3.🌪

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No supo en qué momento pero de nuevo había vuelto a esa aburrida pesadilla. O tal vez no, esta vez se encontraba en una peor. Tae se encontraba atrapado en una habitación blanca sin ventanas, todo estaba cubierto de grandes almohadas blancas, y Tae está atado con una camisa de fuerza.

-¿qué sucede?- preguntó confundido mientras se retorcía buscando salir- ¡AYUDA!- gritó múltiples veces pero no hubo quien le hiciera caso. Comenzó a correr de un lado a otro sin conseguir más que lastimarse, cayendo torpemente al piso.

Se dio por vencido y decidió tirarse sobre el frío piso.

-necesito salir de este asqueroso sueño- dijo Tae mientas miraba a la nada- ¿por qué estos sueños son tan recurrentes?- preguntó en un tono cansado- ¡Argh!- gritó con frustración.

La puerta se abrió lentamente dejando ver la imagen de una linda enfermera.

-Hola- dijo Tae animado.
Tae se quedó viendo fijamente el rostro de la chica, le parecía conocido.
-¿quieres salir de aquí?- preguntó en voz baja sacándolo de sus pensamientos.
-¡si!- contestó Tae- ¿cuál es tu nombre?
-te ayudaré pero necesito que hagas todo lo que te diga ¿si?- hablo la enfermera dejando de lado la pregunta de Tae.
-¿Sun?- preguntó Tae confundido.
-¿cómo sabes..?- preguntó la enfermera confundida.
-nana, también sales en mis sueños- hablo Tae con la emoción de un pequeño.
-escucha Tae- la chica lo tomo de los hombros- necesito tu atención.

Tae asintió enérgicamente y comenzó a escuchar atentamente todas las indicaciones que le proporcionó Sun.
Finalmente esta salió dejándole un par de cosas y soltando un poco las ataduras del contrario.

-"a las doce treinta vendrá el camillero a revisar si todo está en orden"

Tae recordó la indicación.

-"cuando entre vas a dormirlo con esto"

Tae revisó el reloj que Sun (o su nana, como él sabe) le había dejado.
-dos minutos- dijo Tae en voz baja y comenzó a preparar todo.

Alguien abrió la puerta.

-vengo a revisarte- aviso el camillero.
-adelante- Tae sonrío.

-"cuando esté dormido toma su atuendo"

En cuanto este comenzó a checarlo Tae soltó sus ataduras y antes de que el camillero dijera algo Tae ya le había inyectado un dardo somnífero haciéndolo caer de inmediato al piso, Tae lo inspeccionó y tomo el atuendo del camillero para usarlo y cubrió su rostro con un cubre bocas para quedar poco reconocible.

En cuestión de minutos se encontraba fuera caminando hacia el sitio que le había indicado Sun.

Caminaba con tranquilidad pues sabía que si se ponía nervioso alguien lo descubriría.

-"a las doce treinta y siete debes ir a él área de vigilancia y darle con otro dardo al que checa las cámaras"

Tae miró a su alrededor revisando que nadie le siguiera, al llegar a la oficina de seguridad giro la perilla de la puerta con mucho cuidado, entro con sigilo y enterró de manera suave el dardo en el cuello del vigilante, Tae paseo sus largos dedos por los comandos para desactivar todas las cámaras y alarmas posibles.

-"doce cuarenta y dos, debes estar camino a la puerta, cuando veas que el guardia camine hacia el lado contrario camina lento, si ves que camina detrás de él apresúrate pues tal vez vaya al baño, cuando va tarde un minuto o menos así que debes ser ágil y veloz, si lo prefieres tienes un dardo más para dormirlo."

Tae tomó unos minutos y mientras observaba la gran puerta calculaba los minutos en los cuales podría llegar, al término de sus cálculos se dispuso a avanzar a paso lento aún revisando a su alrededor y cuidando que nadie le vigilará.

Al estar un par de pasos cerca busco algún muro con el cual refugiarse, observó detenidamente al policía quien caminaba tranquilamente al sanitario, al ver a este entrar Tae tomó fuerzas y corrió hasta los sanitarios, al llegar comenzó a sigilar sus pasos y cuidadosamente se paró detrás del oficial quien perdido en sus pensamientos no prestaba atención más que al muro frente a él, Tae sacó el último dardo y lo inyectó en el cuello del contrario con su mano izquierda mientras que con la derecha cubrió la boca con fuerza del mismo.

Al ver que el contrario empezó a perder el conocimiento lo dejo suavemente en el piso y corrió hasta la puerta, al estar frente a esta volvió a rodear el sitio con la mirada chocándose con la silueta de Sun a lo lejos, quien sonriente le despedía, Tae le sonrió, hizo una pequeña reverencia y salió por fin del lugar.

-fue fácil- dijo en tono victorioso.

Corrió tan lejos y rápido que seguramente nadie le vio, ni las cámaras.

Tae se detuvo en un parque, buscando aliento y algo que le ayudara a conocer o reconocer su ubicación pues no sabía dónde estaba. Busco sacarse la ropa del enfermero quedando en un pantalón negro y una playera azul, tomo la ropa y la lanzó lejos de la vista de todos, incluyendo la suya. Estaba rodeado de gente y a lo lejos diviso al castaño sentado en una banca. Sonrío alegre y comenzó a caminar hacia el castaño.

Tae se sentía feliz. Inmensamente feliz.

-no recuerdo cuando acabó la pesadilla- sonrío- tal vez tuve otra de esas lagunas mentales.

Tae apresuró su paso hasta quedar un par de árboles frente al castaño, se ocultó detrás de uno para arreglar su cabello y revisar si todo en el esta en orden, al terminar volvió a su vista chocándose con la desagradable imagen del castaño abrazando a un chico de piel pálida, Tae decidió observar la escena unos momentos pero en específico al chico de piel pálida, su mente le decía haberlo visto antes pero no lograba recordar de dónde.

In-consciente. [Taehyung] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora