantasía, es decir, su imaginación era muy extensa, siempre estaba pensando en animales raros, como unicornios, hadas, duendes.......Mientras miraba el cielo, se imaginaba junto a su verdadero amor, bajo la luz de la luna, rodeados de hadas, q danzaban al ritmo de las olas del mar.
Esta misma noche, mientras Jade se imaginaba todas estas cosas, por fin logró quedarse dormida. Al día siguiente cuando despertó, bajó a la cocina a contarle a su mamá todo lo q había soñado. Jade veía a su mamá como su mejor amiga, le contaba todos sus secretos y fantasías, ya que en el colegio ella no tenía amigos. Después de contarle a su mamá todo lo que había imaginado antes de dormir, la chica decidió salir al jardín a caminar un rato. Caminó y caminó , hasta que llegó a la orilla de un río, allí se sentó bajo la sombra de un árbol, y se puso a escuchar música. Se imaginaba rodeada de pequeños conejitos, también "veía" sirenas, nadando y cantando en el río, unicornios galopando y hadas volando y jugando sobre la copa de los árboles y las flores. Jade se sentía muy cómoda en su mundo de fantasía y siempre había querido que todo aquello se hiciera realidad.
Se quedó allí un buen rato, imaginándose muchas cosas. De repente comenzó a llover, la chica corrió a refugiarse debajo de un piso de lo que alguna vez había sido una casa de árbol, llovió durante toda la tarde, cuando la lluvia paro, Jade salió y decidió irse a su casa, ya empezaba a oscurecer, cuando comenzó a caminar entre las casas de la calle donde vivía.
Cuando llegó a su casa, noto a su mamá muy preocupada, ya que nunca había tardado tanto en llegar.
Ella y su mamá decidieron sentarse a cenar
- Esta tarde se mudó una familia a la casa de al lado- le dijo su madre.
-Que bien !-la respondió Jade desinteresadamente.
