Cruel Destino (Una Tormenta De Sentimientos)<Yuri On ice>

Prólogo

"Un amor dónde nadie salga herido no existe".

Narra Yuuri

No puedo creer que la vida sea tan injusta, ¿por qué cuándo por fin pensé que podría llegar a ser feliz con la persona que siempre soñé, llega una tormenta que arrasa con todo y pone mi mundo de cabeza?, pero esa tormenta tiene nombre...
Una persona con actitud confiada pero un poco frío con las personas, claro que eso es solo la fachada ya que en la intimidad es un gran amante y compañero. Que como lo sé es fácil el es mi pareja destinada. Y como tal fuimos hechos el uno para el otro.

Pero si nos hubiéramos conocido antes esa sería la mejor cosa que nos podría haber pasado, pero ahora es solo la peor desgracia, ya que tanto él como yo fingimos ante los demás ser solo amigos, para no lastimar a aquellos que nos aman.

Pero ¿de quién es la culpa de lo sucedido? somos solo víctimas de este cruel destino.

~~~Hace 2 años~~
Yuuri Katsuki un Omega de 22 años, de tes blanca, ojos color chocolate, excelente figura física constituida por curvas tan bien pronunciadas que tenía a muchos alphas a sus pies, practicaba el patinaje artístico desde que era pequeño y tenía como sueño poder llegar al Grand Prix Final y así poder conocer a su ídolo Víctor Nikiforov, una leyenda del patinaje artístico pentacampeón del Grand Prix Final además de otras muchas competencias.
Con ese sueño en su corazón había dejado Japón y viajado a Detroit con ayuda de sus padres, para poder entrenar y prepararse mejor, de eso ya habían pasado casi 4 años, ahora se encontraba en la pista entrenando junto con su mejor amigo Pitchit Chulanont un beta tailandes, que al igual que él practicaba el patinaje artístico.
Cuando se había mudado a Detroit le costó mucho trabajo acostumbrarse ya que su personalidad tímida y reservada, no le permitían socializar mucho, pero gracias a Pitchit que también acaba de mudarse, no se quedó solo y pudo adaptarse mejor.
Ahora mientras su entrenador Celestino Cialdini le hacía algunas observaciones en su rutina, Pitchit se sacaba fotos para subirlas a las redes sociales.

Celestino que miraba a su pupilo distraerse le cuestionó- Yuuri,¿me estás escuchando?
Al escuchar como su entrenador le hablaba, sacándolo de sus pensamientos Yuuri le respondió -Perdón lo siento, me distraje un minuto

-Yuuri eres muy buen patinador y tienes un gran potencial pero necesitas tener más confianza en ti mismo, mmmmaaa- suspiro Celestino tratando de tranquilizarse- tomemos un descanso de 20 minutos

El japonés apenas contesto con un - Okey- despues se dirigió hacia donde estaba su amigo y le pregunto que hacia, a lo que este con su distintiva alegria le respondió.

-Nada solo sacaba unas fotos de tu rutina, me parece muy buena, aunque estoy de acuerdo con Celestino deberías de mostrar más confianza, explotar algo de ese potencial tan sexy que tienes, no por nada traes a tantos alphas tras de ti- se burló su amigo.

Yuuri había tenido esa plática con su amigo demasiadas veces y sin más le dijo -Ni lo menciones sabes que odio eso parecen lobos acechando a su presa, solo por que creen que somos débiles- y frunció el ceño ante esta última parte.

Pitchit sin poder evitarlo le respondió con  burla - jajaja algún día encontraras a tu pareja destinada y ya quiero ver que hables así.

El nipón que ya esperaba una respuesta así suspiro cansado y su respuesta fue simple -bien sabes que no creo en esas cosas.

Mientras ambos amigos se encontraban platicando un montón de gente se arremolinaba alrededor de la entrada de la pista, causando un alboroto, ambos se quedaron viendo en esa dirección sin saber lo que pasaba. Hasta que de pronto vieron a un alpha  peliplata ruso, de ojos azul  celeste, bien parecido con piel tan blanca como la nieve, sus rasgos parecían tallados por los mismos ángeles, no podía apartar la vista, por que no podían creer lo que sus ojos les mostraban, tenía que ser  un espejismo, se voltearon a ver entre ellos y regresaron la mirada, no era un sueño era Víctor Nikiforov el que se encontraba justo frente a ellos.