Two Years Later - Carl Grimes y Sophia Peletier [EN EDICIÓN]

Jesús...

*Narrador Omnisciente*

Luego de que Jesús, metafóricamente hablando, hubiese sido echado a patadas de la habitación de Sophia, él se sentó a contemplar un cuadro mientras comía una galleta preparada por Carol.

Sin embargo Rae, que estaba observando todo desde la distancia, se acercó prudentemente al hombre y le apuntó con un arma.

-¿Qué haces en nuestra casa? -le preguntó furiosa.

-Pues, estoy sentado en la escalera, observando una muy bonita pintura, y esperando a que tu hermana y su novio se vistan.

Rae hizo una mueca de asco y confusión, ya que lo interpretó con el doble sentido.

En ese momento salieron Carl y Sophia, ya vestidos con ropa casual, ya que habían oído el alboroto.

-¿¡Y este idiota cómo escapó!? -preguntó alterado Daryl.

-Fácil: las ventanas no tenían pestillo y un sólo guardia no puede vigilar tres puertas y cuatro ventanas.

-Touché.

-Tranquilos -musitó Carl con una calma que a Sophia no le gustó para nada-. Jesús sólo quiere hablar.

[...]

-... Y esa es mi propuesta -finalizó el llamado 'Jesús'.

-A ver si entiendo -lo frenó Sophia-. Dices que tienes una comunidad, ¿cierto? Bien, entonces, si tienes una comunidad, hay más personas.

-Así es, señorita preguntona -exclamó Jesús con burla.

-Cállate, idiota. Suficiente conque no te atemos a la silla para dejarte hablar.

El hombre tragó duro y observó a Carl, que tenía aspecto de líder, con su semblante serio. A Daryl, un hombre rudo y tosco. A Rick, de quien le llamó la atención la venda que llevaba en el ojo. A Sophia, que a simple vista se le notaba la rudeza que emanaba de su cuerpo.

-Bien, pongámoslo de otro modo: nosotros les damos parte de nuestras provisiones y ustedes nos dan armas. Pero... deberán, no; tienen que venir a nuestra comunidad, hablar con el jefe y hacer el trato con él.

-I-D-I-O-T-A. ¿Qué nos hace confiar en ti? ¿Cómo sabremos que tu comunidad si existe? Responde -masculló Sophia con furia.

-Sophia, cálmate, el hombre es de confiar -le susurró Carl, y al instante Sophia relajó sus facciones. Jesús le agradeció a Carl con una sonrisa, mas este no se la correspondió, lo que hizo que el ojiazul volviera con su semblante serio.

-De acuerdo -opinó Rick-. Iremos a ¿cómo dijiste que se llamaba tu comunidad?

-Hilltop.

-Iremos a Hilltop.