¡Daddy! Neuer

Capítulo 25.

-Pues...Naomi sabe que soy tu novia- Hablé en voz baja- ¿Le contaste?-  Preguntó sonriendo, negué - Vio la foto - Respondí sin verlo- ¿Y cuál es el problema? - Lo miré por varios minutos- ¡Que más gente se está enterando de esto! - Él colocó sus manos en mi cintura - Eh, tranquila, yo entiendo tu posición - Besó mi cuello y sonreí con tristeza - Por favor, vamos a vivir en nuestra burbuja... - Él rió- Acepto- Nos dimos un beso y nos seguimos bañando. 

Al salir, nos secamos, Manuel se colocó la ropa que tenía y yo me coloqué una camisa que tenía guardada de él - ¡Hey, ladrona! - Me tomó por la cintura y empezó a dar vueltas- ¡Para! - Grité riendo, Manuel me dejó en la cama y me empezó a besar - Ummm...- Musitó cuando me quitó la camisa - Me levanté para que siguiera besando mi pecho y sin querer mi mano hundió varios botones del control del televisor y este se encendió - Ay, lo siento. 

A ver, Katherine, ¿Crees que esa universitaria sea la novia de, Neuer? 

Realmente,no, quién sabe si es algún familiar de él. Una universitaria jamás tendrá la mentalidad de una mujer ya graduada ¿No lo crees? 

Concuerdo contigo, él debe estar con una MUJER -Ambas rieron. 

Cambian el tema de conversación y me quedo mirando la televisión por unos largos minutos - Y-Yo, no prestes atención, Klein - Siguió besando mi cuello y puse mis manos en su pecho para detenerlo - No quiero hacer nada... - Dije un poco aturdida, me coloqué la camisa y fui al baño rápidamente. 

¿Por qué me atacan sin conocerme? Esas "mujeres" no saben todo lo que he pasado, me zafé de mi madre para entrar en las garras del mundo del espectáculo.

-Oli, abre, por favor, vamos a hablar- Manuel trata de abrir la puerta y yo me acerco lentamente para abrirla. Él me carga y me lleva a la cama para dejarme arriba de su regazo- Solo te pido una cosa... No prestes atención a esas mujeres, ese es su trabajo, descalificar sin tener base, ni conocer- Asentí - Manuel, sabes como me duele que alguien que ni me conoce diga con absoluta seguridad que no nos merecemos- Solté, agarrando sus manos - Nuestra relación no va a avanzar si prestamos atención a los demás - Asentí, de acuerdo - Ok. - Respondí colocando mi cabeza en su cuello. 

-No cambies tu actitud conmigo por una opinión ridícula de los demás, por favor- Subí la mirada y asentí. Tiene toda la razón, no puedo hundirme en la desgracia por esos absurdos comentarios, al fin y al cabo, la que está sentada en el regazo de Manuel soy yo. 

El celular de Manuel sonó y dejé que contestara. Empecé a configurar la televisión y bloqueé todos los canales de farándula, si los elimino de mi vida no tengo de que preocuparme. 

-Bastian me llamó, está reunido con los chicos, quiere que vaya- Sonreí - Pues ve, seguro Hannah quiere ver una película conmigo, necesitamos un rato para desahogarnos - Él asintió y me cargó hasta la entrada de la casa. 

-Despídete por mí - Nos besamos- Saludos a Bast...- ¡Manuel! ¿Ya te vas? - Hannah baja las escaleras corriendo, tiene unos hermosos botines y se ha arreglado el cabello- Si... ¿Qué sucede? - Pregunta con el ceño fruncido - Bastian me ha invitado a la reunión que tienen, me dijo que fuera contigo - Me quedo con la boca abierta mientras miro de arriba a abajo a mi amiga -Que ironía... La que se quedará sola soy yo- Ella giró los ojos- Con gusto te llevo, Hannah,  ¿Quieres venir, Oli? - Negué muchas veces - Oh no, Manu, estoy muuuy cansada y quiero dormir - ¿Y si llevo a Hannah y me vengo de nuevo acá? - Se apresuró en decir , negué nuevamente - Tranquilo, disfruta con tus amigos. Hannah, cuidado- Besé la mejillas de ambos y me despedí. 

