Hate that i love you (Lirry) TERMINADA.

Capítulo XVIII: Odiar o querer

- Hola - Dijo Harry

- Hola Harry... - Dijo Liam algo avergonzado

- ¿Quieres que te prepare algo?

- No gracias, puedo solo

- ¿Seguro?

- Completamente

- De acuerdo, en un rato saldremos

- ¿Salir? No quiero salir, quiero quedarme acá

- A pesar de lo que pasó ayer, seguiré cuidándote

- ¡Es que no quiero que me cuides por favor!

- No, saldremos a la casa de mi madre

- Pero...

- Pero nada, ya está

- Si te tengo de cerca me voy a confundir mucho

- ¿Confundirte?

- Olvídalo

Harry vio que el castaño se regresaba a su habitación, él se levantó y tomó su mano.

- No te vayas - Dijo el rizado

- Quiero estar solo - Dijo Liam

- ¿Otra vez?

- Si, necesito mucho tiempo con lo que pasó...

- Eso quiere decir que no estás molesto

- Estoy confundido Harry, no me presiones

- De acuerdo, anda...

El rizado lo soltó y Liam caminó hacia su habitación. Harry se quedó solo en la cocina pensando: ¿Por qué él no me quiere? ¿Por qué YO lo quiero a él? ¿Por qué me está empezando a gustar ese chico? ¿Por qué lo odio?

¿Acaso lo odio? ¿O acaso lo quiero?

Subió a su habitación y se quedó allí por un largo tiempo, hasta que una llamada interrumpió sus pensamientos.

- ¿Diga? - Preguntó Harry

- Hijo, ¿a qué hora vendrás? - Preguntó Anne

- ¿Qué hora es?

- Son las dos de la tarde

- ¿QUÉ?

- Si hijo...

- Voy para allá con Liam

Harry colgó la llamada, se había despertado a las 11 y se la había pasado pensando cerca de dos horas. Se levantó de la cama, se cambió de ropa y se fue al cuarto de su "amigo".

- Liam, nos vamos - Dijo Harry

- ¿Qué? - Preguntó Liam confundido

- Nos vamos a la casa de mi mamá a almorzar

- Pero yo quiero quedarme

- No, es un almuerzo elegante donde toda mi familia asistirá

- ¿Es cumpleños de alguien?

- De mi padrastro, Thomas

- ¿Con qué ropa voy?

- Terno elegante

- No tengo ninguno

- Yo te presto

Liam se vistió lo más rápido que pudo, pero hubo un pequeño problema: La corbata

- Eh... Harry... - Dijo Liam

- ¿Qué sucede? - Preguntó Harry

- No... No puedo ajustarme la corbata

- Ah eso no es problema

El rizado se acercó a Liam y le ajustó la corbata, levantó la mirada y se encontró con unos bellos ojos color miel, unos labios rosados muy tiernos y a la vez provocativos. Harry no se resistía, la noche anterior lo había besado con mucha pasión, por poco abusa de él; pero tenía que contenerse, el castaño necesitaba de tiempo para pensar lo que sucedió. 

Por más de que quería volverlo a besar y acariciar su suave piel... Se resistió.

- Listo, vámonos

Liam subió al auto de Harry, en el asiento del copiloto. El rizado conducía bastante concentrado, no quería ocasionar un choque o algo a lo parecido, no quería problemas ni denuncias y menos pagar los daños de un coche.

Por otro lado, Liam estaba mirando la ventana, no podía esperar a llegar y desaparecer entre la multitud. El viento despeinaba su cabello y arruinaba su imagen.

- Cierra la ventana

- No puedo, esto está malogrado

- Joder

Harry detuvo su coche en el estacionamiento de una cafetería, arregló la ventana y logró cerrarla.

- Ahora péinate, no pienso llevarte así a la casa de mi madre

Liam mientras se veía en el retrovisor, arreglaba y acomodaba su cabello, cuando finalmente estuvo listo, le avisó a su amigo que ya podían partir nuevamente.

- Espera... Te falta un mechón acá

Harry desabrochó su cinturón de seguridad y se acercó al castaño y con su mano tomó el mechón y lo acomodó para un costado, junto con los demás cabellos. Subió la mirada y vio que el castaño lo miraba algo apenado.

- ¿Te pasa algo? - Preguntó el rizado

- Es que... No, no me pasa nada

Los labios del rizado rogaban por otro beso del castaño, rogaban otro beso lleno de pasión y amor. Desabrochó el cinturón de Liam, inclinó el asiento del castaño y el rizado se acomodó encima de él.

- ¿Qué haces? ¿Las lunas son polarizadas? - Preguntó Liam

- Si Liam, por eso no te preocupes - Respondió Harry

El rizado tomó a Liam de los hombros y le robó un beso completamente apasionado, nuevamente lastimaba al menor con sus dedos y su fuerza. Nuevamente se aprovechaba de su amigo... Bajó sus labios y pasó a su cuello, Liam quería gritar, quería escapar y regresar con sus padres, pero al mismo tiempo... Al mismo tiempo no quería, solo deseaba quedarse junto con Harry.

Y lo único que se preguntaba Liam era ¿a qué se debía eso?