IV

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Éste levantó la vista de unos papeles que revolvía con nerviosismo, en su rostro se marcó una mueca de sorpresa.

-No tengo tiempo Mike, tengo cosas más importantes que hacer, ¿Sabes?

Volvió a bajar la vista mientras proseguía con su histérica búsqueda. Mike se encogió de hombros y siguió mirando a su alrededor. En el resto de la estancia no había nada más que un viejo sofá de cuero negro a juego con la silla y un majestuoso, y antiguo, escritorio. Estaba forrado de papeles totalmente desordenados, Jeff los revolvía cada vez más, algunos caían al suelo, otros eran cogidos por Jeff, escrutados y arrugados después.

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