Subí las escalera y apenas sentí la suavidad de mi cama, me dejé llevar por un misterioso sueño, en el cual había un chico rubio de tiernos ojos azules. 

-Martes-

La alarma suena y me despierto fácilmente, dormí plácidamente así que no despierto de mal humor, entro a la habitación de Hannah y no hay rastro de ella.  Me ducho, me coloco un conjunto azul marino muy elegante y bajo a la cocina para comer unos huevos revueltos, al terminar, me pongo los tacones y escucho la bocina del auto de Naomi. 

- Buenos días, que guapa estás - Saluda Naomi- Buenos días, creo que tú me ganaste. 

Le envío un mensaje a Hannah y sigo con mi rutina. 

Llegó a mí oficina y comienzo a trabajar, un señor llega con un ramo de rosas rojas y me quedo encantada al verlas - Buenas, ¿Señorita,  Petterson? - Asiento sin poder creerlo - Sí, sí, soy yo- Firmo en la planilla y me despido del señor.  Inmediatamente agarro la nota que tiene el ramo y leo:

«Feliz día, Klein»

MN

Huelo las rosas y me concentro en seguir trabajando. Lejanamente comienzo a escuchar gritos, me levanto de la silla y me voy acercando a la discusión, es mi madre, le está gritando a Naomi, me acerco en silencio - ¡Eres una hipócrita! - Doy unos pasos hacia atrás, no entiendo nada- ¡Te estuve investigando Naomi! - Grita de nuevo- Señora, haga silencio, esto lo podemos solucionar en mi oficina, como personas adultas y maduras que supongo que somos- Dice agarrándola por el hombro - ¡Suéltame!- Decido acercarme y alejar a Karen de Naomi - ¿Qué sucede aquí? - Karen suelta una malévola carcajada - Cuenta, Bailoff, cuenta... Basta de mentiras - Le ofrezco una extraña mirada a Naomi y ella luce asustada. 

-Lo mejor será que te retires, Karen, por favor - Digo señalando la salida - Cuando sepas la verdad, ¡No te quiero ver rogándome perdón! - Fruncí el ceño y caminé junto a ella hasta la salida - Hasta luego, hijita, exígele la verdad- Me guiñó el ojo y se subió en su mercedes blanco. Me quedé paralizada por unos minutos hasta que recordé que estaba redactando unos documentos importantes. 

Terminó  la jornada laboral y entré a la oficina de Naomi, luce agobiada - Hola... - Subió la mirada y me ofreció una falsa sonrisa - Sé que necesitamos hablar... Solo que no encuentro las palabras - Dijo en voz baja - Ven- La tomé suavemente por el brazo y bajamos al estacionamiento - ¿Que te parece si vamos a un bar? - Ella asintió- Con el alcohol te podrás desahogar mejor - Bromee. 

Nos subimos al auto de Manuel y me dirigí al bar más cercano. Al entrar, pedimos unas cervezas y luego de tomar varios tragos,  me dispuse a hablar - ¿Por qué Karen te llamó hipócrita? - Naomi me miró - No lo sé - Respondió mirando el mesón - ¿Por qué me dijo que me ocultas algo? - Esta vez di en el clavo, Naomi, se sentó mejor y tomó un trago largo de alcohol -Porque... Tú sabes como es ella... - Niego- ¡Por dios! ¿Qué me estás ocultando? - Ella soltó una carcajada.

-En realidad, es una historia graciosa, verás, tengo un novio- Sonreí - ¡Y no me habías contado! - La empujé suavemente - Y resulta que él...- Se quedó en silencio - ¿¡Él qué!? - Pregunté exasperada - Él es tu padre biológico. 

¡Hola chicas! ¿Qué les pareció el capítulo de hoy? Besos ♥.