Capitulo Seis: "Cumpleaños ¿Feliz?"

260 27 8
                                    


Capitulo Seis

Estuvimos dos días en la mansión Gregor, hoy nos mudamos a nuestro departamento y Grace ha insistido en que no nos preocupemos por nada, asegurando que nuestro equipaje lo enviaría con el chofer.

Estos días fueron bastante... ¿inolvidables? Al señor Gregor solo lo veíamos a la hora de la cena, ya que, tanto el como nosotros casi no estábamos en casa, Grace se empeñó en que saliéramos y aunque fue agotador, valió la pena, Para mi asombro Ryan no inventó ninguna excusa y nos acompañó los dos días. En nuestras salidas visitamos algunos museos, mirador, parques y varios restorán de comida típica, exquisitos, el problema fue que el segundo día, exasperada por nuestro poco romanísimo Grace nos obligó a mirar hacia su cámara en incomodas poses de enamorados.

-Ryan, cariño, no seas tímido, eso, tómala de la cintura, Madison, sonríe no te pongas tan seria... que maravillosa fotografía... ahora ¿podrían darse un beso? Que no les de vergüenza.

Intenté apartarme pero Ryan indiferentemente posó sus labios sobre los míos manteniéndolos varios segundos asegurándose de que no hubiese que repetir la toma, por más que reprimí mis sentimientos estos me traicionaron y generaron un revoltijo en mi estómago.

****

El departamento es realmente bonito, se nota el toque de Grace en cada espacio, la habitación principal está diseñada para que un matrimonio conviva cómodamente, es muy espaciosa, cuenta con un gran armario y un cómodo baño que invita a relajarse en su espaciosa tina. Lamentablemente Ryan se ha adueñado de él y tendré que conformarme con el pequeño cuarto de visitas que para mí está perfecto.

A los minutos de nuestra llegada suena el timbre y son las personas que Grace le ha encargado traer nuestras pertenencias, pero para nuestro asombro traen mucho más de lo que nos pertenece, Grace ha comprado un monto de ropa para cada uno. Carmen y Cristina han venido acompañada de una tercera empleada.

-Señor Ryan, Señorita Madisson, ella es Doris y ha sido designada por la señora Grace para ayudarles con el departamento-

-miro a Ryan desesperada, realmente no es necesario contar con alguien, estamos acostumbrados a llevar una casa, pero Ryan solo se encoge de hombros y sigue haciendo sus cosas-

-vendrá tres veces a la semana y se encargara de todo lo que necesiten, ahora si nos disculpan acomodaremos todas estas cosas-

Las mujeres se dirigen a la habitación matrimonial y allí acomodan todo lo que han traído. Una hora después volvemos a estar solos.

Enciendo el televisor con ganas de poner algo de música pero llama mi atención la notica que justo están pasando:

-en tan solo un mes se llevará a cabo el juicio de apelación del señor William Di Stefano, en diversos países se han llevado a cabo manifestaciones, debido a que su reinado de oscuridad afecto negativamente a varios lugares del continente, todos esperamos un fallo negativo para Di Stefano, confiamos en que la justicia actuará correctamente-

Ryan está a mi lado escuchando la noticia, no hacemos comentario alguno y rápidamente pongo música para olvidarnos del tema, me da mucho miedo solo imaginar que quede en libertad, mi padre, los padres de Ryan y muchas personas más trabajaron duro para poner fin al caso empresarios, por eso no es una opción que ese hombre quede en libertad.

Antes de que comience a atardecer escojo uno de los libros que hay en el estudio y bajo hasta una pequeña plaza que se encuentra justo en frente del edificio en que vivimos me refugio de este clima caluroso bajo la acogedora sombra de un árbol. Cuando estaba en lo mejor de mi libro siento una extraña sensación que me recorre de pies a cabeza, levanto la vista de mi libro y noto que a lo lejos hay una pareja que están mirándome, intento ignorarlos y volver a concentrarme en mi libro pero no puedo, asique opto por volver al departamento.

Corazón en Bruto (Reescribiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora