Capítulo 2 Preguntas

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Capítulo 2 preguntas

No había pasado ni una hora y la estúpida de Monique seguía discutiendo con la auxiliar de vuelo, y precisamente la que me había ayudado.

- Hola – dijo Sebastian volteando su silla y quedando frente a mi

- Hola – saludé y me metí una galleta oreo a la boca - ¿disfrutando del viaje? – el negó y su cabello negro se revolcó

- Ya somos tres – dijo Sebastian sonriendo

- ¿tres? – el asintió e hizo un gesto para que viera hacia fuera.

- ¿crees que la auxiliar lo está pasando muy bien con Monique? – reí por lo bajo - ¿Cómo te llamas? Se me olvidó por completo preguntar por tu nombre – tragué saliva

- ______ - dije lo más tranquila que pude

- ¿de cuál reino vienes? – mierda voy a hiperventilar

- Eh, yo, yo no – escuché un grito que no era el de Monique - ¿Qué fue eso? – dije abriendo la cortina y vi a la auxiliar tirada en el suelo - ¿estás bien? – dije preocupada por la chica. Alcé la vista y vi a Monique de pie con gesto de enojo. Me incorporé -Si hay algo que odie más que a las perras berrinchudas de baja categoría como tu Monique, es cuando una persona maltrata a otra que está dispuesta a ayudar sin importar qué – cegada por el enojo estaba más que dispuesta a herir a Monique.

- S-Señorita _______, por favor, no lo haga – por la sorpresa, le terminé dando en la mano a Monique. La cual gritó de forma exagerada.

- ¡partiste mis uñas! – fruncí el ceño

- Pude haber fracturado tus dedos, agradece niñata – ayudé a la auxiliar a ponerse de pie - ¿Cómo te llamas? – le pregunté con dulzura.

- V-Vanessa - sonreí

- No te preocupes Vanessa, tus heridas se van a sanar pronto – la chica me miró y su rostro pareció iluminarse

- Gracias, mi reina – dijo besando los nudillos de mis dedos. Mi corazón se estrujo un poco. Ya que, era así como los más leales súbditos de mi padre, le saludaban y agradecían. – mantendré su secreto, hasta que usted esté preparada, mi reina – asentí y ayudé a Vanessa a ponerse de pie.

- ¡me las pagarás, maldita plebeya! – alcé una ceja

- ¿y si mejor empiezas a ser un mejor ejemplo para tu reino? – y entré a mi puesto.

- Tengo muchas preguntas por hacerte – tragué saliva, mierda. Fui descubierta

Fueron dos minutos de silencio intenso. Le serví a Sebastian un poco de Champagne.

- Gracias – dijo tomando un sorbo y sus ojos se fijaron en los míos - ¿Quién eres realmente ______? - no debo ponerme en evidencia, pero Sebastian es lo suficientemente inteligente para darse cuenta de ello.

- Soy la princesa del reino de Dunell, hago parte de los tres reinos de categoría superior. Durante años, mis antepasados y mi padre mismo se han encargado de hacer alianzas con los reinos más destacados de todo el mundo. Somos un reino de guerreros, tenemos un increíble poder militar y económico, sin embargo, nuestro poder mágico decrece con el paso de los años. Y mi misión por decirlo de alguna forma, es conseguir alianzas con el poder mágico suficiente para poder enseñarle a mi pueblo a manejar la magia.- miré mi mano- mi abuelo era un mago excepcional y yo heredé ese poder de él, sin embargo, una sola persona no puede manejar una magia tan poderosa y es más complicado cuando eres usuaria de tres tipos de magia diferentes – Sebastian abrió los ojos.

- ¿tres? – asentí

- Oscuridad, luz y vacio - respondí con cierto temor – tu reino, es uno de los más poderosos en cuanto a magia y poder militar se refiere. Ansiaba poder encontrarme con el heredero al trono para formar una alianza

- ¿por qué tu padre no hizo la alianza antes? – sonreí

- No encontró tu reino, murió sin saber que existía – la nostalgia se acumuló en mi pecho – y me prometí encontrarlo, así me costara la vida – Sebastian me miraba fijamente

- ¿por qué necesitas la alianza con mi reino? – se mostraba algo precavido.

- Es algo que pronto saldrá a la luz. Uno de los reinos de baja categoría se han rebelado contra los reinos de categoría superior. Han adquirido un poder inmensurable, no sabemos cómo o por qué tiene ese poder tan ridículamente fuerte. No estoy diciendo que no deben tener algún poder. Pero la mayoría de reinos de baja categoría, son débiles de mente, se dejan manipular con mucha facilidad. Y no quisiera usar la fuerza en contra ellos – Sebastian apoyó su rostro en su mano

- ¿y por qué no usar la fuerza? – negué

- Son humanos, Sebastian. A pesar del poder que hayan adquirido siguen siendo humanos frágiles y quiero protegerlos – ese era el deseo de mi padre. Que todos los ríenos vivieran en paz y sin necesidad de ser categorizados.

- Serás una excelente reina – dijo Sebastian con una sonrisa. – muy bien, accederé a tu petición de alianza, convenceré a mi padre de ello.- sonreí en forma de agradecimiento – tengo una condición para ello – su gesto se endureció y una sonrisa se plasmó en su rostro- cásate conmigo - ¿eh? - he estado buscando a la heredera de los tres poderes legendarios, y al fin la he encontrado. Solo estaba con Monique para enmascarar mis verdaderas intenciones. Debo admitir que me decepciona que mis habilidades investigativas, debí ir más afondo. Aunque si me pareció extraño que en clase de magia, la única que el profesor sacaba del aula para clases personalizadas era a ti – su gesto amable y suave desapareció por completo - piénsalo, seríamos la alianza más poderosa de toda la tierra – tragué saliva. Yo no tenía intenciones de contraer matrimonio, pero... si es por el bien del reino... ¿y el mío?- no me des tu respuesta ahora – una sonrisa que solo trae problemas se expandió por el rostro de Sebastian, dejando a la vista aquellos colmillos característicos del reino del infierno – no te preocupes, tu secreto estará a salvo conmigo, sea cual sea tu decisión, sé lo importante de mantener un secreto. Hasta yo mismo tengo secretos que preferiría que no existiesen – tragué saliva y bebí un poco de champagne.

- Muy bien Michaelis, agradezco que ocultes mi secreto – el asintió y me sirvió un poco de Champagne

- No te librarás de mi tan fácilmente ahora que sé tú secreto ______ - y agarró mi copa y bebió de mi champagne por donde yo había bebido – un beso indirecto para sellar nuestra promesa.

Nota:

El beso en los nudillos, para el reino Dunell significa, amor, respeto y lealtad. Al padre de _______ los súbditos solían besarle los nudillos, en forma de apoyo y lealtad.

Los reinos de: Dunell, Montblanc y Saint Lee, son los tres reinos de categoría superior.

Los magos que manejan los tres poderes legendarios son muy pocos y estos poderes se pasan de generación en generación.

Oscuridad, Luz y Vacio, son los tres poderes legendarios. Usualmente un mago estándar, maneja solo uno, ya sea Oscuridad o Luz. Lo que caracteriza a los magos del reino de Dunell son los magos que manejan el Vacio.

Beber de una copa y por el lado en donde la persona con la que se está cerrando el trato se llama: beso indirecto. Se usa usualmente para cerrar tratos de suma importancia o promesas.

Reformatorio (Sebastian Michaelis)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora