Insomnia (shizaya)

Oneshot

1:59 AM

Izaya bostezó, inesperadamente, por un largo rato, y siguió mirando su reloj despertador, entrecerró sus ojos a la mitad de una pulgada. Había estado despierto desde las cinco y algo de la mañana ayer. Era asombrosamente inusual en él tener un caso de no ser capaz de dormir.

Justo cuando dieron las dos AM, él decidió tomar su teléfono e ir a la sala de chat.

- -Kanra ha iniciado sesión.

Lo apagó, él era el único activo (obviamente debido a que probablemente era el único despierto a esta hora), por lo que su plan no funcionó. Cerró sesión y puso su teléfono en su sitio, entonces volvió a acostarse en la desarreglada cama: las almohadas dispersas por casi cualquier lado, las sábanas enrolladas en la esquina, lo cual era debido a estarlas quitando y poniendo. De verdad no podía dormir para nada.

Tan sólo miraba al techo, pensando en cualquier solución.

1. Píldoras para dormir; Izaya no tenía ninguna. Si tuviera, entonces las habría tomado hace ya algunas horas.

2. Contar ovejas; maldición no, demasiado infantil.

3. Tomar leche; él pensó que no funcionaría. Bien, enlistaría unos cuantos más por un rato, así podía hacer todos sus planes en orden.

4. Arreglar la estúpida cama; seguro tendría que hacerlo si quería dormir cómodamente.

5. Salir a caminar; nop, está oscuro afuera, y sus ropas no podrían ser vistas a menos que haya luz apropiada.

Se levantó lentamente y encendió las luces, un poco cegado por un rato antes de ajustarse a la brillantez. Había buscado las sábanas por un rato antes de empezar a arreglar su cama.

—Fwuaa~ —bostezó mientras aplanaba una arrugada almohada y la arrojó directo frente al cabezal —¿Por qué ni siquiera puedo dormir? —arrojó tres almohadas más, suspirando cuando la última fue lanzada.

Fue en ese momento que escuchó un golpe en la puerta. —¿Quién es?

Sin respuesta.

Rodando los ojos, siguió con las sábanas y las distribuyó uniformemente por todos costados. Como sea, arreglar toda la cama no le ayudó lo suficiente.

Otro golpe fue escuchado. —¿Quién está ahí? —repitió con brusquedad, la molestia claramente visible en su rostro. Aún, ninguna respuesta fue escuchada.

Fue a la cocina a hacerse algo de leche caliente. Durante el proceso, continuamente escuchó un golpeteo resonando una y otra vez ocasionalmente.

Decidió llevar la taza con él, haciendo una nota mental de no escaldar al intruso o visitante, quien quiera que fuera, con la bebida que sostenía.

Muy para su sorpresa, abrió la puerta para encontrarse cara a cara con un impredeciblemente Shizu-chan sin emociones.

—Ah, eres tú —fatigado se frotó el ojo izquierdo con su mano libre —¿Qué te trae aquí?

Shizuo observó por unos minutos al hombre de cabello negro antes de hablar —Sólo quería ver cómo está la pulga, desde que no puedo dormir.

—Tú tampoco puedes dormir... Mhh —Izaya sonrió por un rato estando ligeramente feliz de no ser el único con insomnio ahora.

—Sí... —se sacó los lentes azul océano, viendo al informante casualmente —había estado preguntándome porqué no podía dormir estos últimos días.