2.🌪

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Tae se sentó en su cama, miro alrededor y sonrío.

-Le dije a la enfermera que solo era una pesadilla- dijo victorioso.

De un salto salió de la cama y en un parpadeo ya en encontraba camino a la universidad, una vez le preguntó a su nana el motivo por el cual parecía transportarse, ella le explico que se debía a que perdía conciencia de sí mismo mientas hacia otras cosas y por eso no notaba muchas cosas hasta que se encontraba en otro lado. Mientras caminaba saluda amablemente a quien se le cruce hasta que alguien tomó su hombro y lo hizo girar sobre sus talones.

-Tae- hablo el castaño con una bella sonrisa.
-Hobi- Tae sonrío al instante.
-¿adivina?-el castaño hizo una pausa mientras que Tae solo contestó levantando las cejas- hoy no hay clases, así que prepárate- el castaño tomó la mochila de Tae- que vendrás conmigo.

Tae asintió enérgicamente y comenzó a caminar al lado del castaño quien sostenía fuertemente su mano.

Ahora de otro pestañeo se encontraban en un parque, sentados en el pasto rodeados de golosinas con las manos juntas y los dedos entrelazados. A Tae le asusta un poco tener ese tipo de problema pues cree que es peligroso, no para el, si no para quienes le rodean.

-Tae- el castaño tomo su mochila y comenzó a buscar entre sus cosas.
-Dime- Tae mastico rápido una gomita y volvió su atención al castaño.
-aquí está- tomo una cajita entre sus manos y se la dio a Tae.
-¿qué es esto, Hobi?- preguntó Tae curioso, al abrirla sus ojos abrieron como platos, llevo la mano desocupada a su boca y la cubrió, sonrío ampliamente y sacó el hermoso colgante que está dentro de la cajita- esto es... Muy hermoso.
-tiene nuestros nombres- el castaño sonrío y busco el suyo bajo su camisa- ¿lo ves?- se lo mostró sonriente.

Tae asintió, tomó el colgante y lo colocó sobre su cuello.

...

Tae abrió los ojos encontrándose de nuevo con aquella triste pesadilla. Se levanto de la cama y comenzó a caminar de un lado a otro.

-veamos- llevo su diestra a su mandíbula- si es un sueño...- pensó detenidamente unos segundos- Puedo hacer lo que me de la gana porque es solo una pesadilla- levanto la misma chasqueando sus dedos- y nada podrá pasarme porque todo esto es irreal- sonrío.

Después de varios minutos Tae tomó decisión y armo un pequeño plan de escape pues es solo una pesadilla ¿verdad? ¿Qué de malo podría pasar?

-Tae- saludo la enfermera abriéndose paso a la habitación de Tae.
-buenos días- saludo Tae con su mano.
-has amanecido de buenas- se detuvo frente a la cama-¿quieres que vaya por las pastillas mágicas o deseas salir al patio de nuevo?- preguntó la enfermera con cierto sarcasmo, se levanto y dirigió su cuerpo a la puerta.
-no- Tae sonrío- mejor ve a ocuparte de otros- Tae agitó boca abajo su diestra indicándole salir.
-bien- la enfermera salió no sin antes dejar una bandeja de comida.

Esta contenía los utensilios necesarios para el escape de Tae... Un cuchillo solo en caso extremo de que deba defenderse.

-esto servirá- Tae tomó entre sus manos el pequeño cuchillo y delineó sus labios con la punta de su lengua. Sonrío ampliamente.

Tae se asomó al pasillo llamando la atención de una enfermera.

-disculpe- tosió un poco- quisiera pedir un cubre bocas, tal vez me resfrié y quiero salir- sonrío- para evitar contagios.
-enseguida- sonrío y corrió por el mandado del contrario.

Minutos después la enfermera llegó y le entregó el cubre bocas a Tae sin quitar la sonrisa de su rostro, Tae hizo una pequeña reverencia al tomar entre sus manos el cubre bocas que esta cubierto por un plástico transparente y volvió a entrar cerrando con llave la habitación.

Tae colocó el cubre bocas sobre su rostro, cambió su vestuario. Tomo el cuchillo y lo metió al largo bolsillo de su pantalón.

Tomo la llave y abrió, este salió y comenzó a caminar como si nada.

Al salir del edificio escucho una sirena soñar.

-"¡alerta, alerta!"

-¿qué sucede?- preguntó Tae confundido mirando a su alrededor, a lo lejos divisó a un hombre con una pistola apuntándose a sí mismo- ¿pero qué..?

Todos comenzaron a correr en dirección opuesta a Tae.

Llegaron varios enfermeros a intentar detenerle.

-No, no, ¡déjenme ir!- hacia un esfuerzo para que lo soltaran pero era inútil. El chico se retorcía y pedía ayuda, Tae sintió como su corazón se hizo pequeño y corrió hasta aquel hombre brindándole apoyo, Tae intentó alejar a los enfermeros pero no tenía la fuerza suficiente, se sintió frustrado... Aquí vienen de nuevo, más ataques de ira, Tae sintió la adrenalina sobre su cuerpo, de nuevo perdió conciencia sobre si mismo y la parte mala de Tae comenzó a actuar, saco el cuchillo y lo comenzó a enterrar sobre los dos enfermeros. Una y otra y otra vez hasta que no mostraron más señales de vida.

Algo en Tae lo hizo volver admirando la escena, de inmediato tiro el cuchillo y se llevó las manos a su rostro, esta asustado, sabe que solo es una pesadilla pero no puede evitar sentirse así. De inmediato llegaron los hombres de seguridad aprisionando a Tae sin piedad.

-¡suéltenme!- Tae luchaba por soltarse pero solo conseguía que lo apretaran más, lastimando su frágil cuerpo, este no lo noto y sus ataques volvieron a aparecer haciéndole perder de nuevo la conciencia de sí mismo. Tae empezó a tirar de todos con fuerza, a morder y golpear tanto como sus ataques y ahora algunas voces en su cabeza le indicaban.

De pronto sintió como sus párpados pesaban y cayó al piso quedando inconsciente.

...

-entonces Sun ¿qué piensas acerca de ello?- preguntó Tae, sonriente y expectante ante el consejo de su querida nana.
-yo sé que serás un buen padre, pero debes esperar- Sun tomó las cálidas manos de Tae entre las suyas- aún eres joven, disfruta de Hoseok tanto como quieras.
-no lo había pensado- sonrío ampliamente mostrando una hermosa sonrisa cuadrada- ¡gracias Sun!
-por nada pequeño- Sun se acercó a Tae uniéndolos en un cálido abrazo.

In-consciente. [Taehyung] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora