Ángeles y Demonios Zodiaco (Yaoi/Gay)

Cruel Realidad 3/7

*POV Capricornio*

Me dolía la cabeza, busque moverme en la cama que me encontraba....Fue en ese momento que internamente me di cuenta que yo en principio no me había ido a dormir, entonces como es que estaba en una cama, entonces comencé a recordar lo que había sucedido, primero el incendio, segundo la desaparición de Cetus, tercero la búsqueda del mismo junto a Libra para finalizar en un ataque.... 

"¡Libra!" grite en mi mente al sentir la falta del menor de nosotros, aquello me preocupo no podía sentirlo aunque no me extrañaba teniendo en cuenta que me sentía muy débil, también me pregunte si los demás estarían bien y a salvo, de verdad rogaba a Dios que así fuese.

Decidí abrir mis ojos, y pude observar que me encontraba en una habitación, la misma era un poco desordenada con algunas cosas tiradas en el suelo y lugares con muchas cosas amontonadas y otros sin nada encima, solté un suspiro por tal desorden que me recordaba a la habitación de Libra, Acuario y Tauro aunque ellos no tenían tanto desorden pues Cetus no los dejaba.

Intente moverme para observar mejor el lugar y fue cuando note que mis manos estaban atadas a los doseles de la cama, no estaba tan ajustado, me permitía tener un poco de libertad aunque no me permitía ni bajar de la cama ni hacer muchos movimientos, aunque si pude sentarme en la misma.

Observe mas detenidamente la habitación y pude ver un par de ojos verdes observándome con detenimiento, el escalofrió que nació en mi cuerpo y que pude ocultar muy bien me lo dijo todo, ese chico que me observaba era un demonio, alargue una sonrisa por la ironía de la situación, yo entraba para matarlos y ahora estaba a merced de uno

-Te divierte tenerme así?- le pregunte en un tono monótono 

-.....- no me respondió solo sonrió de forma amable, me reí internamente de ese demonio de apariencia inocente, como si fuese caer en esa sonrisa falsa cuya verdadera cara solo quería hacerme sufrir y disfrutar de ello.

*POV Piscis*

Aquel ángel que había traído conmigo, porque me pareció interesante su monotonía, su mirada fría y calculadora, nunca había visto esa clase de mirada en un ángel, ya que estos suelen mostrar una apariencia como la del pequeño ángel que lo acompañaba, una apariencia inocente que me molesta, si no me hubiesen detenido aquel angelito albino estaría muerto, ya que el solo verlo me asqueaba.

Bueno eso es un tema para otro momento, por ahora observaba a aquel ángel mientras que analizaba mi habitación hasta que sus ojos se conectaron con los míos, su frialdad, el no alterarse ante mi presencia hacia que mi corazón latiera en emoción por querer tenerlo dentro de mi, mientras el se perdía y su Dios lo abandonaba.

Su pregunta me llamo la atención y también la calma que lo rodeaba, no estaba alterado ante la situación en la que se encontraba, le sonríe tiernamente para hacer que baja la guardia pero no funciono en cambio solo hizo que se volviera mas atento a mis movimientos, lo admitía era interesante y eso me provocaba.

-Normalmente los tuyos piden explicaciones- le dije en tono divertido -Pero.... Tu no lo haces ¿porque?- pregunte curioso.

-En primera no me dirás donde estoy, en segunda es obvio que no estoy en el infierno si no ya estaría muerto y tercero no importa lo que haga no planeas dejarme ir al menos no con vida- sentencio aun con su rostro monótono.

-Eres interesante- le dije mientras me acercaba a la cama y me sentaba en el filo de esta -Tan frió, tan calculador, tan monótono, quiero romper esa barrera y ver al ángel dentro de ti y luego divertirme contigo, y creo que me divertiré mucho- le dijo con voz deseosa como un niño que anhela jugar con primera vez con un juguete.