Te quiero, porque eres tú

Alguien nuevo

Alguien agarró su mano y la sacó afuera del gran grupo de jóvenes de un estirón. La chica empezó a encontrarse mejor y pudo ver quien era su salvador.

-Marinette... te encuentras bien?-
-C-creo que s..- es interrumpida por si misma-Adrien?!-
-Hola- dijo moviendo levemente la mano en forma de saludo.
-Si! Estoy bien! Gracias, no te pre..- dijo la chica levantandose brúscamente hasta perder el equilibrio, tropezarse y volver a ser salvada por aquel rubio.
-Parece que aún no has vuelto en ti- dijo regalandole una calida sonrisa y sentandola en un banco.

A causa de lo que habia pasado entre ellos dos esos últimos dias, no habia mucha conversación y se veían incómodos.

-Un cerezo... me encanta este arbol- dijo la chica al darse cuenta que el gran arbol que cubria el banco y les brindaba sombra era uno de sus favoritos.
-Te gusta?- contestó el.
-Si! Me encantan las flores- dijo la peliazúl sonriente.
-Espera! Te alcanzaré una- dijo el rubio poniendose de pie en el banco y cogiendo unas plores de el.
-Aquí tienes- dijo sonriente entregandosela.
-Gracias!- contestó ella feliz.

En eso Marinette se quedó mirando fijamente la flor y pensando en porque de repente ese rubio era tan majo conella si hace unos dias nisiquiera la miraba.

-Eeeh Marinette... yo... quisiera saber que te pasó, parece que estas muy distante conmigo- dijo medio sonrrojado.
-Ah eso... no hace falta, en serio, ya no pasa nada- dijo sonriendo.
-Pero quisiera saber que pasó-
-Nada Adrien, tranquilo ya te lo he dicho-
-Pero Marinette, yo en serio quiero saber-
-Ya dije que no!- dijo la chica levantandose del banco.
-Marinette, te puedo ayudar!- dijo cogiéndole de la mano.
-Que no ves que no te está pidiendo ayuda?- dijo Nath que acababa de llegar.
-Nadie te pidió opinion- dijo arrastrando a Marinette y cubriendola con un abrazo. Ella no dijo nada, solo se sonrrojó.
-Suéltala- dijo el pelirrojo.
-No acepto ordenes tuyas-
-Suéltame Adrien...- dijo la chica inmobil.
-De ella si las aceptarás?- dijo el pelirrojo furioso.

El rubio la soltó de inmediato y ella salió corriendo a la otra parte de la escuela dejando asombrados a sus dos amigos y a un moreno que observava la escena desde lejos. (Este personaje lo he inventado yo :v)

La chica se sentó bajo la sombra de otro arbol cuyas hojas eran verdes y solo dibujaba en su libreta. Esa sensación de comodidad y seguridad no se la daba otra cosa que aquella libreta.

Aquel moreno que habia observado toda la escena y la habia seguido sintió demasiada empatía hacia ella y decidió hacer algo.

-Hola, que haces?- dijo un moreno ojiazúl sentandose al lado de ella.
-Hola...- dijo Marinette un tanto tímida.
-Un mal día, verdad?-
-Para mí si la verdad- contestó con sinceridad ya que no sabia porque pero ese chico también le transmitía confianza.
-Tranquila, te entiendo, para mi también lo ha sido- dijo el chico consiguiendo que la peliazúl apartara la atención de la libreta -Que te ha pasado a ti?-
-B-bueno... el otro día me enteré de que el chico que me gusta tiene novia y últimamente no se porque se comporta tan bien conmigo, como si por una vez me quisiera conocer de verdad-
-Oh, pobre-
-Y a ti que te ha pasado?-
-A mi?-
-Bueno, has dicho que habías tenido un mal día, y como yo te he contado lo que me pasa creo que seria justo que tu te desahogaras conmigo ahora-
-S-si- dijo el moreno sonrrojado -Bueno... mi nota en el examen para ser profesor no alcanzó la nota necesaria y ahora nos han dicho que visitemos los diferentes institutos de Paris para ser profesores de repaso de una materia, lo malo es que nosotros no tenemos derecho a elegir la materia ni el instituto-
-Oh cuanto lo siento, pero mira el lado positivo, puedes visitar gran parte de Paris con todos tus amigos, eso es genial!-
-Ya... bueno es que yo nunca tuve muchos amigos y eso...-
-Bueno pues te aseguro que si te toca este instituto yo podría servirte de apoyo- dijo sonriente provocando el sonrrojo del chico.

En eso sonó el timbre del instituto para entrar a clases y el chico se alertó.

-Oh, por ahí me llaman, tengo que irme- risoteó el moreno.
-Claro! Pasalo bien en el viaje por París- sonrió.
-Gracias!- dijo apresurado -Espera, una cosa mas, tu nombre?-
-Marinette- dijo ella.
-Genial! Me alegro de conocerte Marinette, nos vemos pronto-
-Espera! Y el tuyo?-
-Mi nombre es Diego- dijo el chico sonriente para luego irse.